Capítulo 2.

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Dios, el aeropuerto quedaba a 40 minutos de mi casa, así que llegué deje las maletas en la sala y subí a mi habitación para darme una ducha y pasar a alistarme, mi cita sería a las 8pm en un restaurante bastante lujoso, cuando Abi me mando la dirección me sentí aliviada porque no me quedaba muy lejos, si acaso unos 15 minutos en auto.
Me duché y me puse un vestido negro, me maquille muy natural la verdad no tenia tanto tiempo así que en cuanto estuve lista me dirigí a mi coche y prendí camino hacia el restaurante Walls.
Iba en el camino cuando me llama mi mejor amiga de toda la vida, Jade Anderson, ella vivía en Los Ángeles como yo, pero su casa quedaba a una hora aún así salíamos de vez en cuando a comer o se quedaba en mi casa unos días junto con mi mejor amigo Jonh Ortega.
Venía hablando por teléfono con Jade, le venía contando lo que estaba haciendo.
NO me regañen venia hablando desde mi coche tenia la opción de responder llamadas.

- Así que vas camino a una reunión de trabajo - Me dijo curiosa. -Y como te sientes?-

- Me siento nerviosa, no se ni siquiera para quién voy a trabajar, no le quisieron decir nada a Abi, me lo iban a decir a mí directamente - Le contesté nerviosa.

- Pues esperemos que sea alguien muy famoso, así se te abrirán puertas, no crees? - Dijo feliz.

- Lo sé, justo Elizabeth Taylor fue quien me recomendó con ellos - Le dije con una sonrisa en mi rostro.

- Woow! De verdad me da mucho gusto amiga, te deseo muchísima suerte y cuando puedas me hablas para contármelo todo. - Me decía feliz, lo notaba en su voz.

- Muchas gracias, cuando llegue yo te cuento cada detalle, espero conocerlo en esta reunión.- Le comenté entusiasmada.

- Estaré esperando tu llamada, te quiero, suerte. - Le respondí que la quería en Francés y sin más colgamos la llamada.

Al pasar de unos minutos llegué a Wills Restaurant, entré y me llevaron directamente a la mesa del señor Dileo quien ya se encontraba ahí y al verme llegar se levantó de su lugar para después saludarme.

- Mucho gusto señorita Hunter, soy Omar Dileo representante de la persona quién requiere sus servicios.- Me decía estirando la mano para que lo saludase.

- El gusto es mio señor Dileo, agradezco la oportunidad y por supuesto la recomendación, me comentaron que fue la señora Elizabeth Taylor. - Respondí su saludo.

- Tome asiento - Nos sentamos ambos, no, no estaba el artista del cual me hablaría el señor Dileo. - Como usted sabe, la contactamos por medio de su jefa Abril Valentine, claro con su recomendación de la señora Liz. - Me decía sonriendo.

- Le agradezco que me haya tomado en cuenta. - Le dije respondiendo a su sonrisa.

- Mire señorita Hunter, el artista para el cuál usted va trabajar es alguien del cual ocupamos discreción y confidencialidad, me imagino que usted ya entiende todo esto debido a que a trabajado con celebridades. -

- Sí, claro que lo entiendo. - Llegaba el mesero para tomar nuestras órdenes, realmente no ordenamos nada pesado.

- Esto es profesional y estar en un restaurante tratando de cerrar negocios no lo es - Soltó una risita. - Pero el señor me pidió que la tratara como alguien de la familia para que usted se sienta cómoda-  Me decía poniendo la servilleta en sus piernas.

*"El señor me pidió", eso no dejaba de darme vueltas en la cabeza*

- Oh, muchas gracias por la intención, siento que así es un ambiente más cómodo. - Admití.

- Bueno, quería comentarle que el artista esta haciendo un nuevo álbum, más bien, ya está echo, solo que faltan algunos vídeos musicales por grabar y necesitamos de alguien verdaderamente profesional para que nos ayude con el tema del arte - Sonreía sin mostrar sus dientes.

- Entiendo - Respondí

- Bien, después de hacer ese trabajo, vamos a irnos de gira por varios países del mundo. -Me sorprendió, pues yo jamás había ido de gira con un artista. - Supongo serán unos meses, el trabajo de una maquillista es estar casi pegado al artista. - Río tratando de hacer que se sintiera cómoda la conversación.

- Vaya que sí, una tiene que estar pegada como chicle - Admití riendo.

- Oye eso no lo había pensado, ya casi me quitan mi trabajo - Sonaba más confiado. - La maquillista que nos ayudaba renunció y no creas que por razones malas, sino porque iba a empezar a hacer su familia. - Decía feliz.

- Que lindo debe ser eso, dejar lo que amas por algo que más amas -

- Sí, nosotros entendemos perfectamente, por eso estábamos buscándote.

Firmé, sí firmé el contrato por 6 meses, es poco para lo que me dijo, pero realmente al artista del que hablaba le importaba mucho la comodidad de sus empleados pues me dijo que sí eran pocos meses pero conforme avanzaba iban renovando contratos, así que firme y al día siguiente era cuando por fin iba a conocer al artista misterioso del que hablaba el señor Dileo, bueno Frank, me dijo que así le llamaba todo mundo.

Al día siguiente tenia que estar temprano arreglada para irme a conocer al famoso artista, ya me estaba comiendo los nervios y a la vez la intriga, me sentía emocionada, la verdad la cantidad que me iban a pagar era la más alta que me habían pagado en toda mi vida.
Me encontraba saliendo de mi casa, habían venido por mi para llevarme a una de las casas del artista.

Íbamos en camino, conocía este lugar, estábamos en Beverly Hills. Honestamente no se de quienes eran las casas de los famosos así que iba hacer más sorpresa para mi.

Llegamos, las puertas para dejar pasar el coche se abrieron, segundos después nos encontrábamos estacionados y yo bajando de ese vehículo, me estaba esperando Frank en la entrada.

- Buenos días Emma, ¿Cómo amaneciste? - Me dijo saludandome de un beso en la mejilla.

- Buenos días Frank, nerviosa y entusiasmada, ya quiero conocerlo. - Le dije respondiendo a sus saludo, igual de beso en la mejilla.

- Lo conoces, estoy seguro de eso. - Dijo sonriendo. - Entra, nos está esperando en la sala. - Dios mio, iba con un nervio, íbamos caminando por la casa, miraba muchas figuras animadas, Peter Pan, las princesas, mucho Disney.
Pasaron unos segundos cuando por fin llegamos, estaba enfrente de ese famoso artista y vaya que sí lo conocía.

La maquillista de Michael Jackson (CONCLUIDA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora