SI, si es contigo. (+18) TOM KAULITZ.

Kapitiel 12.

Luego de esa noche Tom y yo decidimos tomarnos unas mini vacaciones lejos de Alemania, Tom me dijo que me tenía una sorpresa y créanme que después de Mónaco no sabía qué esperar de él, es increíble todo lo que el dinero puede hacer, Tom me pidió que no pregunte nada y solo nos dirigimos al aeropuerto y por fin pude conocer su avioneta, dios esto era demasiado lujo para mí, todo era tan elegante y sofisticado, desde el personal de tripulación que me trató como una Reyna, al parecer Tom pidió eso para mí aún no lo sé, mientras llegábamos a nuestro destino quise preguntarle a Tom sobre Georg, pues Lexi me fue a ver al hospital y cuando salí de ahí para seguir mi recuperación en casa no supe más de él, Tom me comentó que Georg y Lexi se fueron a Suiza juntos, decidieron ambos realizar un viaje solos porque tenían muchos temas de qué hablar y que no debía preocuparme, yo solo quería llamar a Lexi saber cómo estaba, se lo mucho que estaba enamorada de Georg aunque le cueste aceptarlo, conozco a Lexi hace muchos años y sé el miedo que sentía de que Georg de alguna forma pudiera hacerle daño, pero sé que Georg es una buena persona, él me salvó de morir de una sobredosis esa noche donde casi me volví loca por la desaparición de Tom, me sentí más tranquila después que Tom me contara eso, Tom sacó una pequeña caja de color anaranjada de uno de los guarda polvos de la avioneta y me pidió que lo abra, mi sorpresa fue ver un bolso de color negro con tirantes en dorado se veía bastante costosa, me dijo que era de la marca "Hermès" yo jamás había oído de esa marca si me pareció linda pero no era lo que me llamaba la atención en ese momento, tire el bolso a un lado y me coloque encima de él solo abrazándolo mientras Tom rozaba mi trasero con la yema de sus dedos suavemente, yo estaba con una blusa de color blanca larga unos shorts de franela suavecitos y tenis blancos, solo me coloqué encima de él y no pasaron ni 5 minutos donde Tom me tenía desnuda frente a él, arrancó mi ropa complemente y me pidió que le bailara que hiciera lo que hice por cámara frente a él, así que lo hice, empecé a bailarle puse una canción de lana del rey "Cherry" esa canción me recordaba el de alguna forma era como una obsesión para mí, así que solo me dejé llevar por la música y Tom iba sacándose la ropa rápidamente, yo tomé la botella de un caro vino y comencé a echármelo en todo el cuerpo, eso al parece a Tom lo volvió loco que me jaló hacia el de una manera agresiva, me encantaba cuando se ponía de esa forma, sentía como el sexo más potente cuando Tom entraba en ese papel de hombre posesivo que me volvía loca, me colocó encima de él y comenzó a penetrarme una y otra vez mientras el vino caía sobre mis pezones y Tom los lamía como si fuera una paleta dulce, tomo mis caderas y las movía de un lado a otro mientras yo solté gemidos fuertes y profundos cerca de sus oídos, bese su cuello, sus orejas todo en él olía delicioso, era un aroma amaderado pero delicado a la vez, Tom seguía penetrándome y cuando estuvo a punto de venirse yo me salí en ese instante y le pedí hacerle sexo oral, deseaba tanto poder saborear el sabor de su semen, hasta ahora no tenía la oportunidad y deseaba hacerlo en ese instante, así que me arrodillé ante él y lentamente metí su pene en mi boca hasta lo más profundo que pueda mientras tocaba su testículos eso lo prendía más, Tom empezó a excitarse de una manera caótica, gemía tan fuerte que me prendía más a mí así que seguí haciéndolo hasta que me dijo que estaba a punto de venirse y así lo sentí, su semen estaban esparcido en casi toda mi boca y parte de mis senos, dios fue delicioso saborearlo, tome lo que quedaba en mis senos y los lamí, Tom me miró con un rostro de sorprendió y me preguntó dónde aprendí eso, claramente no le diré que era una niña experimentada y que solo esto me nacía de lo más dentro de mi, así que le dije que ya lo había hecho antes pero con él fue diferente, a lo que Tom me tomó del cuello y con una pistola me apuntó a la cabeza, y me dijo "DESPUÉS DE MI NO EXISTE NADIE MÁS, TÚ ERES SOLO MÍA, NO ME HAGAS UTILIZAR ESTO PORQUE SÉ PUEDE PONER FEO" Dios me dio un escalofrío en el cuerpo cuando me dijo eso, así que solo bajé la mirada y el me tomo entre su brazos y me llevó hacia la cama solo a disfrutar de las pocas horas que nos queda hasta llegar a nuestro destino, no tenía idea a donde iríamos esta vez, era distinto ya no estaba Lexi conmigo así que Tom tenía todo el poder sobre mi, me acosté con él hasta que llegó la azafata y nos dijo que debemos abrocharnos los botones que estábamos a punto de aterrizar, yo solo vi una grande isla, desde el cielo era una gran vista, no puedo creerlo estamos en "Ibiza" esto era demasiado, la isla del deseo era el nombre apodado para esta pequeña ciudad, llegamos y ya una camioneta nos estaba esperando afuera cuando salimos del aeropuerto Tom estaba algo extraño, vi que reviso el celular unos segundos y luego lo guardo y llamo a alguien, no tengo idea que fue lo que dijo porque hablo en alemán, le pregunté si se sentía bien y me dijo que si que todo estaba bien, que quería divertirse conmigo estos días, que solo quería dedicarse a mi, lo abracé y llegamos al hotel nos recibieron con un trago muy exótico, todos eran tan amables con nosotros así que me dispuse a entrar a la habitación y era demasiado hermosa había una gran cama, Tom me dijo que está era la mejor habitación en este hotel de 5 estrellas que en mi vida pensé que podía conocerlo, Tom estaba cumpliendo mis sueños que era estar con él en un lugar solo para los dos, lo único que necesitaba era a él, pero algo dentro de mí no me dejaba en paz ... sentía que algo pasaba sin embargo Tom me lo hacía notar con su rostro, como si algo le preocupara pero de mil maneras me dijo que no pasaba nada, tenía mucho miedo que algo arruine esto tan hermoso que estoy viviendo con él, siento que si alguna vez Tom me llega a faltar no tengo más que hacer en este mundo, me voy con él.