MIENTRAS DORMÍAS

Diez

Recuerdo caminar por la orilla de mar, la arena estaba adornada de rosas blancas y a diferencia de todos en donde el protagonista era Jeon Jungkook ese sueño fue diferente, miraba aún chico el cuál no recuerdo haber visto su rostro, él me esperaba y agarraba mi mano y por primera vez no estuve persiguiendo a Jungkook o tuve que caminar sola.

—Es idéntico! —Traze la pintura con mi pulgar. —Como puede parecer mi sueño plasmado en un cuadro?

Ese cuadro en especial me trasmitía paz y me sentía en casa. ¿Como una galería de arte puede ser lo más parecido a mis sueños?

—Está prohibido tocar las pinturas y en especial esta!

Una voz gruesa y juguetona resonó por detrás de mi espalda. Aleje mi mano sin esperar otra advertencia.

—Yo lo siento...

Al toparme frente a frente lo mire.

—Otra vez tú?

—Lo mismo digo, seguro el destino nos quiere ver juntos, no crees?

Ame su sonrisa, Kim Taehyung había vuelto a encontrarme.

—O tú me persigues y eres de esos obsesivos que quieres secuestrarme para jamás dejarme ir. —Me burle.

—No me des ideas Ji-Woomin. —Pareció pensar. —Este no será el lugar adecuado para secuestrarte sabes!

—Entonces cual es el lugar adecuado?

Se acercó y me susurro.

—Vamos a mi departamento y te muestro el lugar Perfecto!

Hasta entonces Jeon había sido el único hombre en poner mis nervios a punta de flor, esa seria la primera vez en que Kim Taehyung me haría sentir algo así, una corriente eléctrica bajo desde mis pechos hasta mis piernas.

¿Estoy hormonal?

Se alejó y volvió a sonreír como si no hubiera dicho nada hace unos segundos.

—Estas disfrutando? No pensé que te gustará el arte. —De seguro percibió mis nervios y quiere hacer el ambiente cómodo.

—Vengo con unos amigos. —Le sonrei ya más calmada. —Y es verdad?

—De?

—Que no se pueden tocar? —Me referí a la pintura. —No te parece algo tonto? El arte se hace para apreciarlo ¿De que sirve si no lo puedes tocar?

—Veras. —Metió las manos en los bolsillos de su pantalón. —Es verdad, el arte se hace para apreciarlo, pero no necesariamente tienes que tocarlo...Mientras más lo toques durará menos y luego si intentas hacerlo igual no será lo mismo. Por eso es que todo lo que está en esta galería son cuadros únicos y muchos de ellos tardaron años en terminarse, esa es la razón por la que muchos cuadros no están a la venta o cuestan demasiado dinero.

—Y que tiene este cuadro en específico? —Lo señale y Tae volvió a sonreír.

—Que ese cuadro que tú estabas tocando con tus lindas manos, cuesta diez millones de dólares y además del dinero es un cuadro muy especial porque tiene un sentimiento de por medio.

—Entonces está a la venta? —Y seguí mirando esa pintura, algo tan lindo tenía un valor? Incluso la cantidad me parecía muy baja.

—No, el precio es nomás por adorno, no se vende. —Tae también veía ese cuadro. —Woomin. —Lo mire y él ya lo hacía. —Tu quieres ir por un helado?

Un helado no se lo negaría a nadie, estaba por respóndele cuando alguien más llegó

—Kim, es mi última oferta. —Un señor de no más de unos cincuenta años llegó junto a una mujer. —Te doy veinticinco millones por "Ella" —Supuse que era el nombre de la pintura, pues todas las vistas fueron para el cuadro.

—Lo siento Señor Choy, puede escoger cualquier otro, como le dije momentos atrás pero menos esta.

—Es una lastima. —Observó por última vez él cuadro. —Podrías ganar mucho con esta pintura Kim.

—Lo se, pero no puedo vender esta pieza.

¿Espera que? Vender ? Eso quiere decir que...

—En fin, toda tu galería fue una obra de arte Kim, esta vez elevaste mis expectativas. Me voy muy contento por todo lo que vimos hoy y también aprovecharé por llevarme las mejores.

—Es un placer saber que todo fue de su agrado señor Choy. —Tae hizo reverencia

—nos vemos luego Kim, hasta luego señorita. —Él señor se despidió.

—Te lo digo desde ya, toque la pintura más no la dañe. —Le mostré mis uñas. —Ves? ni siquiera están largas.

Tae se reía, no tenía que enojarse? Casi daño su mejor obra de arte.

—No fue para tanto, por cierto tus manos me gustan.

Ambos nos vimos con una sonrisa sincera y felicidad mutua.

—Entonces cuando me dirías que eres un pintor y uno muy bueno? Dios! Kim, todo está lindo. — Aplaudí. —Sabes de pequeña dibujaba, bueno podía hacer mariposas pero esto es otro nivel. —Me di una vuelta completa para mirar todos los cuadros y sentir que estaba en uno de mis sueños. Me di el lujo de cerrar mis ojos. Al abrirlos Kim seguía ahí. —Señor, es de mi agrado infórmale que soy su fan número uno. —Hice reverencia. Para luego echarnos a reír ambos.

—Te creeré si vamos por ese helado!

Tenía que decir que si, es mas quería decir que si. Pero Minyi, vine con ella.

—Es que no vengo sola. —Señale a Jin y Minyi quienes estaban entretenidos con un cuadro.

—Vienes con Kim seok-Jin y su esposa! —Los miró. —A ellos no les importará si te vienes conmigo. —Tomó mi mano.

Una mano cálida y suave.

—Esto es un secuestró?

—Averígualo.

...
La trama viene desde aquí 😩 me costo mucho decidir en qué momento juntarlos, me pareció muy precipitado desde los primeros capítulos pues quería que entendieran mejor todo

Si les gusta recomienden por favor 🤍