Capitulo 49

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Ya estábamos en Londres, la mitad de nuestra parada.

- De verdad que amo esto, visitar los estudios de Harry Potter es maravilloso. - Dije viendo todo.

- ¿Son los originales? - Preguntó chismoseando.

- Dicen muchos que sí, te imaginas vivir en ese mundo donde la magia gobierne. - Miraba el castillo a lo lejos.

- Estaría increíble, seríamos como Nicolas Flamel. - Dijo riendo.

- Vaya, pero el verdadero tuvo como 85 años. - Dije viéndolo.

- Lo sé, pero en de las películas tenía como 600 o más. - Me miró de regreso.

- Buen punto, aunque preferiría ser una bruja vampiresa. -

- Y vivir para siempre...crees que eso seria genial? - Preguntó tomando mi mano.

- Si es contigo todo es genial. - Apreté su mano. - Crees que en unos años más podríamos regresar con nuestros hijos? - Pregunté viéndolo.

- Por supuesto que sí cariño, y aunque no los haya aún, podríamos divertirnos un poco más.  - Decía travieso.

- Bien, en eso sí tienes razón...pero aun así podremos venir en familia y eso es lindo. - Mire hacia los lados. - Aunque siendo sincera no sé si eso sería adecuado, ve cuanta gente hay.

- ¿Acaso no se puede rentar? - Preguntó alzando su ceja.

- No lo sé, pero aun así...a lo que me refiero es que claro que queremos que sepan como es el mundo real sin necesidad de estar rentando los lugares o cerrandolos solamente para nosotros. - No sabía cómo explicarlo.

- Supongo que tienes razón.. pero es algo que van a entender más adelante ¿no crees? - Me miró esperando respuesta.

- Sí, pero eso no es de lo que deberíamos hablar porque ni siquiera estamos esperando un bebé. - Me eche a reír.

- Nosotros ya nos estamos preocupando por cuando sean más grandes y aun ni planeados están. - Se unió a mis risas.

- Vamos por cervezas de mantequilla. - Lo miré

- Jamás he probado eso, ¿si es cerveza? - Preguntó curioso.

- No es cerveza pero si sabe a mantequilla. - Fuimos justamente donde vendían las comidas de Harry Potter.

- Mira esa galleta con la cara de Hermione. - Decía apuntando a una repisa con galletas.

- Ni ganas de comerlas dan no crees? - Asintió y pedimos la cerveza y algo para comer. - Quiero ver tu reacción al probarla, es algo único. - Lo grabé y lo empezó a probar.

- Por Dios, esto es exquisito. - Dijo saboreando la cerveza.

- Ya vez, y sabe a cerveza? - Negó - Bueno eso es algo que sí o sí debo venir a comprar cuando vengo aquí.

- La comida, que delicia. - Probaba nuestra comida.

- Aquí si venden comida deliciosa, es raro que en un lugar así la vendan. - Lo miré y le di un bocado.

- Oye eso esta buenísimo, que especias tendrá. - Probaba un corte de carne.

- No lo sé pero debería estudiar algo de gastronomía, ahora que estamos casados me gustaría mínimo hacerte algo diferente. - Dije tomando de mi agua.

- ¿Cómo que? - Me miró

- Yo creo que...cereal con leche. - Soltó una risa y yo también.

- Vaya, eso es una creación de un verdadero chef. - Decía riendo.

La maquillista de Michael Jackson (CONCLUIDA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora