Uno

86 11 1
                                        


—Vamos Woomin, por favor resiste. —La mano de mi novio sobre la mía se sentía demasiado cálida. —Estamos cerca, pronto llegaremos y estarás bien. Solo resiste amor.

Escuchaba voces a lo lejos, mi tío me pedía que no me fuera. Las imágenes eran cada vez más borrosas y me costaba demasiado el respirar. Para entonces ya no podía escuchar a Jugnkook y mis ojos se cerraron en su totalidad.

Paz, eso era lo que sentía. Me sentía en un sueño en donde estaba descansado. Me veía a mi misma caminar en la orilla del mar y en cada uno de los escenarios era Jeon Jungkook quien se encontraba a unos pasos adelante. Me sonreía y pareciera querer guiarme a algún lugar. Lo malo de todo es que nunca podía tocarlo o hablarle, siempre era lo mismo,. Yo trataba de seguir sus pasos. Hasta ese día, en donde su cuerpo se fue convirtiendo en polvo y todo mi sueño se fue cayendo a pedazos.

¡Quizás es hora de despertar!

Una luz resplandeciente perturbó mis ojos y me costaba respirar. Sentía frío y dolor.

—Doctor Li, doctor Li. —Un hombre apuesto gritaba el nombre de mi tío y desconectaba lo que parecieran ser unos cables. Fue entonces cuando me percaté que estaba en una cápsula trasparente y yo vestía con una bata blanca. —Se lo dije doctor, su cerebro nos estuvo dando señales, Woomin despertaría pronto. Lo logró doctor Li, Woomin volvió.

Tenía muchas preguntas, la primera es porque estoy en una cápsula y el cuarto parece ser el de un hospital. Lo último que recuerdo es un automóvil venir de frente en el mismo carril, la luz me dejó ciega y recuerdo el impacto, aún puedo sentir los pedazos de vidrio inclustarseen mi piel.

—Arregla la cama, debemos sacarla. — Mi tío esta llorando y no se el motivo. —Mi niña, yo sabía que volverías. —Me tocaba el rostro con temor a lastimarme y sonreía mientras aún lloraba.

Jungkook, él venía con migo.

—Jungkook, quiero verlo... Jungkook venía conmigo. Tío, necesito verlo y saber que está bien.

Mi tío acunó mi rostro con sus manos y me hizo verlo.

—Jungkook está bien, no debes preocuparte por él.

—Pero el venía en el mismo automóvil, y si le pasó algo y no me quieres decir...

—Woomin, créeme cuando te digo que él está bien.

—Pero tío, yo necesito verlo. —Supliqué.

—Lo verás, te lo prometo pero necesito que te calmes.

—Doctor Li, la cama está lista. — y ahora que yo podía ver y escuchar mucho mejor lo reconocí.

—Kim Namjoon, eres tú! Por Dios Kim! Estuvimos en la fiesta de Alina un día antes del accidenté. —Nam me cargo con cuidado y me llevo hasta la cama. —Kim NamJoon. —Grite emocionada. — Como pudiste cambiar tu color de cabello tan rapido? Solo ayer lo tenías rubio. —Nam y mi tío se miraron. —Aunque el negro te hace ver mucho mejor y más sexi Kim.

—No digas esas cosas en frente del doctor Li. —Nam se sonrojó, típico de él. Recuerdo que hace una semana Jungkook se puso celoso porque le dije a Nam que era muy lindo y es que como no decirle lo lindo que es, si Jungkook no fuera mi novio yo estaría haciendo de todo para conquistar a Kim Namjoon.

—Tenemos que revisar que estés bien Woomin, queremos descartar que hayas quedado con secuelas. —Fue mi tío quien empezó hacerme la rutina que le hacen a todos los pacientes que an sufrido un accidente automovilístico. —Todo parece estar normal. —Y otra vez se están viendo como si fueran cómplices de algo.

—Que es lo último que recuerdas Woomin? —Nam se acercó con una jeringa.

—Paraque es eso?

—Esto? —Señaló la jeringa. —Es para sacarte un poco de sangre. —Sonrió y tomó mi brazo. —Ahora responde, que es lo último que recuerdas?

Mire a mi tío esperando una señal para poder responder, Dios! Solo soy una niña de dieciséis años.

—Jungkook y yo veniamos de comprar algunas cosas para la graduación. Estaba por llover y un camión se desvió de su carril he invadió el nuestro. —Aún podía sentir el miedo. —luego de eso solo recuerdo la voz de Jungkook y de mi tío.

Ahora que lo recuerdo mi vestido se debió haber perdido.

—Tío, mi vestido. Yo necesito otro o no me podré graduar. —Traté de levantarme y mis pies me fallaron pero justo antes de poder tocar el piso, Nam me sostuvo. —Tío, por favor la graduación será en un día.

Ambos se veían y yo ya no sabía que pensar. Lo único que me importa en este momento es que mi vestido y Jungkook estén bien. Estoy segura que seremos la pareja más linda de toda la graduación.

—Como lo hablamos doctor Li, su tiempo se a distorsionado.

Ahora es yo quien los veía. No estaba entendiendo nada.

—Doctor Kim, dígale a los médicos que está prohibido la entrada a esta área.

¿Doctor Kim? Pero si solo ayer era un interno más.

—Está seguro? No cree que aún es muy rápido para que sepa la verdad? Doctor Li, debe pensarlo bien.

Y es entonces cuando me fije en esos pequeños detalles que había pasado por alto. Nam traería su carnet que lo identificaba como un doctor más y por el color de su brazalete sabía que es el jefe de algún área del hospital. Y ya no es un adolescente, ahora parece todo un adulto sexi y adinerado. ¿Un día puede cambiar tanto a las personas? Luego estaba mi tio, él tenía algunas canas y sus ojos estaban cansados.

No estaba entendiendo nada. Negué con mis ojos lloros.

—Quiero a Jungkook, lo quiero conmigo. —Les suplicaba, él era el único quien me podría entender y cuidar.

—Ya es hora que lo sepa! —Mi tio estaba por decir algo que cambiaría mi vida. Nam asintió —Woomin cariño, ¿Cuanto tiempo crees que a pasado desde el accidente?

¿Por que pregunta eso?

—Uno o dos dias quizás. —Respondí tratando de sonar segura.

Frustración y culpa fue lo que vi en el rostro de mi tío.

—Doctor Nam, tenga todo listo en caso de una recaída. —Mi tío me tomó de los hombros y sabía que algo malo diría. —Cariño se que será difícil de creer... Pero desde el accidente an pasado diez años.

Y entonces sentí como si hubiera perdido una gran parte de mi vida y que gran razón tenía. Estaba por descubrir que todo era diferente.

MIENTRAS DORMÍAS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora