SEVEN♡KOOKMIN

MV.

Los días transcurridos para Jungkook habían sido pesados. Asiendo grabaciones y todas esas cosas.

Pero todo marchaba bien, quería que todo terminará rápido, y así regresar a Busan y por fin casarse con el amor de su vida.

Quizás después de su MV haría unos tiktoks, haría un live agradeciendo a cada una de sus fans por todo el apoyo que le dieron.

Y sabía que después de su boda tendría entrevistas, conciertos y demás cosas. Pero por el momento lo único que su mente ocupaba era Park Jimin.

Habían hablado por teléfono con el tan solo unos minutos atrás.

—Toma, es para ti. —Lisa llegó con un refresco, habían estado dando los últimos toques para subir el MV a la plataforma de YouTube.

Jungkook tomó de una el Sprite que Lisa le dio.

—Ya publicaron el MV.

Le informo Lisa después. Jungkook asintió.

—Creo que necesito descansar.

—Te lo mereces. Haz hecho un buen trabajo.

Jungkook hizo caso a esas palabras, por que se fue a su casa y poder descansar. La próxima semana él viajaria a Busan.

Cuando termino de darse una refrescante y larga ducha se fue a acostar. Se tiro boca abajo en la cama, disfrutando de la suavidad de esta.

Su teléfono empezó a sonar. Jungkook no quería responder, estaba tan cansado que le daba pereza levantarse. Pero después de tanta insistencia, y recordando que Jimin le llamaría en la noche, el sueño y cansancio se le fueron.

Tomó rápidamente el teléfono y marcó, por que en efecto era Jimin.

—Hola bebe.

—Hola kook. Se que estas cansado, así que mejor descansa. —La voz de Jimin era tan dulce. Que era capaz de dormirse solo de escucharlo hablar.

Jungkook se acomodo mejor en la cama y se echo las sábanas.

—Solo estoy un poco cansado. Ahora que escucho tu voz todo malestar se va.

Jimin sonrió del otro lado. Se mordió el labio intentando retener la ganas de chillar de tan lindo que era Jungkook.

—Te extraño.

—Yo también lo hago. —respondió Jungkook de inmediato.

Se quedaron sin decir una sola palabra, solamente escuchando la respiración del otro.

—Duerme, aquí estaré yo.

—¿Por que no me cantas? Tienes una voz dulce y me encanta.

—Está bien. Pero solo por hoy.

Para Jungkook, Jimin tenía una voz dulce y hermosa, pero para el mencionado era lo contrario. Él creía que su voz no era la mejor.

Pero Jungkook estaba seguro que Jimin tenía talento y que si fuera un idol sería famoso.

—Lo que tu digas.

Dijo para cerrar sus ojos. Luego empezó a escuchar la voz de su prometido, y poco a poco se fue adentrando al mundo de los sueños.

[💜]

Las coas en él restaurante iban de mejor a mejor. Jimin no se podía quejar.

Además de qué tenía al mejor ayudante, al mejor amigo y hermano : Kim Taehyung.

Jimin tenía bien plasmado en su mente todas esas tardes de cocina que tenía con Tae.

Cuando apenas eran unos chiquillos, jugando a cocinar con hojitas y lodo.

De cómo hacían promesas que cuando ellos fueran grandes tendrían un restaurante famoso y enorme.

Y lo tenían. Así que ambos estaban satisfechos por que habían logrado cumplir sus sueños.

Y era todo eso, que a Jimin lo hacía tomar la decisión correcta. Una decisión que no sólo le beneficiaría a él. Sino a las personas que también estaban a su alrededor.

Así que el ya no tenía dudas de sus pensamientos. Ahora estaba más seguro de lo que haría.

Esperaba con ansias el día de su boda, el poder enlazar su vida y su corazón con Jungkook.

Y poder formar su vida, poder formar una familia juntos. Y ser felices, como siempre lo han hecho.

Los problemas u indiferencias seria algo que siempre estarían presentes, por que no hay relaciones perfectas, siempre hay problemas y queda en cada persona en cada pareja, poder arreglar las dificultades de la mejor manera.

Y ellos lo harían de la mejor manera.

Holaaaa💜💜
OMG casi nos acercamos al final, no quiero 🙁🙁

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