—¿Ves? Se usa así. —explico y asentí— bien ahora contesta —apretó varías teclas de su celular e inmediatamente el mío comenzó a sonar en un tono irritante, apreté el botón para contestar, y así finalmente se escucho su dulce voz, que sonaba en la habitación y en el celular— y ahora cuelga —demandó y reí apretando la tecla con un dibujo rojo— eso es todo —sonrió feliz—
—Bien, debo cocinar —sonreí levantándome del sofá—
—Azora —murmuro y voltee a mirarlo— a ti.. ¿te gustan los chicos?
—Que clase de pregunta es esa Conrad. —demande levantando una ceja algo irritado—
—No lo se, solo curiosidad —jugo con sus manos—
—No tengo idea, no pienso en romance, mucho menos en mi sexualidad —ahora el levantó una ceja confundido. Suspiré y continúe — a lo que me refiero es que no pierdo mi tiempo pensando en si me gustan las chicas o lo chicos, por que jamás estaría con ninguno, odio el romance. —lo mire intentando descifrar si había entendido y este asintió levemente. Volví mi paso hacia la cocina con sus pasos atrás de mi.—
—¿Puedo preguntar el porqué? —su curiosidad se mantenía latente en su pregunta, había usado una voz suave para disimular..—
—Bleu —hable en la oscuridad—
—Tienes miedo? —preguntó y sentí sus brazos rodearme—
—No es eso —intentaba ver entre la oscuridad de la sala de corrección, pero no había ni un ápice de luz en el lugar—
—¿Entonces que es? —preguntó acariciando mi cabello, manteniéndose muy cerca de mi cuerpo sobre un colchón que ahí yacía—
—¿Por que siempre me cuidas?, ¿Por qué no eres como mis otros hermanos que siempre me despreciaron? —pregunté con curiosidad, sabía que Bleu sonreía en la oscuridad de aquel lugar, aunque no podía verla, estaba completamente seguro.—
—Por amor Azora.
Amor...
¿Por amor aguanto todos los golpes de mi padre?
¿Por amor ella prefería alimentarme mientras quedaba en los huesos?..
—Ya no quiero que me ames entonces Bleu —avuse aún entre sus brazos y esta soltó una risita—
—Que dices tonto —nuevamente acaricio mi cabello con dulzura pero me separé de ella—
—No Bleu, habló enserió. —se escucho un suspiro—
—¿Por que lo dices? —preguntó—
—El amor! Odio el amor Bleu! Quizás soy más pequeño, pero si me doy cuenta de todo lo que tuviste que pasar por ese tonto amor —me aleje de ella llorando, sintiendo un nudo en mi garganta, secando las lágrimas al ritmo que salían, una tras otra.—
—Eso no es tu culpa Azora, no es tuya ni mía, tampoco lo es de él amor, no pienses así. —me abrazo nuevamente y no pude no dejarme amar por ella.—
—¿Pero mamá y papá?, ¿Eso era amor no?, ¿El amor es extraño no crees?
—Algún día no lo será Azora.. El amor de Mamá y Papá era- —fue interrumpida por las puertas del orfanato abrirse, dejándonos encandilados con la luz que fuera de ese horrible lugar había.—

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Metanoia. (Completa)
عاطفية"A nada te acostumbres para que nada te haga falta" ese es el lema de Azora Holmelund, cuya visión del romance carece de interés por todo lo que ha sucedido a lo largo de su vida. Conrad Miller, un hombre dulce, cálido y amable llegará a poner en du...