Someone you loved •Dramione

꧁ 𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 26 ꧂

Hermione despertó sobre el suelo frío y húmedo de lo que parecía las ruinas de algo, una construcción, una casa, algo grande que había sido destruído. Le dolía la cabeza y su cuerpo parecía haber sido lanzado contra el concreto sobre el que estaba porque le dolía cada hueso.

Se incorporó hasta quedar sentada y se tomó unos minutos para recuperar la conciencia. Estaba rodeada de un terreno inmenso que parecía estar cerca del bosque. Lo que sea que le hubiese pasado a ese lugar parecía haber ocurrido hace mucho tiempo, la naturaleza había hecho su camino y había empezado a tragarse partes de la destrucción.

Cuando sus recuerdos la golpearon sintió que se hundía en la tierra por lo abrumador que era. Se supone que vería a Draco esa noche, huirían al día siguiente a otro continente y se irían. Draco estaría esperándola y ella no estaría ahí.

Estaba en cielo abierto y aún así sintió que se ahogaba. Se puso de pie y buscó su varita, necesitaba regresar cuanto antes, tenía que regresar con Draco. Llevó una mano a su cuello para buscar el anillo que debía que colgar de ahí, entró en pánico cuando este no estaba ahí.

—No. No, no, no— Se tiró al suelo de nuevo y comenzó a buscarlo entre los escombros, entre las ranuras y la tierra. Debía estar ahí, Draco le había dicho que el anillo debía aparecer con ella si ella daba un salto en el tiempo de 2003 en adelante porque el anillo le pertenecía desde que Draco se lo dio para inspeccionarlo en el Ministerio de Magia en 2003. Cuando ella había viajado atrás a sus años de Hogwarts había aparecido en casa de Draco porque aún no le pertenecía a Hermione en ese tiempo. Por ello debía estar ahí, no se podía haber perdido.

Sus uñas se habían llenado de tierra y las rodillas de sus jeans se habían ensuciando de tanto buscar. Se sintió realmente estresada y asustada al no ver el anillo en ningún lado.

—Accio anillo— Dijo una y otra vez, pero el anillo no apareció.

—¿Buscas esto?— Preguntó una voz chillona detrás de ella. Se giró tan abruptamente que casi cae. Una pequeña elfa estaba a unos seis metros de ella sosteniendo el anillo entre sus pequeños dedos. Hermione suspiró aliviada y se dejó caer al suelo para tomarse un respiro.

—¡Si! Muchas gracias, pensé que lo había perdido— La elfa entrecerró los ojos y se giró para comenzar a alejarse de ella —¡Hey! ¡Espera!—Hermione se puso de pie y comenzó a seguirla casi corriendo por lo rápido que se estaba alejando. La elfa siguió y siguió caminando hasta el final de las ruinas donde comenzaba lo que parecía ser un antiguo jardín. Finalmente se detuvo frente a lo que parecían lápidas rotas. Estaban detrás de ellas por lo que no podía ver el nombre en ellas, pero tal parecía que alguien se dedicaba a limpiarlas regularmente por que el suelo al rededor parecía haber sido cuidado.

—Tu debes ser Hermione Granger— Dijo la elfa con un tono de voz dulce y bajo. Estaba de espaldas a ella mirando las lápidas, poco a poco se giró hasta verla de frente —Tu no me conoces, pero yo a ti si. Te ví en la mansion Malfoy con el joven Draco hace mucho tiempo. Se que eras su novia.

Hermione sintió aquello como una bofetada en el rostro. Para ella habían pasado solo unos minutos, pero Dumbledore la había obligado a regresar a 2003, habían pasado varios años entre aquel día y este.

—¿Me viste?

—La señora Malfoy me contrató hace años como su elfa doméstica desde que Dobby se fue. Mi señora no ha sido más que buena, necesitaba alguien que cuidara su hogar y lo mantuviera limpio, y ahí estuve yo— Hermione negó confundida.

—No sabía que los Malfoy tenían otro elfo, Draco nunca me lo dijo.

—El joven Malfoy me pidió dejar la mansión aquel día, pero tenía que asegurarme de que todo estuviera en orden. Así que te vi— La elfa pasó sus ojos saltones por todo el cuerpo de Hermione, la miró como si estuviera comprobando que se tratara de la persona que había visto aquella vez —No has cambiado mucho, te vez casi igual— El anillo brilló entre sus dedos callosos de nuevo y Hermione recordó que debía regresar de inmediato.