Caos | Bbangsaz

4.

"¿Puedo ir?"

Hanni preguntó, acostada en la cama de su hermana.

"No. Ya deja de preguntar."

"Por favor."

Yujin puso los ojos en blanco, agarrando su billetera, llaves y teléfono.

"Eres tan molesta."

Hanni suspiró en voz alta. "Pero estoy aburrida."

Su hermana trató de empujarla de su cama, casi teniendo éxito hasta que ella comenzó a luchar contra la mayor, usando tanto sus pies como sus manos.

"¿No tienes deberes y cosas que estudiar?"

"Ya he hecho todos mis deberes y acabo de tomar mi último examen." Hanni realmente no quería pasar otra noche viendo vídeos de YouTube o escuchando música. Quería pasar tiempo con alguien y como sus amigos de la escuela no eran personas con las que pasaba el rato afuera, su única opción era su hermana extremadamente molesta.

"Voy con Minji." Informó, como si de repente ella perdiera el interés en arruinar su viaje al centro comercial solo porque la muchacha estaría allí. ¿Acaso su hermana era tan limitada mentalmente?

En todo caso, solo aumentó su interés en acompañarla. De hecho, disfrutaba tener a Minji cerca, mucho más de lo que quería admitir. Incluso cada vez que se aparecía se desarrollaba un comportamiento sospechoso en Hanni.

"¿Y? Apuesto a que a Minji-ssi le encantaría que yo vaya." Ella respondió, asomando su mejilla burlonamente.

"¿Minji-ssi? Deja de intentar hacerte amiga de ella". La golpeó con una almohada, haciendo que se formara un puchero en el rostro de Hanni.

Con los ojos en blanco, su hermana comenzó a moverse hacia la puerta.

"Lo sabía. Ustedes dos deben estar saliendo si no quieren que vaya. Sigue entonces, diviértete en tu cita."

Era una gran posibilidad. Burlándose de su hermana a propósito para obtener una reacción. Pero claramente, su plan funcionó porque Yujin se detuvo en su camino. Respirando hondo y buscando que ya se arrepienta de sus próximas palabras, su hermana la miró. "Bien, puedes venir. Solo no seas rara."

"Jamás soy rara."

Con una gran sonrisa alegre, Hanni rápidamente alcanzó a su hermana antes de que pudiera cambiar de opinión.

Yujin estaba tomando su coche, lo que parecía ser raro porque últimamente Minji la había estado recogiendo y dejándo. Y no, Hanni no había estado tratando de verla o tomando nota de las veces que lo hizo. Resulta que ella simplemente se dio cuenta.

En verdad no era otra cosa. Solo eso.

"¿Minji se reunirá con nosotras allí?"

"No. La vamos a recoger."

Hanni no dijo nada más durante el viaje en coche a la casa de Minji, sino que se centró en las canciones que sonaban por la radio. Cantando todas las palabras que conocía e inventando las muchas que no conocía.

Finalmente se detuvieron después de unos minutos, su hermana detuvo el coche cerca de lo que ella suponía que era el complejo de edificios de Minji.

Hanni comenzó a mirar su entorno, notando que esta definitivamente no era la parte de la ciudad en la que uno querría vivir. Finalmente, centrándose en el edificio que suponía que era donde vivía Minji, y se dio cuenta de que no era el mejor. De hecho, se veía mal. Como si alguien hubiera estado descuidando mantenerse al día con la reparación de lo que fuera necesario.