Yo Soy Alissa Gilius (Pausada)

Capitulo 22

Cap 22
Un famoso entre tantos.

Dante:
—¿Creen que esas personas... Esté una que se pueda transformar como yo?—pregunto con curiosidad.

Sentando en una de las sillas, movía los pies de atrás a delante y los miraba esperando sus respuestas.

—¿Uno que de pueda transformar en cuervo?—dice Abigail sentada en el suelo y cruzada de piernas.

Cargaba un libro en su mano, uno que mostraba a dos chicos en una playa y de fondo un cielo de colores. Parecía romántico y no de me hacía llamativo.

Asiento, ella se encoge de hombros, cierra el libro y se acomoda sus lentes.

—No lo sé. Son muchas las posibilidades.

—Si te puedes percatar, no hay muchas posibilidades—habla Hunter quien estaba sentando en una de las sillas apoyando sus brazos en la mesa.

—Si las hay—habla mi mejor amiga — ¿No vistes que había dos tipos con poderes? Iguales a nosotros.

—Si, pero eran dos nada más —dice Lyon.

—Primero apareció uno, luego apareció otro. ¿Cuando sean cien vas a creer?—pregunta Alissa con un tono de enojo.

Estaba sentada a mi lado, mirando a Lyon fijamente. Desde lo que pasó en la fiesta parecía más afectada. Se enojaba fácil. Parecía irritada.

—Obvio no...

—Entonces ¿Por qué no crees que hay más afuera y nosotros estamos aquí haciendo nada?

—No quise decir eso... Yo solo decía...

—¡Estamos perdiendo el tiempo encerrados aquí! ¿dónde está la acción que nos prometieron?—se levanta y su voz empezaba a alzarse— ¡Hay dos chicos con poderes robando en las preparatorias información! ¡Información que se supone que es secreta al igual que la agencia! ¡Conocían de mi! ¡Sabían mi nombre!

Me levanto acercándome a ella, apoyo mi mano en su hombro.

—Oye Aliss... Cálmate ¿Si? Todos estamos sorprendidos por lo que sucedió, no eres la única.

—¡No me digas que me calme!

Sacudió su hombro quitándome la mano, luego suspiró. Caminó unos pasos estando del otro extremo de la mesa, alejada de nosotros. Pensé que se sentaría de ese lado, pero de un momento a otro, había sujetado la silla con sus poderes y la aventó contra la pared.

—¿Nos tendrán encerrado más tiempo? ¡No nos dan explicaciones, ni respuestas!—Grita hacia el estante que había en la pared— ¡Necesitamos saber porque nosotros no somos los únicos! ¿No éramos la generación celestial? ¿Hay más generaciones?

Lyon se levanta rápidamente y le sujeta de hombros.

—Oye oye. Necesitas respirar para controlar esa emoción interna que tienes.

Ella se sacude los hombros soltando de él.

—No necesito respirar, ni que estuviera en clase de yoga.

El rubio se pasa una mano por su cabello y suspira. Cuando mi amiga está en ese estado, es imposible cambiarle su actitud. Al menos con un helado, eso de milagro.

—Estas alterada, respirar suavemente te ayudará. Confía en mí.

Alissa de voltea a verlo con una expresión, y de unos segundos, cumple con lo que dice. Respiró y luego exhaló por la boca. Cerró los ojos y se volvió a su puesto con Lyon atrás.

Lleva sus manos alrededor de sus brazos, acariciando los trajes que teníamos puestos. Que por supuesto, hace mucho antes nos entregaron nuestros trajes de entrenamiento. Exactamente iguales a los de Hannah, nuestra compañera coreana de la agencia. Nos mostró de unos pasos de peleas junto a otros agentes.