¿Qué hay de malo en un trabajo?
Donde Draco termina enamorandose de la persona a quien menos imaginaba y donde Emma termina enfrentando su pasado con dolor.
¿Será mas fuerte su amor que una guerra mágica?
• 𝐚 𝐃𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐌𝐚�...
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EL RUIDO DE TODOS LOS ESTUDIANTES SE ESCUCHABA POR TODO EL GRAN COMEDOR, mientras los nuevos eran asignados a sus casas, el alboroto era cada vez mas. Una vez terminaron, el profesor Dumbledore no tardo en dar su discurso de siempre, permitiéndonos a todos comer en paz.
—Quieres. Dejar. De. Comer.— Hermione golpeó el hombro de Ron con su libro por cada palabra que decía —Tu mejor amigo esta perdido.
—Oye cálmate— habló con la boca llena —Mira quien viene ahí— levantó su mano para señalar hacía la entrada.
Todos nos giramos para ver a Harry caminar hacía nosotros, demasiados sorprendidos al ver que tenía sangre en la nariz.
—Otra vez tiene sangre ¿por qué siempre esta sangrando?
Harry se sentó aun lado de Ginny, tomando un pañuelo para limpiarse. Hermione aprovecho el estar frente a él para acercarse y susurrarle.
—¿Dónde estabas? ¿Qué te paso?
—No es nada... ¿de qué me perdí?
—Nada interesante, Harry. Lo mismo de siempre— solté un suspiro mientras me cruzaba de brazos. Últimamente pareciera que los problemas encontraban de alguna u otra manera a Harry. ¿Es que podría tener un año en paz?
Mire hacía todos mis amigos, Ron parecía estar muy relajado comiendo lo que sea que se había servido mientras decía algunas palabras que no entendíamos. Harry aun seguía limpiandose la sangre, Ginny y Hermione no paraban de mirarlo preocupadas y preguntándole que era lo que había pasado, aun que el no contesto de todas maneras.
Mi cabeza seguía doliendo, tal vez a causa de mirar la sangre que escurría de su nariz, tal vez por todos los gritos que se escuchaban, tal vez por ver a tantas personas en un solo salón. No estaba segura, ni siquiera me había dado cuenta que tenía la mirada pérdida en algún lugar, no hasta que enfoque mi vista. Mis ojos miraron la silueta de aquel chico rubio que había estado observando por varios años, parecía aburrido, decaído, algo totalmente raro para ser él. Debería de estar burlándose y riéndose de sus compañeros ¿qué le pasaba ahora?
Mi respiración se atasco en mi garganta cuando el me devolvió la mirada, mirándome sin ninguna expresión, pero definitivamente algo confundido a juzgar por su ceja levemente levantada.
—¡Emma! ¿Me estas escuchando?— la voz de Hermione me sacó de todos mis pensamientos, logrando poner mi mirada hacía ella —¿Qué les ocurre ahora a todos?
—Lo siento, estoy muy perdida— relami mis labios —¿Podrías decirme que pasa?
—Pasa, que ahora Snape será nuestro nuevo profesor de Defensa contra las Artes Oscuras, hay un nuevo profesor de pociones— me señaló con su cabeza la mesa de profesores. Miré a todos y cada uno de ellos, hasta que mis ojos escanearon al nuevo sujeto que sabía, era nuestro nuevo profesor.
