♠︎08¡!

3.5K 297 12
                                    

Heather resopló, colocándose los lentes de sol rojos en forma de corazones

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Heather resopló, colocándose los lentes de sol rojos en forma de corazones. Hacía demasiado calor esa mañana, aunque no era ello lo que la tenía malhumorada, más bien se trataba del estrés y la incertidumbre de no saber quién ganaría la carrera. Esperaba que Jughead, claro, pero, ¿si no lo hacía? Su hermano, sus amigos y ella perderían su territorio y su hogar.

-Quédate quieta.

Volteó, encontrando a Tara, quien estaba regañando a su hermana menor mientras le ataba correctamente la bandolera blanca que tenía en la cabeza.

-Yah, Tara. -se quejó, dando un manotazo a la mano de la chica, la cual bufó, desganada.

-Por cierto... -recordó Heather, acomodando su short de mezclilla. Estaba bastante satisfecha de haberle agregado cadenas en forma de estrellas y corazones-. ¿Qué era lo que nos querías contar?

-Oh, besé a Jughead.

Heather pegó un gritito mientras que la morena carcajeaba, para nada sorprendida. Vaya, chisme.

-¿Hace cuánto? -curioseó la rubia-. ¿Y recién nos lo cuentas?

-No me pareció importante. -movió los hombros con indiferencia-. Realmente no me gusta, pero la pasé bien.

De manera repentina, unas manos se aferraron posesivamente a sus caderas -ya se le estaba haciendo costumbre al chico-. Con una sonrisa y un cosquilleo en el vientre, alzó la vista, no obstante, Sweet Pea no le devolvió la mirada, no cuando sus furiosos ojos se clavaban en un pequeño grupo de jóvenes Diablos, quienes parecían estar hablando de ellos o, precisamente, de ella.

No iba a mentir, la pequeña interacción la preocupó, pero lo olvidó en el instante en el que Tall Boy gritó:

-¡Muy bien, vamos a hacer esto!

Mordió su labio, nerviosa, dándose cuenta que Betty, a lo lejos, la juzgaba. No demoró en darse cuenta que miraba el agarre que Sweet Pea tenía sobre ella. Claro, ahora, Betty sabía que tenía algo con una Serpiente, pero esperaba que no le dijiera nada a Alice, pues sería bastante hipócrita de su parte considerando que Jughead también era una.

-¡Lleven los autos a la pista!

Cuando la carrera dio comienzo, todos soltaron alaridos de euforia.

-¿Crees que ganen? -preguntó hacia el pelinegro, quien sólo se limitó a esconder uno de sus rubios mechones detrás de su oreja-. Porque si no lo hacen...

-No debes preocuparte por nada. -la interrumpió-. Mientras estés conmigo, nada te pasará, nena.

-Me preocupa que seas tú el que corra más riesgos. -refutó, quitándose los lentes para poder apreciar mejor las hermosas facciones del chico-. Me preocupas tú, y Nick, Tara, Toni y Fangs.

-Esas son las consecuencias de tener un corazón tan grande. -murmuró, besando su cabeza, ¿por qué era tan tierno con ella a pesar de que no eran nada oficial?

𝐂𝐢𝐧𝐧𝐚𝐦𝐨𝐧 𝐫𝐨𝐥𝐥𝐬 𝐚𝐧𝐝 𝐤𝐢𝐬𝐬𝐞𝐬¡! Sweet PeaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora