🥀] Una historia donde el Imperio Español, segado poe la ira, se le ocurre la idea de enamorar y robar a la Gran Colombia como parte de su venganza.
🥀] Y donde el grancolombiano tendrá que cuidar de 4 hermosas criaturas.
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¡Bienvenido de nuevo! Muchas gracias por leer otro episodio de:
Corazón Roto.
Espero lo disfrutes <3 ~~~~~~
Ha pasado algún tiempo desde el supuesto "comienzo" de la relación entre el Imperio y la República.
Intercambiando roces en la mejilla, besos en las mismas y compartiendo el paisaje con una taza de café en los atardeceres de Bogotá.
Sin duda, algo muy hermoso.
Gran Colombia se le sentía una persona totalmente nueva, muy diferente a la joven nación de hace algún tiempo, marcado por la guerra y la desolación vivida, vagaba totalmente desamparada y triste por el mundo. Tal parece, que la compañía ha podido darle algo de felicidad a su triste corazón roto.
Por otro lado, Imperio ha seguido sus planes mientras tiene una mascara de hombre entregado frente a su "amado". Sigue siendo igual de detallista que siempre, tal vez un poco más, para seguir ganando territorio rápidamente, su paciencia bajó la mascara poco a poco se iba acabando y ya no veía al suramericano como un reto interesante.
¿Qué será de Gran Colombia, cuando caiga en manos de la desgracia y se entere del teatro que ha sido su vida últimamente?
Ha dejado de hablar, incluso con su intimo amigo mexicano, quien le habló peste de su nuevo romance. Por lo que desde hace mucho no se envían sus habituales cartas.
Pero su trabajo es algo que nunca ha descuidado, incluso en la mayor de las felicidades, solo podía sentirse realizado por el amor y el progreso que estaba llevando, gracias al apoyo de su extraño amado.
Para Gran Colombia, ambos eran piezas importantes del progreso de la nación.
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Mientras trabajaba, hizo su habitual vistazo al exterior de su oficina, las vistas siempre era lo que más le gustaba, ya que así puede ver los resultados de sus avances o en que podía mejorar para ayudar a más personas.
Ahora el ambiente afuera se sentía menos rígido, más jovial y relajado entre sus habitantes, se podía escuchar música tocada por jóvenes artistas en la pequeña plaza cerca de allí, niños y jóvenes realizando actividades recreativas.
Su mirada se volvió ha posar en una pareja que solía pasar por esa calle desde hacía algunos años, ya su pequeña hija era mayor, aproximadamente unos 3 o 4 años como mucho.
En su corazón se instaló ese conocido deseo de familia, y si bien ya tenía una pareja que amaba, sería lindo tener una familia más grande. Aquellos que heredarán su territorio una vez él muera en muchos años.
Los territorios siempre evolucionan y cambian, ¿no?
—Lo hablaré con el español...—dijo pensando en voz alta—
