♡︎ 𝙲𝙰𝙿𝙸𝚃𝚄𝙻𝙾 19 ♡︎

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La carrera por fin había finalizado, Toto suspiró aliviado de que sus dos pilotos terminarán la carrera ilesos, si bien ninguno de sus dos pilotos había quedado en podio, P5 y P7 tampoco estaba tan mal. Cómo siempre, Red Bull había logrado 1-2 con sus pilotos, está vez quedando Checo en primer lugar y Max en segundo puesto, con un tercer puesto bien merecido para Carlos Sainz.

Salió de boxes, felicitando a sus compañeros e ingenieros en el proceso. A lo lejos pudo divisar al omega que lo traía loco, con su sonrisa característica y su tan conocida arrogancia se deslumbraba en sus ojos.

—Hola Toto— saludo Geraldine con una sonrisa dulce.

—Hola Geri, felicitaciones por los podios— espetó el Austriaco devolviéndole la sonrisa a la pelirroja.

—Oh no me lo digas a mí, Christian es a quien deberías felicitar— soltó la omega santurrona.

Wolff rodeó los ojos divertido, sin dudas Geri era la pareja perfecta de Susie, las dos eran igual de atrevidas y picaras.

—Nos vemos, Geraldine. Y porfavor, dile a Susie que la próxima vez no sea tan atrevida— dijo Toto con una sonrisa, señalando la clavícula de la omega, la cuál tenia varios chupetones, algunos más pequeños que otros, pero notables.

—Tranquilamente puedo decir que Christian lo hizo— respondió la británica con seguridad.

Toto dejo escapar un gruñido involuntario, a pesar de que su alfa supiera que Geri y Christian no eran pareja, los celos aparecieron de todas formas.

—Tranquilo, es broma, tampoco te pongas celoso— replicó Geraldine dejando escapar una risa juguetona.

—Lo siento, mi alfa está algo descontrolado— soltó Toto algo averogonzado por el comportamiento de su alfa.

—No te preocupes Toto, a todos nos ha pasado alguna vez— contesto la británica con una sonrisa.

Max lloraba en el hombro de Christian, Jos había aparecido sorpresivamente el día de la carrera, y lo único que hizo fue criticarlo e insultarlo

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Max lloraba en el hombro de Christian, Jos había aparecido sorpresivamente el día de la carrera, y lo único que hizo fue criticarlo e insultarlo.

—Tranquilo Maxie, no pasa nada, ya pasó. Estoy aquí contigo— consoló Christian, acariciando la cabeza del rubio con suavidad.

—Solo... Solo quiero que se sienta orgulloso.. yo, ¿Hago las cosas mal?  Ya no se que más hacer para que este orgullo...— Las palabras de Max se cortaron al sentir como las manos de su jefe se acomodaban en sus mejillas, causando que sus miradas se cruzen.

—Max, escúchame bien, estoy aquí para ti. Estoy muy orgulloso por todo lo que has logrado, y si tu padre no sabe apreciar eso, pues que se joda— Murmuró Christian, sonriendo dulcemente para intentar tranquilizar al Neerlandés.

Max quisiera decir que la escena era un tanto extraña, pero no lo era, Christian era su papá, todos lo tenían claro, los fans, los ingenieros e incluso los otros pilotos.

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