X:
El bosque era muy espeso en sí. Mis pies pesaban de tanto caminar mientras que mi mirada no se perdía ni un solo detalle del bosque. La bolsa que arrastraba era muy grande y era negra. Aún no tenía olor. Pero sabía que fue buena idea sacarlo antes de que si lo empezará a tener. Llegué hasta el punto medio de bosque y me decidí en un lugar para empezar a cavar. Podría clasificarse como un sitio lejano que era tapado por muchos árboles. En si no había mucha luz por las nubes, por lo que el sitio daba una clara advertencia de que había algo malo que acababa de pasar. O estuviera a punto de pasar, Dejé la bolsa a un lado y quite la mochila de mi hombro. Desate la cuerda que ataba una pala a la mochila negra de lo vieja que era y deje a un lado la mochila, cerca de la bolsa grande. Clave la pala en la tierra y salte sobre ella. La introduje más adentro y haciendo palanca saque mucha tierra. El movimiento empezó a ser repetitivo, era parecido a la primera vez que hice esto. Tenía diez años y estaba intentando enterrar a mi perro recientemente muerto. Aunque no estuviera en un bosque sino en el patio trasero de la casa de mi vecina, el clima y las sensaciones eran parecidas,
Mis padres estaban de viaje en aquel tiempo. Y sin querer le había dado el líquido que mataba ratas. Pensé que era agua y como en ese tiempo no había muchas canillas que dieran agua realmente potable, mis padres siempre compraban botellas grandes llenas de agua. Ya en casa les quitaban las etiquetas y las guardaban en el sótano. Buscando agua encontré una botella un poco más pequeña que el resto. Aunque igualmente no tenía etiqueta. Subí del sótano y lo primero que hice fue ir al patio pequeño trasero, se veía levemente los árboles que daban a empezar el bosque y la cerca que separaba nuestro patio de el de la señorita Torres, fui directo a él rinconcito en el patio donde había una casita para perro y dos vols. a unos metros de esta. Le serví un poco de agua de la botella a Kitty en su bol para agua de color morado, luego entre a la casa y me dirigí a la cocina para tomar también un poco. Justo cuando estaba de puntitas para intentar alcanzar un vaso de color rojo que mi madre siempre metía en los cajones de arriba. Me quedé paralizado al escuchar el grito de terror de mi hermano mayor proveniente de la puerta que daba hacia el patio. Dejé la botella encima de la isla de la cocina y caminé a paso lento hacia la puerta. Allí estaba mi hermano pálido. Su pelo estaba desorganizado ya que aún no se lo cortaba a pesar que estábamos en verano. Él era más alto que yo, aunque era menor que yo dos años. Me tuve que apoyar con una mano sobre su hombro para apartarlo un poco y ver, Kitty estaba tirada en el pasto con liquido blanco saliendo de su boca. Mi cuerpo se tensó y sentí mi mundo derrumbarse, sentí como la sangre abandonaba lentamente mi cuerpo. Como una tortura mientras mi respiración empezaba a fallar. Vino como un golpe el recuerdo de la botella. ¿De verdad fue agua o que más era? Me decidí con mi hermano a decir que Kitty se había perdido. Mi padre a veces sembraba cositas en el patio. Kitty al estar entrenada no las dañaba. No era una opción viable poner su cuerpo en nuestro patio ya que mientras mi papá cavaba iba a encontrarla. Por lo que convencí a mi hermano de darle un baño a Kitty para que tuviera por lo menos una despedida digna. ¿Rosas o flores? No teníamos dinero y en el pueblo pocas personas. Para no decir casi nadie. Que Cosechaba flores y rosas. Aparte eran las personas que sus casas estaban cercanas al centro del pueblo. Sería imposible robar por lo menos una sin ser descubiertos o por los dueños o por alguien que estuviera pasando en ese momento. Luego de darle el baño afuera. Ya que entre dos niños pequeños no podrían llevar al baño y volver a llevar otra vez a la mascota al jardín. Por lo que ignoramos el charco de lodo que generamos y empezamos a arrastrarla hacia la cerca. Yo hacía toda la fuerza desde atrás mientras que mi hermano arrastraba desde adelante el cuerpo sin vida de Kitty. Sentía como mi corazón se encogía al verlo llorar en silencio. No podía hacerle esto a mi hermanito menor. Pero tampoco podría hacerlo sin ayuda. Al ya estar al lado de la cerca. Alzamos entre los dos al cadáver. El por las patas delanteras y yo por las traseras. Amacamos y amacamos hasta tener la velocidad suficiente. Luego soltamos y en el primer intento Kitty cayó en el otro lado de la cerca. En el lado del patio de la señorita Torres. Aunque no era muy buen momento. Sonreí al ver tal logro después del cansancio extremo que sentía en ese momento. Justo como ahora. El hoyo en la tierra ya un poco húmeda porque empezó a llover estaba listo. Solté la pala. Haciendo que cayera al lado del montón de tierra que saque y mi mirada se posó en la bolsa. Que sonaba levemente por las gotas que caían encima de esta. Suspire mientras me sacudía un poco el pelo. Le debía este favor a mi hermano y lo estoy cumpliendo. Para que el cumpla su plan tan perverso que está haciendo ahora. Me siento orgulloso y a la vez asustado por crear tal cosa. Si Kitty no hubiera muerto las cosas serían diferentes para ambos. Abrí un poco el cierre y me permití ver a tal belleza que tenía esa chica. Pelo negro corto hasta la mandíbula. Una perfección absoluta. Me parecía muy guapa. Sólo que este no era momento para sentimientos. Cerré el cierre con brusquedad y pateé la bolsa para que cayera en el hoyo. Luego la adrenalina se apoderó de mis venas mientras la pala empezaba a tapar tal cuerpo. ¿Qué hubiera sido de ella si no hubiera sido yo? Claro que, si mi hermano hubiera hecho esto, la chica hubiera sufrido más. Recuerdo aquel día. Habían pasado ya cuatro años de la muerte de Kitty. El secreto estaba tan bajo tierra como aquel árbol que llevaba miles de años que se veía de primera en nuestro patio. Mamá solía decir que ese árbol fue donde murió la hija de la fundadora del pueblo. Era una historia linda, pero a la vez trágica, de esas que te enseñaban a no desobedecer y amar a tu madre por los sacrificios que había hecho. Cuando eras pequeño era muy creíble. Luego de grande. Solamente parecían mitos. El caso es que mi hermano tenía una conejita que adopto sin él permiso de papá. Había muchos animales que tenían la misma historia. Siempre eran blancos con una mancha negra en cualquier parte del cuerpo. Justo como Kitty era. Sabía que ella le había dejado un trauma, aunque él no lo aceptara. Un día como cualquier otro decidió no ir a la escuela. Él me contaba un poco. Levemente y por encima del tema que lo molestaban por ser raro y por qué su pelo era extraño. Todos en Hensgrim tenían pelo negro y ya. Por lo que era fuera de lo común ver su color de pelo. Él no fue a la escuela, pero yo sí, cuando llegue él no estaba en la casa. Lo busque en su habitación y hasta en el sótano. Cuando me rendí y fui a la cocina vi por el rabillo del ojo por la ventana que estaba cavando algo en nuestro patio. Voltee la cabeza y lo observaba. Había diferentes hoyos de diferentes tamaños. No aguante la curiosidad y salí.
- ¿qué haces?
El volteo como una fiera y me golpeo la nariz fuertemente. En el hospital declaró que se había defendido y mágicamente tenía una rajada en la ceja. "Fue una pelea de hermanos". Declaró el y me miró por el rabillo del ojo. Desde ese día le tengo un cierto respeto. No por admiración. Por miedo.
Al terminar con este trabajito, tome mi mochila y ate de nuevo la pala a la mochila. Me la puse y empecé a caminar, ya se hacía de noche y necesitaba volver antes de levantar sospechas. Caminé al paso más ligero y rápido que podía mientras recordaba el camino que había tomado para llegar a este punto del bosque.
Al salir del bosque me dirigí hacia mi coche que estaba aparcado en la parte trasera de la escuela y preparatoria Hensgrim. Me subí al asiento de copiloto y cerré la puerta.
- ¿terminaste?
pregunto una voz desde el asiento de conductor, fría y calculadora como su dueño. Que era incapaz de sentir sentimientos por algo o alguien desde la muerte de Kitty. Para mi significaba una mascota más. La podría reemplazar. Pero el... tenía una conexión que al romperse desato un mounstro
-si
el auto arranco enseguida, pude ver a la chica que sepulté desde la ventana. Iba al lado de una chica de una rubiecita. Era muy bajita a comparación de ella... Espera no. La que mate tenía pelo negro corto. Esta lo tiene largo. Aparte la mirada de la ventana y la dirigí hacia mi hermano
- ¿Por qué la querías fuera del juego a la chica? -era una forma de referirme a porque la mato, si era directo me iba a ignorar
- no servía para nada
dijo el y me miro de reojo. Tenso la mandíbula y se aferró con más fuerza al volante. Dejando ver sus manos marcadas de venas y sus nudillos blancos. Daba a entender "no me hables o en vez de apretar el volante apretare tu garganta". Obedecí y puse mis manos en mi regazo mientras jugaba con mis dedos. La verdad desde pequeño él fue muy cerrado. Pero la inseguridad de estar con el crecía al sentir cada vez más su aura perturbadora. Aunque fuera guapo te podría destripar en tres segundos sin importarle. Recuerdo que hace un año llevo a una chica a la casa mientras nuestros padres no estaban. Como era costumbre y para no sentirme incomodo puse música. Pero la incomodidad llego a mí al ver a la chica bajar las escaleras con cortes recientes, aunque no muy profundos. Como si un gato la hubiera atacado por las piernas y brazos que dejaba ver su uniforme. Mi hermano bajo detrás de ella y le dio un simple y claro "vete". ¿Por qué tenían que hacer tal escenita al frente mío? No lo se. Cuando se fue le pregunte porque la chica tenía cortadas y lo único que hizo el maldito fue encogerse de brazos
- ¿tienes más presas o ya terminaste?
el paro el carro rápidamente y volteo a verme con su clásica sonrisita retorcida
- ¿terminar? Acaba de empezar
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EL DESASTRE QUE FUIMOS
Misterio / SuspensoTodo empezó cuando pisamos un pueblo llamado Hensgrim, que a simple vista solo era un pueblucho en medio del bosque, sin importancia. Donde solo las familias originales que fundaron el pueblo tenían casitas grandes y de colores pasteles, llamaban la...