Beautiful (Minsung)

Capítulo 33 Seúl

Jisung.

Habíamos vuelto a Seúl, Minho me dejó en mi departamento y fue a su casa, no quería dejarme solo, pero yo insistí, me sentía sumamente raro entrando a un lugar en el que no había estado antes, sólo cuando mis padres se quedaban en alguno de sus viajes. Me había acostumbrado a Hyunjin y a nuestra vida juntos, ahora él estaba con Félix y no pude evitar sentirme un poco triste.

Estaba sacando la ropa de mis maletas para ponerla a lavar cuando un mensaje entró en mi celular. Era Minho.

-Sungie, ¿quieres ir a cenar al rato conmigo?, ya te extraño.-

Al leerlo comencé a notar que una sonrisa se formaba en mi boca y mi corazón latía emocionado.

Apenas eran las cinco de la tarde, tenía tiempo suficiente para prepararme y decidí contestarle.

-Si me extrañas tanto, pasa por mí a las ocho de la noche. P.D. te sugiero traer una muda de ropa por si decides quedarte a dormir en mi departamento.-

Me sonrojé al haber sido tan atrevido, pero de solo pensar en dormir solo, comenzaba a sentirme deprimido y ansioso, estos días con Minho, me habían hecho mucho bien, y dormir entre sus brazos sin dudarlo era mi mejor medicina. Hoy definitivamente no quería estar solo en este departamento que no sentía mío, al menos no aún.

Terminé de ordenar todo y preparé también la habitación, dejé lista mi pijama y decidí bañarme para ir fresco a la cena. Elegí una camisa negra transparente y unos jeans a juego que resaltaban mis atributos. Tomé un suéter en color rojo para el frío que se comenzaba a hacer presente.

Estaba terminando de arreglarme cuando sonó el timbre del departamento. Tendría que darle a Minho la clave de la puerta para que pudiera entrar cuando quisiera. Fui a abrir y allí estaba él, tan hermosamente sexy y masculino, vestido con una camisa roja y un pantalón negro. Traía un suéter negro colocado sobre sus hombros. Creo que dejé de respirar de la emoción.

-Sungie, ¿estás bien amor?-

Dios mío, su voz. Mejor era salir o lo llevaría directamente hacia mi cama. Cerré la puerta tras de mí y lo tomé de la mano.

-Si Minho, sólo que me aceleras el corazón, te ves demasiado atractivo. Vamos, salgamos de aquí, me acabo de dar cuenta que tengo mucha hambre.-

Tomó mi mano y salimos del departamento rumbo a su camioneta, me abrió la puerta y me ayudó a subir. Me sentía tan amado en estos momentos.

-Te voy a llevar a uno de mis restaurantes favoritos, te va a encantar, ya hice la reservación y también traje una muda de ropa, me emociona quedarme contigo esta noche, espero que sean más, pero no quiero presionarte. Recuerda que también puedes quedarte conmigo.-

Yo sonreí y apreté su mano asintiendo.

-Yo también lo deseo Minho, sólo dame un poco de tiempo para poder hablar con Jinnie y Lixie. Después de eso, ya podremos hacer planes.-

Llegamos a un restaurante de los mejores en Seúl y ya nos esperaba una reservación con vista al rio Han. Todo estaba decorado de forma muy elegante y romántica.

Nos sentamos y enseguida nos llevaron el menú.

Minho pidió por los dos y yo me encontraba completamente embobado disfrutando de su compañía.

El tiempo transcurrió entre pláticas, risas, miradas y caricias en las manos, quien nos viera pensaría que éramos ya una pareja oficialmente comprometida.

La comida había estado deliciosa y ahora esperábamos los postres que Minho había ordenado.

-Sungie, ¿quieres que los pidamos para llevar?, los podemos comer en tu departamento, cómodamente acostados en la cama.-