capitulo 20 la sed roja

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fue toda una sorpresa para el pueblo, durante 3 años, sanguinius creció midiendo tres metros de altura, y no solo su estatura sino también su inteligencia era más rápido más fuerte más inteligente y de una belleza que está por encima todo humano a igual que su alas blancas emplumadas tan grande como el, su personalidad era de un hombre muy amable y generoso ayudaba todo aquel que lo necesitaba

Los cazadores de magos sospechaban que en secreto se había formado un culto en la adoración a Sanguinius como un Dios en vida

Pero los Mageseeker querían averiguarlo, ya que según sus pesquisas, había un culto secreto que adoraba a Sanguinius como un dios. Se enteraron de ello tras la captura de un hombre que rezaba ante una estatua en honor a Sanguinius. El hombre les dijo que Sanguinius "era la el ángel salvación" y que el "sería el que salvaría a Demacia." Los Mageseeker habían encontrado la pista que necesitaban para investigar a Sanguinius.

Los Mageseeker no se creyaron la historia y empezaron una búsqueda exhaustiva para encontrar la verdad. ¿De dónde venía realmente Sanguinius? ¿Era realmente un ángel o solo una ilusión de un demonio? Por su parte, Sanguinius continuaba ayudando a la gente de Demacia con nobleza, y su fama y notoriedad seguían en aumento,

Mientras la fama de Sanguinius seguía en aumento, la búsqueda de los Mageseeker continuaba, pero sus esfuerzos eran en vano. No hallaron el más mínimo rastro de la verdad tras las historias sobre la naturaleza de Sanguinius, quien no sólo seguía apoyando a la gente de Demacia, sino que además, su influencia seguía extendiéndose...

tanto así que descubrieron que una casa era en realidad un templo en su honor a sanguinius era una casa grande, sus ventanas eran decoradas con vitrali, todos ellos representando sus poderes. La casa estaba rodeada de un hermoso parque, y en su interior, además de habitaciones para los fieles, había algunas para los miembros del culto, La casa se había convertido en un lugar de referencia y peregrinación en ese ciudad.

5 cazadores de magos estaban dispuestos a cualquier cosa por descobir la verdad sobre Sanguinius, incluso hablar en privado con él, pero esto fue mucho más complicado de lo esperado, ya que los fieles de Sanguinius lo seguían prácticamente a cualquier parte. Si querían hablar con Sanguinius, los Mageseeker tendrían que encontrar el momento y el lugar adecuado.

Sanguinius estaba cuidando animales de granja cuando los Mageseeker le encontraron solo. Aunque él era una persona amable y apacible, ellos estaban en una posición incómoda, por lo que los Mageseeker se prepararon para lidiar con el caso de la mejor manera posible. El jefe de los Mageseeker se acercó a Sanguinius, y sin ningún preámbulo, le dijo "Nuestro trabajo es cazar Magos, no ángeles en cuerpo humano, así que dime: ¿Eres un dios? ¿O has sido enviado por uno?

*Sanguinius de forma amable y tranquila dijo: que no era ningún dios ni un ángel. Uno de los Mageseeker enojado dijo: que no digas mentiras hemos descubierto un culto hacia ti*

Sanguinius se levantó calmadamente de su pequeña silla y se apoyó en una gran roca para responder a los Mageseeker. Él les había oído decir que habían encontrado un culto sobre su persona, pero quería responder en persona a esa información. Con una voz más seria, pero todavía con amabilidad en sus tonos, él les dijo: "Si he de ser honesto con ustedes, no sabía que hay un culto hacia mi y no es mi propósito que me adore la gente de la ciudad. Yo sólo intento ayudar, pero veo que mis acciones han tenido un resultado que no me esperaba..."

El jefe de los Mageseeker, a pesar de la explicación amable de Sanguinius, no se convenció. Los Mageseeker estaban acostumbrados a cazar magos y, por lo tanto, desconfiaban de cualquier persona con las habilidades de uno. De modo que el jefe de los Mageseeker le dijo "Si eso es verdad, ¿por qué los fieles te ven como un salvador que protegerá a Demacia?"

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