Jungkook sonrió y Taehyung frunció el ceño mucho más al ver el rostro divertido del demonio.
—¿Sabes en lo que te has metido? —se acercó al humano, acorralándolo contra la cama y su cuerpo—. Maldito arrogante.
—Estoy bajo tu cuerpo —lo miró—. Ahora mismo estoy metido entre tu cuerpo y esta suave cama. Me preguntaba si de hoy en adelante podría dormir aquí en vez de ese duro mueble que tienes en la sala, realmente mi espalda te lo agradecería.
—Pero qué caprichoso.
Taehyung quiso replicar, pero Jungkook no le dejó al introducir su lengua en la boca abierta de Taehyung, este con la yema de sus dedos recorrió todo el pecho del demonio por encima de su ropa hasta llegar a su nuca y enredar sus dedos ahí.
Sin embargo, Jungkook le dio una última chupeteada al labio inferior del humano antes de separarse.
—Vámonos, ya me dio hambre —se separó del humano dejándolo aturdido ante lo que acaba de pasar, todo había sucedido muy rápido—. Avanza, ¿no querías acompañarme?
Taehyung lo miró con una ceja alzada y el ceño fruncido. Luego asintió con la cabeza y se colocó de pie. Estaba algo confundido consigo mismo, tal vez no se debería sentir bastante bien al saborear la boca del demonio, pero lo hacía.
En silencio ambos salieron de la casa, ya era de noche y el matadero donde Jungkook comía estaba muy cerca, entonces la voz de siempre llenó sus oídos, dudoso miró al demonio.
—Sí lo vas a hacer, hazlo ya —se paró a mirar la ciudad oscura—. Has rápido lo que tengas que hacer, realmente no me importa —miró al humano—. No pidas mi ayuda, estaré ocupado, así que no seas estúpido y no caigas en la trampa de algún demonio.
—Te llamaré si algo sucede —susurró antes de alejarse a pasos dudosos por la desolada calle.
Jungkook suspiró y negó con una sonrisa en sus labios para después seguir con su camino.
Mientras tanto Taehyung caminó en medio de la oscuridad, escuchando como la voz le llamaba; al estar cerca de un campo deportivo abandonado, empezó a escuchar pasos como si lo siguieran, entonces el miedo se hizo presente en su cuerpo, su corazón no pudo evitar latir con fuerza; el lugar estaba oscuro y apenas se escuchaba un ruido.
Entonces la vio. Una figura solo un poco transparente en una esquina del campo, sus manos tapando su rostro, de sus labios salía un suave llanto llamándolo, estaba vestida como había estado el día en que murió, algo simple.
—Taehyung —titubeó en un lamento tembloroso, levantando el rostro viendo al mencionado paralizado a una gran distancia de ella—. Mi niño.
Taehyung solo la miró, era ella, después de años, al fin podía ver su rostro, no había envejecido o si quiera mostraba las heridas que había obtenido su cuerpo de carne en aquel accidente. Estaba hermosa.
—Taehyung —empezó a caminar hacia Kim, quien no podía moverse de su lugar.
Los ojos de la mujer, carecían de vida, Taehyung observó con cuidado esos fanales oscuros, casi transparentes; su respiración se detuvo cuando la tuvo a pocos metros de distancia. No debía estar temblando, no cuando esto era lo que quería; tal vez le temía a lo que aquella alma penante era capaz de hacer, había sido capaz antes, le había atormentado en toda su vida.
—Mi hijo —sonrió con ternura al estar demasiado cerca de Taehyung—. No sabes lo mucho que te he extrañado —alzó su mano derecha para acariciar la mejilla ajena.
—Mamá —susurró sintiendo la caricia fría de su madre, era como si el viento gélido le atravesara la mejilla izquierda—. Yo también te he extrañado —apenas pudo decir, un sentimiento raro, tal vez de tristeza y nostalgia mezclados en uno solo, estaba en su pecho, tan fuerte como los latidos de su corazón.

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DARK HOME / KookV
Mystery / ThrillerTaehyung creía sufrir de parasomnia y padecer de algunas alucinaciones. Pero nadie debía saber, porque su imagen como alcalde se derivaría. ¿En serio eran cosas de su cabeza o eran reales? Él pensaba que estaba loco hasta que conoce una ciudad, que...