Kapitiel 15.

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-¿Dónde mierda estoy?
- ¿LEXI?

Estoy en medio de una habitación desnuda con un antifaz en los ojos amordaza atada de brazos y piernas sin entender que estaba pasando, solo gritaba por ayuda y nadie me escuchaba, sentía un olor repugnante a cigarro y humedad que se te metía por los poros y podía sentir ese maldito aliento asqueroso cerca a mis labios, pasaron horas no recuerdo cuantas pero finalmente alguien me sacó el antifaz y vi a lo lejos a una mujer  con el rostro tapado con una máscara, de cabellos rubios una silueta delgada y muy alta, y noté que poco a poco se iba acercando a mí de una manera sutil pensé por un segundo que iba a ayudarme, cuando veía que se acercaba mucho más a mí ella tomó mi cabello y me dijo "Perra no sabes con quién te metiste" yo estaba muy atemorizada por lo que estaba pasando, no podía verle el rostro pero en sus ojos verdes veía la ansiedad que le causaba mirarme sentirme cerca de ella, se acercó meticulosamente a mi rostro y lamió mi rostro, no sabía con exactitud que estaba buscando, sentí mucho miedo ya que llevaba horas llorando pidiendo auxilio en ese instante solo deseaba que Tom me salvara pero no fue así, cuando terminó su cometido me dijo esto recién empieza y alguien prendió la luces y pude ver que está habitación tenía la pinta de un quirófano, no entendía que pasaba le rogué que me deje libre muchas veces entre llantos y gritos, y simplemente nadie me oía, vi un hombre acercándose a mí de una forma brusca me soltó las atadoras de los brazos y pierna y caí como un costal de papas al piso, en ese instante comenzaron a golpearme, lo hicieron de una manera descomunal como si la ira no fuera lo único que se apodera del cuerpo de este hombre, seguía la faena y esta mujer estaba en una esquina saboreando su victoria, pude oír su risa al ver mi lamento en el piso suplicando mil veces más que no me haga mas daño, mi cuerpo estaba débil a ese punto, cuando dejó de golpearme este hombre volteo mi débil cuerpo mirando hacia abajo y pude oír el sonido de su bragueta bajando, le supliqué piedad de mi, sin embargo no fui escuchada, el procedió a penetrarme por la parte trasera y lo hizo con una ira que pude sentirlo cuando me agarraba el cabello de una manera brusca, mientras lo hacía yo solo lloraba del dolor no podía creer lo que estaba pasándome tenía a 2 personas burlándose de mi dolor, no les importo, este hombre siguió penetrándome mientras mis lágrimas salían sin parar, pude sentir sus dientes en mi cuerpo, mordió cada parte de mí como un caníbal hambriento, solo quería Tom viniera por mi, es lo único que deseaba en ese momento, cuando este hombre terminó la faena orinó encima de mi, sentí tanto asco de mi, porque Dios me estaba haciendo esto,  no entendía que hice mal y porque me estaban haciendo esto, sin embargo en ese instante cuando este hombre se fue apagaron las luces y me quedé ahí encerrada y pude sentir animales caminando por mi cuerpo, grité toda esa noche de miedo y dolor, cuando al día siguiente abrieron la puerta y alguien me tiró un balde de agua helada y desperté del poco sueño que pude lograr, desperté muy asustada y pedí auxilio sin embargo nadie me hacía caso, me pusieron un antifaz en los ojos y pude sentir ese mismo sonido de la bragueta, Dios por favor otra vez no, y este fue un hombre distinto, este hombre llevaba un cigarro en la mano y mientras se recostaba sobre mí iba apretando el cigarro contra mi piel blanca podía sentir lo caliente y el dolor intenso de una quemadura en todo mi ser, en el momento en que este hombre estaba violándome me sacaron el antifaz y esa rubia me mostró su celular en ese instante y yo en un estado moribundo pude lograr ver solo unos segundos a Tom y ella teniendo relaciones, y mientras veía ese video mi corazón no soporto más y le pedí que me matara, no quería vivir más, Tom no pudo traicionarme de esa forma, pero al ver ese video lo comprobé todo, la noche que se fue y me dejó sola por una semana estuvo con ella, en ese instante el dolor se volvió más intenso, mi cuerpo no podía resistir mas fueron noches muchas de dolor al rededor de 20 hombres pasaron por mi cuerpo sin mi consentimiento, mi cuerpo débil no podía más, le rogué mil veces a la vida que me deje morir, no podía continuar así, me torturaron de mil formas, pero lo que más me dolió dentro de todo esto que estaba pasándome es que Tom me traicionó, yo confié en el, le entregué mi vida todo de mí le pertenecía a él, así que no me importaba morir, mi mirada perdida de muchas drogas que me dieron ya no sentía nada,  estaba lista para irme de este mundo, ahí supe que ella, aquella rubia que vi alguna ves en la fiesta donde Tom me llevó de la mano era ahora mi verdugo, muchas veces me repitió que Tom era suyo y siempre lo será, que yo fui un error en su vida y se reía de mi con ella, yo solo miraba hacia mis pies, le rogué que me maté porque si me dejaba viva iba a luchar por el amor de Tom y en ese instante me sacaron de es habitación y me llevaron a lo alto de una montaña a las afueras ese Berlín, me pusieron una bolsa en la cabeza para no poder ver nada, solo me aventaron y la rubia me dijo gritándome a lo lejos "tus deseos son órdenes" así que solo me quedé ahi esperando a que la muerte se apiade de mí y me deje irme con ella, pude ver la luz y era noche, esa última noche admiré las estrellas, me encantaba hacerlo así que poco a poco fui cerrando mis ojos mientras susurraba la primera canción que oí con Tom, poco a poco mi luz se iba a apagando, ya mi cuerpo no resistía más, solo deseaba que Lexi esté bien, pero algo inesperado pasó.

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⏰ Última actualización: Jan 09 ⏰

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SI, si es contigo. (+18) TOM KAULITZ. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora