Es Una Orden?

Capítulo 10 - La aprendiz

Un repentino golpe en la puerta sorprendió al señor mayor que se encontraba escribiendo un informe en su escritorio.

Al alzar la mirada, notó que la persona que había irrumpido en su habitación era su vieja compañera de clases, Lucía.

"Lucía... ¿Pasa algo?" preguntó.

Ella soltó varios papeles sobre el escritorio y en un tono serio dijo: "Hugo, necesito tu ayuda".

"¿Qué necesitas?" respondió al instante, enfocándose en los ejercicios de matemáticas que ella había dejado. Se dio cuenta de que eran varios, algunos básicos y otros más avanzados.

"La niña de los Delzin que estoy cuidando tiene problemas", expresó Lucía.

Hugo por un momento se quedó helado ante la pregunta.

¿Y eso que tenía que ver con él?

Hugo era un reconocido archimago que ahora mismo estaba llevando una importante investigación por semanas que lo estaba volviendo loco debido a la gran cantidad de horas que se la pasaba trabajando.

¿Por qué su amiga de la academia tenía que aparecerse en este momento a contarle ese tipo de cosas?

Hugo soltó un suspiro.

"¿Qué problemas de interés puede tener una niña para que requieras venir así? ¿Mentales? Porque si no es algo grave te voy a pedir que te retires ahora mismo, Lucia. Estoy algo ocupado"

Lucía frunció el ceño al ver la reacción de su amigo.

"Hugo, la niña a mi cargo es un genio".

"Oh, eso es algo que dicen todos los padres, Lucía. Creo que la edad te está afectando", bromeó Hugo.

"Hablo en serio", insistió Lucía, notando que Hugo no tomaba en serio el asunto.

"Lucía, si esa niña es realmente un genio, ¿no puede resolver estos problemas ella misma?" preguntó Hugo frunciendo el ceño.

"En serio... no cambias"

"Estoy en algo importante, Lucía. Resume el problema en dos palabras", pidió Hugo.

"Ve los ejercicios", dijo Lucía

Hugo rechinó los dientes.

"Dijiste 3, estúpida. Veamos... van desde lo básico a..."

Hugo, tras unos segundos revisando los ejercicios, notó algo inusual.

¿Habían sido escritos todos por una máquina de escribir? ¿Por qué la ortografía y la colocación de números eran tan perfectas?

Había ejercicios mal hechos, lo que lo llevó a preguntar:

"Esto... ¿Qué es?"

Lucía sonrió al ver el interés de Hugo en esos ejercicios.

"Fueron ejercicios resueltos por Aria."

"Ah, la chica del nombre", dijo Hugo mientras miraba en el papel el nombre.

"Es una niña"

"¿Niña? ¿Cuántos años tiene?"

"2"

La sorpresa se reflejó en los ojos de Hugo.

Por primera vez, aparte de su investigación actual, se encontró con algo para lo que no tenía respuestas inmediatas.

Necesitaba información.

"¿Ella escribe así?, ¿tiene algún instructor?, ¿cuál es el problema exacto que tiene...? Si de verdad esta niña resolvió esto a esa edad es..."

"¿Un genio?", se adelantó burlonamente Lucía.

Hugo hizo una mueca, pero tuvo que admitir que su amiga tenía razón. Este caso era inusual.

Lucía se sentó encima del escritorio de Hugo y comenzó a explicarle en un tono orgulloso.

"Bueno... ¿Dónde empiezo? Todo comenzó cuando una sirvienta llamada... ¿María? Sí, desde que ella empezó a cuidar a Aria, la niña demostró una gran capacidad de aprendizaje y adaptación, es muy buena aprendiendo, es capaz de caminar, aunque es gracioso ver cuando se cae cuando intenta correr, ¡tienes que verla!"

Hugo se recostó un poco hacia atrás, sorprendido por la exaltación de Lucía.

"Entiendo... Pero, ¿cuál es el problema?"

"No puede utilizar magia", reveló Lucía.

"¿Cómo? ¿Hay algún problema con su maná?"

"No, usamos un artefacto para ver el estado de su núcleo y... no hay nada anormal", explicó Lucía.

"¿Nada? ¿Segura?", preguntó Hugo.

Lucía soltó un suspiro.

"Sí. Intentamos con varios artefactos distintos y no hay nada fuera de lugar. Me gustaría pedirte una mano con esto, ya que esa niña tiene futuro y..."

"Podría ayudarme en mi investigación", murmuró Hugo con una sonrisa.

Hugo tenía un presentimiento.

Sabía que si continuaba solo, aislado en aquella habitación, sus avances serían lentos y podría morir antes de lograr su objetivo. Pero, si conseguía a una aprendiz de ese calibre, sus posibilidades de completar la investigación aumentarían considerablemente.

"De acuerdo", dijo Hugo levantándose de su silla.

"Llévame al lugar donde esté esa niña".