1.3 Efecto secundario

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Después del extraño suceso de ayer con Cassie, no tuve tiempo para procesar las cosas porque los clientes empezaron a llegar a montón y esto no permitió que tuviera si quiera un segundo para pensar en una explicación para lo que había ocurrido

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Después del extraño suceso de ayer con Cassie, no tuve tiempo para procesar las cosas porque los clientes empezaron a llegar a montón y esto no permitió que tuviera si quiera un segundo para pensar en una explicación para lo que había ocurrido.

Primero llegaron un par de gemelas que se encontraban de paso en Shamy y mientras que la pelirroja le rogaba a su hermana que adoptaran a un cachorro, la rubia se negaba diciendo que no era capaz de cuidarse a sí misma como para querer hacerse responsable de otra vida. A esto último, la gemela de nombre Valeria se molestó y mientras su hermana Valentina compraba las cosas para peces que la amiga de su madre les pidió, Valeria se mantuvo acariciando a un pequeño Golden Retriever.

Luego ingresaron un grupo de 4 amigos para comenzar a recorrer el lugar sin decirme una palabra, teniendo que ser yo quien se acercara a ellos y aunque fue un poco incomodo, finalmente me explicaron que cada uno estaba interesado en adoptar a una mascota y eso me puso realmente contenta. Así que les entregué un formulario donde colocar que buscaban, las preferencias que tuvieran y las exceptuaciones a cerca de lo que el animal no pudiera tener.

La más pequeña del grupo, coincidió perfectamente con un pequeño conejo blanco llamado Copito debido a que no tenía mucho espacio en su casa para una mascota grande, deseaba algo esponjoso y juguetón, es alérgica a los gatos y las aves no eran una opción.

A diferencia de la más pequeña, el mayor del grupo quedó enamorado de un gigantesco pastor alemán llamado Theo ya que a penas lo vio dijo que hubo una chispa entre ellos. Además, era todo lo que especificó que buscaba en el formulario, es decir, un perro de apariencia fuerte que pueda causar temor, pero que también sea abrazable y una gran compañía.

Sorprendiéndome, la chica con aspecto un tanto terrorífico, tuvo una conexión instantánea con Dina, una gatica temerosa que evitaba a cualquier persona que tuviera interés para adoptarla, pero que con esa chica se miraron fijamente y por primera vez en mucho tiempo la escuché maullar, la vi sonreír cuando fue cargada y disfrutó ser acariciada.

Hasta ese momento estaba muy feliz de que algunos animales por fin fueran a tener un hogar, pero después llegó el momento de que el último chico en el grupo escogiera a quien iba a adoptar e inesperadamente anunció que quería a Cassie. Ante esto no supe cómo reaccionar pues antes hubiera estado extremadamente feliz, pero en ese momento no estaba dispuesta a dejar que se fuera porque necesitaba entender que había sucedido.

—Lo lamento, ella ya tiene dueña —fueron las únicas palabras que necesite para tal vez arruinar la oportunidad de Cassie de encontrar un hogar.

Sin más, el ultimo chico decidió irse sin una mascota y dijo que volvería cuando estuviese listo, porque no quería llevarse un animal que no quería ya que entonces no le daría el amor que merece.

Al finalizar de firmar los papeles de adopción de cada mascota seleccionada, los chicos abandonaron el lugar y me disculpe con Cassie. Sin embargo, antes de poder tocarla, nuevamente entraron más clientes y no tuve un minuto de descanso hasta que llegó el medio día, llegó mi compañero y realizamos cambio de turno.

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