𝕬𝖙 𝖍𝖊𝖗 𝖋𝖊𝖊𝖙 - Ella, una chica de tan solo 16 años, dulce pero, hermosa, inteligente, mandona y madura.
Pero alguien viene y le quita lo mandona
Él, un chico de 25 años, egocéntrico, inteligente, mandón, maduro y serio
Pero alguien viene y l...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
...
Russell
California. Wednesday, 9th August
(Trust)
Nos seguíamos mirando a los ojos, la verdad es que su respuesta me confundió.
- Vamos a un lugar más privado - dije cogiéndolo de la muñeca.
Avance y no se quitó de mi agarre.
Nos fuimos a un parque que estaba vacío, nos sentamos en un banco y nos quedamos unos momentos. - Cuando yo tenía 13 años... tuve un problema con la comida, ya que cada cosa que comía, lo vomitaba... pero esos vómitos fueron provocados por mi... - sentí un nudo en mi garganta - cada día que iba a la escuela, todos se reían de mí y escuché que se reían de mí porque estaba gorda, tuve y tengo... una inseguridad muy grande por mi cuerpo - ya estaba soltando lágrimas - me tuvieron... me tuvieron que llevar a terapia para dejar de provocarme los vómitos... en unos meses baje 30 kg, vomitando y pesaba 60 kg, algunas veces ni comía... ya que no quería, porque cada vez que veía la comida me ponía a llorar... y gracias que ya no hago eso... hasta casi llegó a... morirme - dije lo último susurrando, pero yo sé que él lo escuchó.
Me agarró del mentón, ya que estaba cabizbaja, me cogió de las manos y me dio un beso en la mejilla.
- No tienes porque sentirte asi, tu cuerpo es hermoso, no te preocupes por lo que digan los demás, eres hermosa, pero tanto que hasta me enamoré de ti... - dijo sorprendiéndome.
- No te puedo gustar... - dije apartando la mirada, pero no lo suficiente porque este me cogió del mentón para que no la girara.
- No, parece que no me entendiste, no me gustas, me encantas y estoy enamorado de ti, desde hace dos años... me encantas - dijo acercándose para poder tocar mis labios con los suyos.
Antes de que estos se tocaran, me levanté rápidamente y comencé a caminar hacía mi casa. - ¡Russell! - dijo Evan detrás de mí - ¡¡Russell!! - repitió.
Y en un momento, ya estaba a mi lado cogiéndome del brazo. - ¿Qué pasa? Creí que también querías - dijo mirándome fijamente.
