|DRACO|Tú y Draco se evitaban el uno al otro como una especie de plaga mortal.
Estaba claro para todos que algo sucedió pero nadie sabía qué.
Después de un par de semanas, la curiosidad se calmó sobre por qué ustedes dos dejaron de hablarse, nunca quisiste que su amistad terminara, pero dolía ver su cara y saber que él no sentía lo mismo.
Draco se sintió fatal al darse cuenta de que le gustabas y empezó a extrañar cada vez más tu presencia.
Finalmente decidió que le crecieran un par de pelotas y te dijera que realmente le gustabas. Llamó a tu puerta y la abrió antes de que tuvieras la oportunidad de abrirla.
Adentro estaban tú y Fred, besándose en tu cama. Ustedes dos se volvieron hacia la puerta cuando la oyeron abrirse.
-"Draco", te aclaraste la garganta.
-"Fuera", le dijo Draco a Fred.
- "Como sea, hasta luego bebé", Fred besó tu mejilla y salió, asegurándose de darle a Draco un codazo en el hombro mientras lo hacía. -"¿qué deseas?" Draco se sintió intimidado por la mirada que le diste.
- "¿Por qué estás con él y no conmigo?" tus ojos se abrieron como platos. Te levantaste de la cama,
-"¿Por qué estoy con él? Porque realmente le gusto, ¡a diferencia de ti".
-"Rompe con él", dijo Draco.
-"¿qué?" te quedaste sin palabras.
- "Tú me perteneces", Draco ahora estaba parado justo frente a ti.
podías oler su aroma característico, haciéndote recordar todos los buenos momentos que pasaron juntos.
- "Por favor", su voz se quebró levemente mientras te miraba,
- "te amo".|ENZO|
Enzo podría haber llorado al verte con Draco. Se le revolvió el estómago al ver cómo lo mirabas, de la misma manera que solías mirar a Enzo.
Tú y Draco no estaban oficialmente juntos, pero Enzo no lo sabía.
Estaba hecho un desastre, tratando de contener las lágrimas y la ira cuando vio a Draco poniendo una mano en tu muslo. Él observó mientras te reías, jugando con sus anillos como solías hacer.
Levantaste la vista, sentiste ojos sobre ti y te encontraste con los ojos marrones de Enzo. Observó cómo tu sonrisa se desvaneció cuando tus ojos se encontraron con los suyos, sintiéndose aún más culpable al saber que la última vez que hablaste no fue muy bien recibido.
Enzo observó mientras te levantabas y le decías algo a Draco antes de dirigirte hacia él.
-"Oye", dijiste.
-"Hola", chilló; no sabía cómo hablarte porque se sentía como un imbécil sabiendo que ya podrías haber sido suya.
-"No hemos hablado en mucho tiempo", lo miraste y todo lo que sentiste hace un par de meses sobre él volvió rápidamente.
-"Te he extrañado", dijo, acercando su mano a tu mandíbula y rodeándola con su pulgar. -"Yo también te extrañé", le diste una débil sonrisa.
- "por favor no estés con él", dijo enzo y tú te reíste levemente.
-"Las rubias no son lo mío."|MATTHEO|
Oh, iba a matar a alguien. Mattheo no podía quitarte los ojos de encima mientras bailabas con tu nuevo juguete.
Era un chico cualquiera de Gryffindor, pero ni siquiera tenía que conocerlo para odiarlo. Mattheo tomó otro trago y se dirigió hacia ti como si fuera lo único que importara. Sin decir una palabra, Mattheo te quitó el juguete de niño,
-"¡¿Qué carajo?!" gritó el gryffindor.
- "¡Mantén tus manos alejadas de ella!" Matheo gritó en respuesta.
-"¿Por qué no debería hacerlo? Ella es sólo una puta de todos modos", y con eso, la nariz del chico estaba chorreando sangre. -"¡Mattheo!" Jadeaste ante la escena frente a ti.
-"Nunca te llamaría puta, a menos que sea en la cama", sonrió Mattheo. pusiste los ojos en blanco,
-"tienes problemas".
-"Estás enamorada de un chico con problemas", Mattheo te alejó de la multitud. -"¿quien dice?" comentaste.
-"La cagué, sin darme cuenta antes de que me gustabas. Pero no creo que me gustes, te amo".|THEO|
Fue como una puñalada en tu corazón cuando Theo ya no podía ni mirarte.
te hizo sentir como si acabaras de asesinar a su familia, con eso, decidiste insistir en un chico tonto que ni siquiera se preocupa por ti no era lo mejor que podías hacer y entonces decidiste encontrar a alguien a quien sí le importaras. tú.
Estabas acurrucado con Blaise en la sala común cuando Theo entró, claramente agitado por algo, pero no era tu lugar preguntar, al menos ya no.
-"¿Qué pasa con usted?" -le preguntó Blaise. -"Aléjate de ella", Theo se paró frente a ustedes dos.
-"¿qué?" Blaise y tú dijisteis al mismo tiempo.
Theo te recogió y te sacó sin decir una palabra más.
-"¡Bájame!" Golpeaste tus puños contra su espalda. finalmente te dejó en el suelo, -"tenemos que hablar".
-"No, no lo hacemos", intentaste pasar a su lado, pero él te jaló por la cintura, acercándote lo más posible a él.
- "No hay manera de que te guste", habló en voz baja en tu oído.
-"No es que te importe", respondiste.
-"Oh, pero lo hago, y me importa porque te amo. Y fui un completo tonto al dejarte. Pero te prometo que si me das una oportunidad, nunca lo arruinaré".|TOM|
Le sonreiste a Harry mientras te acompañaba a clase, dándole un dulce beso en la mejilla. -"Hasta luego", saludaste.
Tom ya estaba en clase, temprano como siempre. Sus pensamientos matutinos fueron interrumpidos cuando escuchó tu voz. Su cabeza se giró hacia la puerta cuando te vio con Potter.
sus fosas nasales se dilataron con disgusto al verlos juntos. Él sabía que te gustaban los nerds, ¿pero Potter? ¿en realidad? Él te observó mientras te sentabas en tu silla antes de acercarse a ti.
-"¿Qué estás haciendo con Potter?" su voz estaba llena de veneno.
- "Me acompañó a clase", no te molestaste en mirar a Tom.
Te agarró la barbilla y te obligó a mirarlo. -"Sólo porque te rechacé no significa que puedas seguir adelante", dijo Tom.
- "Eso es exactamente lo que significa, riddle Debiste haber dicho antes si te gustaba tanto", te burlaste.
-"Ahora me gustas y no quiero que nadie más te tenga, ¿está claro?"