Capítulo XII

211 27 3
                                    

Con el paso del tiempo, una suerte de esperanza comenzó a brotar del corazón tricolor. Sentía como su vida iba tomando un rumbo fijo y podía ver los éxitos junto con la gloria en la palma de su mano, sentimientos motivados por los buenas tiempos que vivía su proyecto de vida.

Tal vez, incluso, con un sentimiento de enamoramiento que florecia dentro de su interior.

Ese día era otro simple día de trabajo estando encerrado en su oficina, los grandes ventanales le permitían observar como transcurría la vida cotidiana de los lugareños, que veía hasta donde sus ojos le permitían mirar la distancia.

Al observar una familia pasar, el grancolombiano se preguntó cómo sería tener esa clase de vínculo con alguien, un vínculo, más que sanguíneo, de amor incondicional.

Y por alguna razón, su mente divagó hasta llegar a la cara del español.

No le gustaba pensar mucho en ese sentimiento, aún cuando había profesado un odio profundo al hombre que vivía junto a él, no podía seguir ocultando sus nuevos sentimientos.

Le gustaba la sensación, podía sentirse un poco más emocionado desde que decidio aceptar un poco sus sentimientos, pero al mismo tiempo le disgustada tener sentimientos...

—Me siento sucio... —dijo pensando en voz alta.

Con un ligero suspiró intento aclarar su mente en lo que estaba.

Debía trabajar.

Aun así, su mente no paro de castigarlo con ese sentimiento de culpa que había comenzado a molestarlo desde que era consiente de su sentir.

Al mirar por la ventana, pudo notar que el sol nuevamente se ocultaba en el horizonte

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al mirar por la ventana, pudo notar que el sol nuevamente se ocultaba en el horizonte. Tronando su cuello y estirandose, se levantó.

Fue un día cansado leyendo y firmando papeles, incluso aveces por el cansancio sentía que no terminaba de leerlos. Mañana tenia que ir a supervisar las embarcaciones, por lo que era mejor dormirse pronto. Caminando, pudo pensar en tal vez tomar la cena antes de dormir.

Bajo las escaleras con el acostumbrado sonido,  tranquilo pero imponente de sus pisadas en el suelo del hogar. Sintiendo el cansancio en su cuerpo y mente por el duro día de trabajo.

Sus pasos se detuvieron al sentir ruidos extraños en la sala, sus manos por instinto se instalaron en su espada y su mirada se agudizó, como si no hubiera estado cansado a morir minutos antes.

Al terminar de bajar y mirar lo que provocaba los ruidos, su rostro se mostró sorprendido.

Su sala -ya de por sí,  llena de flores- estaba aún más llena, estas formaban un arco al rededor de la sala, dando la impresión de una lluvia de pétalos sobre el lugar.

Justo en su cojín, se encontraba un Rey durmiendo, con muchas flores que estaba trenzado para luego colgarlas. Por simple curiosidad reviso su calendario personal.

Hoy es su aniversario de fundación...

Normalmente, en días como estos, Bolívar o Miranda venían a visitarlo, tal vez con algún regalo, pero nunca había tenido algo tan grande.

El tricolor camino hacia el español, beso su mejilla y subió a su habitación. Tal vez, tener sentimientos no resultaba ser algo tan malo.

Gran Colombia despertó de muy buen humor, se sentía muy feliz por las flores en su hogar, por lo que al despertar bajo directo a su café de la mañana

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Gran Colombia despertó de muy buen humor, se sentía muy feliz por las flores en su hogar, por lo que al despertar bajo directo a su café de la mañana.

Pero por alguna razón, su criada no se encontraba en la cocina, lo cual le pareció sumamente curioso. Tampoco se encontraban los sirvientes de la casa.

Volvió a la sala y se encontró con el español apenas levantándose, típico de el dormir hasta tarde.

—Oye, español —se paro firme como de costumbre—. Gracias por el detalle de las flores, son muy hermosas...

El Rey se volteo algo increulo, ¿porque le agradeceria por las flores?

Lo que no sabía Gran Colombia, era que todo lo que se encontraba allí era producto de su criada y algunos de sus trabajadores, que al ver todo lo que se estaba esforzando el país, quisieron decorar su sala.

El español al ver tantas flores sintió una gran molestia y los espanto, luego comenzó a quitar las flores que se encontraban colgadas al techo. Su flojera fue más y luego de quitar las primeras gilnardas de rosas, se acostó en su cama/sillón y durmió tranquilamente. No esperaba que Gran Colombia saliera, viendo que estuvo dos días enteros en su oficina.

Él no había hecho nada, pero al ver la ausencia de los criados, pudo comprender un poco lo que pasaba.

Luego de conectar todo en su cabeza, el bicolor lo comprendió, y terminó por usarlo a su favor.

—No es nada, mi amado, sabe usted que haría lo que sea por su amor, y por verlo feliz.

Luego se encargaría de decirle a los mugrosos y arapientos que no dijeran una palabra de su autoria en el regalo.

❝ 𝓒𝓸𝓻𝓪𝔃𝓸𝓷 𝓡𝓸𝓽𝓸  ❞┊↠𝐆𝐫𝐚𝐧 𝐂𝐨𝐥𝐨𝐦𝐛𝐢𝐚↠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora