Muertes A Tu Nombre

Misión

Narra Denisse

Durante toda la tarde estuve preparando lo necesario para salir en busca, no iba a ser fácil, esos lugares tienen mucha seguridad ya que tienen evidencia y cuenta como algo valioso; ahora que lo pienso... ¿Al lado de hospital?¿Incinerado? No le veía mucha lógica ya que no había ocurrido ningún incendio, ni durante, ni antes, ni después de estar en ese lugar.Le comente a Masky de lo que se haría, estuvo de acuerdo, Hoodie le ayudaría, mientras tanto yo entrare a por el, saldré y esperaré Slender nos teletransportara, mañana al amanecer comienza la misión.

***

Iba de camino a ese lugar, no quedaba muy lejos pero, pasarlo no iba a ser moco de pavo; active el aparato que me dieron para comunicarme y recibir órdenes para después cubrir mi identidad, no quiero ser descubierta.

Aquí vamos.

Primero, ellos desactivaron la electricidad de la reja, pasé, me adentre en los pasillos, en esos largos y decrépitos pasillos de la funeraria. Buscaba la habitación que para mi suerte estaba hasta arriba, era la 180-F

Los guardias no eran gran obstáculo, a pesar de ellos tener armas, yo era más rápida, de un sólo tajo les cortaba el cuello, tenía que ser sólo uno porque si eran dos terminaria baleada.

Estaba a punto de llegar, sólo faltaban dos cruces y llegaba, pero, vaya sorpresa, cinco guardias estaban ahí.

-¡Manos arriba!- dijo el de en medio

-Esta bien, sólo vengo de visita, necesitó despedirme de mi familiar-

-¿Nombre?-

-¡Denisse! Di que eres Amelia Sanders, es la habitación de al lado pero, es para evitar-

-Soy Amelia, Amelia Sanders-

-Seguridad, ¿Amelia Sanders tiene algún contacto último?-

-Confirmado, habitación 179-F, visita a solas-

-Bien, puede pasar-

-Gracias- Idiotas

La habitación a la que entre era simple, en medio yacía las compuertas de los cuerpos, no hice caso, fui directo a la ventilación, estaba conectaba así que la safe y pasé. Ahí estaba otra sala igual, busque su nombre.

Lo encontré. Sólo quedaba abrir el cajón.

Puse el seguro, regresé, abrí la compuerta y...

Ahí estaba, sus ojos estaban cerrados, su piel, ya no era la misma, realmente estaba incinerado.

Me dolio verle así pero, haré algo, tome el cuerpo y le pase a una camilla, avise por el aparato pero...

-¿Señorita Sanders?-

-¡Abran la siguiente habitación!- agregó