༒︎ Código Explosivo - 𝐁𝐍𝐇𝐀 ༒︎

༒︎ Capítulo 4 ༒︎

A la mañana siguiente al llegar a la escuela el primero en interceptarme fue el chico de cabello rojizo, el dichoso compañero de Katsuki e Izuku, Kirishima.

—Buenos días, ¿Tsuriko cierto? —asentí sonriendo.
—Buenos días, Kirishima-san, no quiero ser grosera, pero preferiría que mis compañeros se refieran a mí por mi nombre Sasaki—, hice una leve reverencia sorprendiéndolo bastante, era mi manera de ahuyentar personas ya que todos temen a alguien educado con quien no se puede lidiar.

—Increíble, de verdad es sorprendente que alguien como tú sea amiga de Bakugo.
Yo no llamaría nuestra relación como la de unos amigos, en realidad nos soportamos apenas. Sonreí y caminé a mi salón siendo seguía por él.

—¿Cómo les va en clase? Me comentaron algunos amigos de tu clase que es difícil lidiar con su tutor.
—De hecho sí, es demasiado estricto pero sé que eso nos hará más fuertes—, cambió de expresión y revisó su celular. —Eso me recuerda que hoy tenemos un enfrentamiento en los campos Gamma, cielos.
Mi espíritu entrometido me hizo fijarme en la hora a la que sería el combate de la clase. —Grandiosa coincidencia, la clase H tiene descanso a esa hora. Tal vez vaya a verlos. Me voy para que no llegues tarde a clase, ese profesor Aizawa se ve terrorífico desde lejos.

Sentí algo bastante extraño en mi cabeza, como si algo se hubiera apagado de la nada.
—Veo que infundo terror incluso en otras clases, no me sorprende—, mi piel se erizó al escuchar esa grave voz. —Kirishima, ¡A tu salón! —, noté la cara de miedo en él, además logró susurrarme un “perdón” antes de darse la vuelta e irse.

Me di la vuelta fingiendo la mejor sonrisa que pude para encarar a ese dichoso profesor, al verlo con sus ojos rojizos y cabello erizado debido a su don entendí que Eraser-Head no era un hombre con el cual jugar a la valiente.
—Mis disculpas profesor Eraser, llego tarde a clase—, sin más lo rodeé y entré a mi salón.
La clase se resumió en un repaso de los principios del desarrollo de tecnología. Esas leyes establecidas por I. Asimov, el RTDC, S. Nadella y Tilden, leyes que podía asegurar todos en la clase ya conocemos de memoria.

—¿Harás algo en tu descanso Tsuriko? Pensaba crear un bebé que tengo en mente, un robot disfrazado de ave, capaz de disparar a largas distancias, ¿No sería increíble?
Sonreí para Hatsume y tomé una libreta con una pluma, —agradezco la oferta, pero me daré el lujo de la sorpresa para cuando regrese. Tengo un compromiso con la clase A.
—Oh, bueno. Saluda a Midoriya y a Uraraka de mi parte—, me despedí y fui al campo Gamma donde sería la práctica de los chicos, no podía negar que me entusiasmaba la idea de ver un combate entre estudiantes del curso de héroes, más porque había cierto evento en el que quería tener ventaja.

Al llegar a las puertas un robot me interceptó pidiendo mi identificación. Sonreí y se la entregué sin pelear. Pronto una luz roja se encendió y me negó el paso.
—Estas cosas son demasiado lindas, y dolorosas de ver—, solo un pensamiento bastó para cambiar las normas de ese robot.

Acceso autorizado.

Más simple de lo que parece. Entré y me escabullí entre los edificios buscando el desarrollo de las peleas. Al ver las cámaras en los edificios suspiré y congelé las grabaciones por donde pasaría, todo esto era como un juego de niños si no fuera porque había personas que sí podían verme si me equivocaba de edificio.
Escuché voces y me oculté para ver salir a Katsuki y a un chico de lentes del edificio, por lo que decían descubrí que sería el primer encuentro. Una vez se fueron entré al edificio de donde salieron y usé el mismo método para que las cámaras no me descubrieran.

Amplificación de frecuencia

Activé mi visor de mi arete y comencé a escuchar voces arriba de mí, estaban a unos cuantos pisos.