Estoy en una calle de sentido único con una aventura de una noche, con una mente de una pista en tierra de nadie, el castigo a veces no parece encajar con el crimen, si hay un agujero en mi alma, pero una cosa he aprendido, por cada carta de amor es...
Me quedé toda la noche despierta esperándolo pero por alguna razón, Tom no llegaba, lo llamé y le mandé mil mensajes como una loca y no me respondía, estaba preocupándome así que llame a Georg quizá y él sabía algo, pues no, una respuesta negativa salió de sus labios, me quedé en ese apartamento toda la mañana y no podía salir a la calle ya que los guardaespaldas de Tom no lo permitían por una orden de el, así que lo que yo quisiera podrían tráemelo aquí, pedí que viniera una persona que tatuara, quería darle una sorpresa a Tom cuando llegase, me tatué su inicial, no sé que me pasaba por la cabeza para hacerlo, pero necesitaba enmarcar mi piel con algo más que sus besos y caricias, me la pasé toda la tarde contemplando mi tatuaje estaba demasiado feliz, pasaron las horas, escuché música, veía televisión y nada me llamaba la atención, llamaba a Tom y el teléfono sonaba apagado, dios empezó a darme un ataque de pánico, sentí como el aire me faltaba y las piernas comenzaron a fallarme, Tom no me respondía el teléfono y entré en un apto de desesperación extremo, eran muchas horas sin el, así que tome el licor carísimo de la vitrina y me lo bebí de un solo sorbo, en esa misma vitrina encontré un pequeño sobre trasparente con un polvo blanco, sabía exacto que era y que causaba en mi, no aguanté la tentación y aspiré esto como si fuera un perfume delicioso, sabía que esta mierda me hacía mal pero necesitaba desahogarme, estaba perdida y Tom no aparecía, no daba razón de nada, me tiré al piso y comencé a llorar de la desesperación de no tenerlo conmigo, así que opté por hacer una estupidez, tome un afilador de esos que cortan papel y me lo incruste en los brazos como si fuera a cortar un pedazo de carne, fue lo que hice, sentí como mi cuerpo sentía una paz al ver como la sangre disparaba de mis brazos hacia el piso, sé que estaba hecha mierda, pero no podía más, sentía que me moría en ese instante sin saber de Tom, realmente estaba tan loca por él como para llegar a estos extremos? Estaba muy obsesionada con todo su ser que tome sus camisas y las tenía por horas en el rostro solo para sentir su aroma, mi mente no tenía recepción en ese instante, así que solo me levanté del piso y con los brazos llenos de sangre me dirigí al baño y quería verme y vi otra Sophia, era una mujer distinta a la que era antes de conocer a Tom, tenía muchas marcas en el cuerpo y eran por el sexo agresivo que Tom tenía conmigo, le permití todo, él era dueño de mí y hacía lo que quería, por ratos le tenía temor en la manera como me envestía pero cada ves que me miraba se me olvidaba todo eso y dejaba que hiciera lo que quería, abuso de mí y es algo que le perdone, sé que debí mandarlo a la mierda a partir de ese instante, pero no pude, se arrodilló ante mí pidiendo perdón por lo que hizo, era su maldita fantasía y yo se la cumplí, perdone que llevara esta vida de mierda llena de asesinatos dinero sucio y drogas, todo esto ya era parte de mí y aún no era consciente de eso, o bueno ya iba asimilándolo, me mire al espejo una ves más desnuda con los brazos marcados y sin marcas en todo el cuerpo, y me pregunté si en verdad quería esto para mí, y la respuesta fue más que clara, SI!, quería estar con el, no necesitaba a nadie más ni nada, estoy trastornada por Tom Kaulitz, no puedo más, necesito saber de ti Tom ¿donde estas?
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