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Abril.

Ivo sonrió con suficiencia. El pequeño ser dentro del óvulo artificial qué habían creado se agitaba con vida con su pequeño hermano, desde ese momento, podían ver los colores distintivos de cada uno.

Su mayor trabajo, un trabajo que podría traerles un premio millonario a toda su familia y sus generaciones.

Y tal vez... Salvar la vida de algunas...

"Me parece que tendrá que nombrarlos, Dr. Robotnik"

¿Nombrarlos? Su abuelo ya había nombrado el proyecto.

Pero...

Eran dos y no eran para nada a las anotaciones del Doctor Gerald...

"Terios" Hablo el comandante a su lado, dando alerta a su presencia. "Me parece un nombre perfecto"

Y ese era un tono qué no admitía objeciones.

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Desde su nacimiento, hasta su desarrollo, había quedado claro que serian erizos de edades más avanzadas a simples recién nacidos. Terios seria el proyecto militar destinado a apoyar en tierra y en espionaje.

El otro erizo...

No había tenido cabeza para darle un nombre o un lugar... Su esposa había fallecido hace poco... Al igual que su hija... Lo único que le quedaba era su abuelo y su hermana, pero...

Su hermana tenia cáncer...

Temía lo peor. Le destrozaria el corazón el perderla...

Hubo unos pequeños golpesitos en un cristal y alzó la vista de entre sus brazos cruzados en el escritorio. Había estado llorando, frente al par de cápsulas del proyecto en el que estaba.

Los pequeños erizos hacian burbujas y golpeaban el cristal, intentando llamar su atención. El sonrió por la ternura qué les ocasionaba.

"No solo son el proyecto de mi vida..."

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El proyecto militar tenia décadas siendo planeado, su abuelo le heredó el trabajo una vez que necesito jubilarse, pero no era un plan el qué hubieran nacido gemelos de aquel óvulo artificial.

Aún así... Terios había sido el proyecto deseado, sus habilidades eran lo que esperaban de el, su resistencia e inmunidad. Era la cúspide y la joya de la ciencia.

Iría al gobierno.

Y al fin tenia un nombre para aquel erizo de vetas grises qué había decidido llevarlo a su casa y hacerle compañía a lo que quedaba de la familia Robotnik.

Un erizo de laboratorio doméstico.

Pero en su pequeña felicidad, había olvidado como era la ciencia en algunas ocasiones. En el regreso de una de sus conferencias, le informaron qué el erizo bicolor oscuro había "muerto".

Mephiles había muerto...

No tuvo tiempo para desquitar su ira, uno de los científicos, asustado, informo que todos los proyectos debían cancelarse. Cada uno de los antropomorfos, armas y ecuaciones serian inspeccionadas por externos del gobierno.

Externos importantes y personas que podían atentar contra la vidas de cualquiera de ellos.

Suprimirlos fue su idea, las pequeñas vidas manipuladas por sus manos no tenían la culpa, eran seres vivos, deseaban tener un lugar fuera de este mundo.

Y Terios era la mitad de la vida de su abuelo...

Pero para ningún soldado fue lo ideal, era blasfemia.

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⏰ Última actualización: 8 hours ago ⏰

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