𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐗𝐕𝐈𝐈𝐈

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༺𝐇𝐈𝐋𝐀𝐋༻


Ahí estaba en el hotel mientras Akari le decía lo imprudente que fue al intentar golpear a Sukuna y que ella estaba esperando y rezando que el club no le fuera a poner una sanción por lo que paso, ellos se pechearon pero lograron separados a tiempo antes de que pase a mayores y Gojo tenía el ego por las nubes que pensaba que no importa lo que haga, él no necesita del club, el club lo necesita a él para mantener el prestigio, tiene millones de ofertas de otros clubes, era requerido en todos lados, incluso un club en Arabia ofreció un contrato billonario.

Gojo se llenó de una ansiedad que no le permitía estar sentado, le importaba una mierda el veredicto del club, tenía una ferviente inquietud que solo se calmaria con la verdad, no sabía si Sukuna Ryomen se follo a Utahime como dice, pero la idea se volvió oscura dentro de su cabeza. No importa cuánto lo ignore, tiene ganas de llamarla y preguntarle, desquitarse con ella y exigirle la verdad, de si fue capaz de hacerlo, pero hablarle solo probaría ante todos que le importa, que ese hecho le molesta, no puede quedar como un loco obsesivo por más que ahora mismo se sienta uno.

—¡Maldito hijo de puta!—Maldice sin paciencia—¿Por qué me detuvieron esos estúpidos? ¡Pude romperle la cara por decir eso!

—Te iban a suspender o lo harán, mira amor, ya falta poco para el mundial, estas a días de irte así que no te metas en líos.

Akari seguía molesta, ella, su representante, la única que estuvo para él. Siempre le prohibió que hable mal de Utahime u opine de su matrimonio, estuvo equivocado todo el tiempo.

—¿Tienes una amiga en Turín?

—Claro ¿Qué hay con eso?

───※ ·✦· ※───


Natsume estalló en risas y luego en un tono cantarín exclamo—¡Papi perdió partido!~ ¡Papi perdió el partido!~ —Se burlo de una forma juguetona e inocente, pero también lo hacía para dejarle en claro a su niñera que no le estaba prestando atención, a la pequeña le gustaba molestar y sacar de quicio a todo el mundo.

—Dios santo—Inhala y exhala Nobara—, por favor ponte el uniforme o llamo al hombre de la bolsa.

—¡No hasta que encuentres a Jogo!

Como Gojo fue a jugar un partido en Alemania y le tocaba con los niños, ellos estaban al cuidado de Nobara y eso era el estrés total de la joven de cabello corto. Estaba por perder la paciencia pero contaría hasta el infinito para no hacerlo.

Ren y Megumi terminaron de ver el partido y se apresuraron para ponerse el uniforme mientras comentaban sobre los altibajos de ambos equipos y la polémica expulsión del defensor Sukuna Ryomen, todos en redes comentaban que no les pareció falta, pero para la mayoría si y una que correspondía a roja perfectamente.

—Meg, ¿Qué sabes que las chicas?

—¿Qué se?—Pregunto distraído mientras intentaba ponerse la corbata, nunca fue bueno en eso así que su hermana se lo dejaba preparado, hoy Tsumiki no estaba porque se fue a dormir a la casa de una amiga del colegio y tampoco se lo dejo listo.

—Me refiero a que sabes de ellas, ¿Tuviste novia o algo?

—Tenía una novia en Japón pero terminamos porque me vine aquí.

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