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Narrador omnipotente

-Epoc.-repitió la madre llorando.

-Maldición.

todos voltearon a ver a Nicolás que se había levantado y se salió de la sala llendose hasta el estacionamiento donde caminaba de aquí a allá asustado por el diagnóstico.

la noticia cayó como un balde de agua fría para toda la familia pero para Nick es un golpe duro por qué para el Morgan es su esperanza, su razón para mejorar, para vivir y sin ella el morirá por qué no tendrá a nadie por quien luchar.

los gemelos estaban devastados al saber que su hermana pequeña tenía una enfermedad mortal y ya muy avanzada.

Becca, Laura y Camil sus mejores amigas imaginándose una vida sin Morgan sería muy triste para ellas, ya que Morgan siempre está cuando que ellas las necesitan.

Lili que vio a Morgan en toda su adolescencia y parte de su infancia, su hija sin llevar su sangre en cama luchando por su vida

Martín estaba sentado en unas de las frías sillas pensando en por qué no insistió cuando ella lo llamó, sintiéndose culpable. Laura que había unos minutos luego de haber salido se sentó junto a él con las demás chicas y Pool.

los padres de morgan, en este momento tan doloroso se lamentan no haber estado para sus hijos más tiempo, se enfocaron tanto en el trabajo que olvidaron el bienestar de sus pequeños.

pero algo era seguro es que Nicolás Partridge no iba a dejar que Morgan Johnson muriera tan fácil ni muchos menos que se rindiera.

-Tengo que hacer algo.-dijo solo para el.

y así saco su celular y comenzó a buscar en internet todo sobre está enfermedad, leyendo sus síntomas y gravedad dandose cuenta que Morgan lleva así durante vario tiempo.

luego de pensar bien y hablar con varios de los doctores más importantes del país llegó de nuevo a la sala del hospital donde estaban todos.

-Contacte a los mejores doctores de todo el país, no dejaré que nada le pase mientras pueda impedirlo.

Y así se volvió a ir, dejando a todos con la duda de que haría para que Morgan se salvará.

•••

Spencer

Nicolás salió de la sala muy decidido, que haría no lo sé, que pensaba tampoco lo sé, lo único que si sabía era que ese idiota haría lo que fuera para mantener a mi hermana viva.

los demás se habían ido a la cafetería y habíamos quedado solo mi gemelo y yo sentados en las metálicas sillas del pasillo.

habían pasado aproximadamente cinco horas desde que llegamos aquí y todavía no puedo asimilar que la vida de Morgan está internada aquí luchando por su vida.

-Dile tu la noticia.-mi gemelo rompe el silencio.

-¿Y por qué no lo hace un doctor?, o nuestros padres.

- Ellos dijeron que es mejor que sea un familiar y todos acudimos a ti.

- ¿Cuando dijeron eso?.

la noticia de Morgan la verdad ninguno la esperábamos y menos ahora que su carrera artística iba a flote y su alegría se veía a mil kilómetros de dónde ella estaba.

para morir hay que vivir Donde viven las historias. Descúbrelo ahora