Dominus |KookHope| #1.5

💎 Nueve 💎

HOSEOK   (Primera parte)

Después de una semana desde esa noche horrible en Dominans no puedo sacarme a Jimin de encima. Incluso el profesor Min ha querido saber lo qué pasa porque, aparentemente Jungkook no le ha dicho nada.

Sé que se preocupan por mi. Jimin como mi mejor amigo lo hace. El señor Min, como el dominante de mi amigo se preocupa de la preocupación de Jimin. Lo único malo en eso es que no puedo ser honesto con ninguno de ellos sobre por qué mi amo ya no es mi amo. No podría nunca traicionar la confianza de Jungkook de ese modo y si él no quiere decirle al profesor Min lo que sucede, yo no la haré.

—Estoy bien, Jimin.

—Pero, la otra noche te vi irte muy molesto y no quieres volver al club ¿Te peleaste con él?

Los dulces pucheros de Jimin me hacen querer desnudarle mi alma, pero simplemente no puedo.

—Era un acuerdo entre él y yo que se terminó, Jimin. Yo quería que él me enseñara algunas cosas, él lo hoz y se acabó, Eso es todo.

—No lo es —Interrumpe el señor Min. —Nunca terminas de aprender en el estilo de vida y ni siquiera Jimin estando en mi propiedad ha aprendido lo suficiente.

Él y Jimin son como los dos lados de un cierre de velcro, tan juntos como pueden estar, considerando que el señor Min es un docente de la facultad y Jimin un estudiante de último semestre, aunque ya no sea estrictamente nuestro profesor.

Se sienta con nosotros en el descanso entre clases cada vez que puede y acompaña a Jimin a la habitación en la residencia casi todos los días. Otras veces, ellos dos se van juntos a la casa del señor Min. Lo que significa que está muy al tanto de mi también, por extensión.

—Parece que tú sabes cosas de Jungkook que yo como su amigo no sé, y eso está bien. Lo que no está bien es el hecho de que de un día para otro se mostró cómo realmente es y fue gracias a ti, pero de la misma manera se cerró en sí mismo de nuevo. Volvió a ser el espectador silencioso en su propio club que era antes de que llegaras tú.

—Yo no le hice nada. —Me apresuro a defenderme. Si bien me empujé a Jungkook en primera instancia, no fui yo el que decidió que no podía lidiar con sus inseguridades y se alejó.

—No digo que lo hicieras. Digo que Jungkook es un completo imbécil cabeza dura por cualquiera que sea su razón y te está lastimando con su actitud. Le dije que no lo hiciera y mira cómo salió eso.

Me sorprende que el señor Min le haya dicho eso a Jungkook. No tiene que hacer nada por mi bien o mis sentimientos. Jimin es su pareja, su sumiso, no yo. Pero supongo que ese instinto dominante lo llevaría a tratar de cuidar a otro sumiso aun si no es el suyo.

Que asuma que me está lastimando, es todavía más sorprendente. No he dicho nada que demuestre que lo hace. Aunque es posible que mi actitud taciturna hable más que las palabras. Mi renuencia para volver al club es otra gran bandera ondeando.

—No me hizo daño, nunca lo haría. —Al menos tengo que aclarar eso. Jungkook no hizo nada con lo que yo no estuviera de acuerdo en el tiempo en que estuvimos juntos como dominante y sumiso.

—Pero estás triste, Hobi —Jimin me frota un brazo con pena. —Puedo verlo en tus ojos. No necesita ser una relación romántica para que te afecte. Cuando confías en alguien a ese nivel, cuando te conectas con tu Dom como no lo has hecho con nadie antes y de repente todo se acaba, es igualmente una perdida, una decepción. No puedo hablarte desde la experiencia, pero Yoongi me ha enseñado mucho en estos meses ¿Me equivoco, Maestro?

—No lo haces, amor. Todo es cierto.

Me da una punzada en el corazón ver la conexión entre Jimin y el profesor. No son demasiado obvios en público, pero desde nuestra mesa en el patio del campus lejos de las miradas curiosas son todo el uno para el otro. Sé que Jimin está enamorado del señor Min, aunque no se lo ha dicho y el señor Min le demuestra cuanto lo ama con cada gesto de cuidado que tiene hacia él. Es eso lo que yo quería, pero no pude tener.