𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐈𝐈

582 56 17
                                    

༺𝐇𝐈𝐋𝐀𝐋༻


En una sala de parto ya no había gritos. Gojo limpiaba el rostro de Utahime mientras la felicitaba por su fuerza, él temblaba a penas, tenia sueño y moria de hambre, pero no se sentía en una posición para quejarse luego de ver al amor de su vida gritar como si la estuvieran matando, y es que así se había sentido, Ren vino rápido, pero Natsume demoro más en nacer.

Los dos se estrechan las manos con fuerza, se aferran el uno al otro mientras esperan a que limpien a la bebé.

—¡Es una bebé sana!—Fue lo que la enfermera que la traía comentó con una sonrisa, como si esa ternurita no hubiera hace un momento hecho que la madre hiciera un esfuerzo sobre humano para que nazca.

Natsume Gojo, nacida un 9 de agosto.

Estaba roja por el llanto, Utahime estiro sus brazos y con mucha emoción vio a su pequeña. Satoru se inclinó cerca mirándola con ojos brillantes inundandose de felicidad.

—Es preciosa... ya hace esacándolos como su padre.

—Y llega tarde como su madre.

—Satoru, porfavor sostenla un momento.

Él asintió nervioso pero se tomó su tiempo para tomarla en brazos, era demasiado pequeña pero lloraba como un dinosaurio, y pronto Gojo se unió a ella, las lágrimas llenan sus ojos mientras observa el rostro perfecto de su pequeña niña, habiendo soñado con una familia desde hace mucho.

—Espero que sea una niña tranquila—Fue lo que dijo la azabache mientras se acostumbraba al dolor de su cuerpo y recuperaba fuerzas, sin percatarse de su marido.

Natsu significa verano, la estación preferida de Satoru, el momento en el que conoció a Utahime, y ahora el nacimiento de su tercer amor. Los dedos diminutos se mueven suavemente a su remera, y el sonido de su respiración suave y tranquila llena el espacio cuando cede al sueño, creando un lugar de paz luego de un eterno llanto.

—Mierda.

—¿Qué pasó?— Utahime miro a su esposo.

—No puedo secarme las lágrimas, parezco un idiota.

Ella le sonríe, los dos se miran el uno al otro, compartiendo ese momento juntos con su segundo bebé.—Tendré hijos más seguido si lloraras así cada vez que nacen.—Se burló ella.

Cuando Ren nació ellos estuvieron de acuerdo en no tener más bebés por un tiempo, no porque no quisieran, sino que sus carreras requerían tiempo y dedicación, una demanda muy grande de tiempo, con lo cual verían muy poco a su hijo, razón por la cual no deseaban tener más si es que sus hijos iban ser criados solo por niñeras. Años después, Natsume vino como un accidente, Gojo y Utahime habían discutido por una estupidez, pero fue lo suficiente como para que no se hablaran por una semana entera, ocho días para ser exactos, pensando (de manera no seria) que se separarian, pero estaban equivocados y tuvieron sexo aún sabiendo que Utahime dejo su método anticonceptivo a un lado.

"No me molestaría otro" Había dicho ella cuando tenia a Natsu de ocho meses de embarazo, él respondió de la misma manera, que si quisiera tener su propio equipo de fútbol.

—Hime... gracias por hacerme el hombre más feliz del mundo.

La comisura de sus labios se elevan, agradecida con el hombre que tiene al lado y que la desborda de felicidad todos los dias, verlo sosteniendo a su bebé con sumo cuidado como si fuera un delicado cristal la emocionaba, era una imagen que se guardaria por siempre.

𝐇𝐈𝐋𝐀𝐋 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora