Christopher no podía dejar de darle vueltas al asunto. Había avanzado considerablemente con Minho, pero la culpa lo estaba matando. No quería que su futuro novio estuviera con él mientras fingía inocencia, pero tampoco podía defraudar a Lachlan. Aunque ya no se hablaban le tenía estima y creía que era justo que él también tuviera su oportunidad de intentarlo, independiente de la respuesta de Minho, era lo justo.
Acudió a Hyunjin antes de ir al colegio. Su amigo estaba malhumorado porque lo sacó de casa sin desayunar, pero le prometió comprarle algo en el festival. Le contó todo. Él sabía los detalles, pero no lo ocurrido recientemente con Minho. Se quedó boquiabierto al escucharlo.
— Debes decírselo —le advirtió Hyunjin, observando su pan de melón mientras meditaba—, si se entera por Lachlan o simplemente lo descubre, será peor para ti. No puedes iniciar una relación con él fingiendo que no ocurrió nada.
— Pero no quiero interferir en la declaración de Lach.
— Conoces lo testarudo qué es a veces, ¿no? —Le golpeó, molesto— Se va a adjudicar el crédito de tus esfuerzos. Esas palabras bonitas ni siquiera van con él.
— Minho lo rechazará de todos modos.
— Pero siempre recordará qué Quinlan fue un romántico empedernido y, cuando se dé cuenta de que tu romanticismo le es similar al qué alguna vez leyó en esas notas, estará muy confundido —le hizo notar—. Puedes cambiar tus caligrafías porque eres un artista en los diseños de las letras, pero tarde o temprano tendrás que escribir normal otra vez.
Christopher Chan lo pensó por un momento. Hyunjin tenía razón, pero no podía evitar sentir que algo saldría mal si se atrevía a interferir, por otro lado la verdad algún día los alcanzaría.
— Tienes razón, le voy a decir. Intentaré terminar pronto para buscarlo antes de que se vea con Lachlan
— Eso, yo te apoyo. Si Changbin interfiere, yo lo golpeo, le tengo cuentas pendientes.
Christopher se rio al escuchar a su amigo. Hyunjin era leal a todos y cada uno de ellos, los quería y era mutuo. De todos modos todavía tenía una pregunta más.
— Sé que dijiste no tomarías partido, todos te tenemos en común —comentó, ganándose una mirada tranquila—. ¿Por qué me apoyas? Sabes que si Minho y yo un día lo hacemos público nos iremos a la villa de los marginados.
— Y allí seremos vecinos, Chris —se animó a contarle, el pelimorado lo observó sorprendido—. Me alegra que otros no se den cuenta por cuestiones de seguridad, pero Seungmin y yo somos novios hace ya un tiempo considerable.
Christopher abrió la boca sin tener nada que decir. Alguna idea como tal alguna vez fue mencionada entre ellos por las ausencias de Hyunjin en el pasado, pero siempre concluyeron que era imposible. No obstante, en ese momento se sentía muy feliz de tener a alguien con quién compartir pensamiento.
Minho estaba entusiasmado por mirar los diversos números que sus compañeros acudió a mirar la presentación de los diferentes talleres. Durante la mañana eran los primeros en dar sus presentaciones, después de medio día los clubes montarían sus espectáculos.
Estuvo paseando entre las diversas exhibiciones. Incluso se detuvo con los chicos del taller de lectura para admirar sus demostraciones, no estaban todos presentes porque de ahí salían los anfitriones, pero sirvió para recordar que la verdadera vocación de Christopher era escribir. Quizás debería ser un escritor, no podría plasmar historias fantaseosas como quería, pero en cualquier ámbito de redacción era bueno. En realidad, era genial en casi todas las asignaturas.
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Lo Que No Se Puede Describir (ADLNT) (ChanHo/Bangho)
Fiksi PenggemarMinho había escuchado decir, por boca de los mayores, que la adolescencia era la edad perfecta para encontrar la felicidad, el camino de la vida, y sobre todo, el amor. A sus diecinueve años, estaba medianamente de acuerdo con ello. En medio del cao...