Spy x Family Propositos

Tiempo para pensar

Damian se encontraba en una encrucijada, un proceso, que tal vez le permitiría aceptar la historia que escuchó, o solo negarse y alejarse de Anya para siempre.

Se quedó en el bar del hotel a un par de pasillos del lobby, no bebía nada, simplemente se sentó junto a la barra y miraba al horizonte.

Durante los pasos de ese proceso aparecieron cinco personas, la primera fue su madre...

—¿Cómo estás hijo? —Melinda puso su mano en el hombro de Damián.

—Madre... Quiero preguntarte una cosa...

—Lo que sea...

—¿Por que insistias en que me hiciera amigo de Anya? ¿Es que a los seis años ya me buscabas pareja?

Melinda soltó una breve carcajada...

—No puedes hablar en serio hijo, eras un niño, solo quería que hicieras más amistades, y la hija de mi mejor amiga era una gran opción, esa niñita de la que Yor hablaba cuando la conocí sonaba tan adorable...

—¿La señora Forger es tu mejor amiga? Es la primera vez que te oigo decirlo...

—¿De que otra manera podría referirme a ella? Después de lo que ocurrió antes de que llegarás —Damian la miró extrañado —. No te preocupes...

—Madre, ¿Para que son esas pastillas?

Melinda solo arrugó la cara...

—Ansiedad... Son para calmarme...

Damian se sintió preocupado...

—Tranquilo hijo mío... Esto es solo una factura por todo lo que vivimos, estaré bien...

No dijo más nada y volvió a pensar en su dilema...

—Damian se que acabas de tener una conversación seria con tu pareja, no soy la mejor para aconsejarte, pero creo que lo que sea que tengas en la cabeza, vas a resolverlo y volverás con ella, no importa que problemas tengan, se que lo van a superar...

Melinda le dió un beso en mejilla y volvió al salón, Damian siguió pensando,  sintió la tentación de tomarse un trago, pero lo interrumpió su hermano...

—Por tu cara, parece que quieres tirar al caño, todo el dinero gastado en este viaje...

—¿Soy tan obvio?...

—Tuvieron un problema, ¿Tú y tu prometida?

Damian no respondió...

—Hermanito, ¿Alguna vez te dije lo mal que me sentí por alejarme de los Forger?

—No, no lo sabía, pensé que no te importaba, cuando volvimos a nuestro país empezaste a trabajar... —Lo miró extrañado.

—Si es cierto, pero esos meses en Sicilia fueron divertidos, te contaré un dato curioso, para gente como nosotros que viven de la imagen y la reputación, una amistad como la que ofrecían los Forger resulta... Adictiva, te hace sentir débil al principio, pero luego quieres más, y tú conseguiste más hermanito...

Demetrius se detuvo allí y se fué al pasillo, una vez que su familia intervino, seguían sus amigos, Damian estaba a punto de abrir una botella de whisky cuando Ewen lo detuvo...

—A ver permiso, necesito un buen trago... Tu estás bien así —Dijo al quitarle la botella de sus manos —. Y bien, ¿De que nos estamos lamentando ahora?

Damian sabía que podía sincerarse con él, pero debía ser discreto...

—Anya me reveló un secreto, y no sé cómo reaccionar a lo que me dijo...