- Me gustó la foto que me mandaste anoche - gruñó Jimin en su oído con esa voz ronca que hacía que sus bragas fueran un desastre -. Cuando la vi me prometí que no volvería a dejar que te fueras a la cama sola nunca más.
Minjeong sonrió y mordió su labio, agarrando su mano y tirando de ella a su habitación.
Desde luego, no iba a irse sola a la cama aquella noche.
Minjeong caminó despacio hacia su habitación, sintiendo la presencia de Jimin como un manto a su espalda, casi pudiendo sentir su mirada descendente sobre la piel de su espalda. Sentía el corazón martilleando en el pecho como el de una adolescente que nunca había sido tocada. Abrió la puerta de su dormitorio sin molestarse en cerrarla cuando sintió las manos de Jimin agarrar su cintura y pegar su torso a su espalda, cuando notó sus labios acariciar su cuello haciendo que se le pusiera la piel de gallina. Minjeong llevó atrás su mano para agarrar su nuca. Necesitaba sentirla de alguna forma, pero su agarre le impedía moverse.
-Te he echado de menos - murmuró Jimin besando allí donde había acariciado, sintiendo que Minjeong movía su trasero de forma casi imperceptible de una forma que comenzaba a ser peligrosa. Dejó de sujetar su cintura para acariciar su espalda con las yemas de los dedos, llegando a la ansiada cremallera del vestido. Minjeong la agarró del pelo con suavidad, aprovechando la otra mano para acariciar su muslo y su cadera detrás de sí.
-¿Y a qué esperas?
Escuchó la risa ronca de Jimin y lo próximo que sintió fue una liberación al sentir cómo su vestido se volvía más holgado, cómo la cremallera bajaba despacio, cómo Jimin tocaba aquella nueva piel que quedaba a la vista. Finalmente, el Chanel rojo cayó a sus pies dejándola en ropa interior. Jimin se tomó su tiempo para mirarla, para apreciar la parte trasera de aquel encaje negro, sintiendo una parte de su cuerpo aumentar exponencialmente de temperatura. No sabía si quería disfrutar de aquella lencería un poco más o arrancársela con los dientes.
Minjeong se giró en sus brazos, regodeándose en la cara de hipnotizada de la otra y se abalanzó sobre su boca una vez más, agarrándola por las presillas de los pantalones y pegando sus cuerpos. Jimin no tardó en ir a tocar lo que antes sólo había visto, apretando su culo con una mano y pasando un brazo alrededor de su cintura, sonriendo sobre su boca cuando notó cómo Minjeong desabrochaba sus pantalones y tiraba de ellos hacia abajo con impaciencia para después ir a pelearse con su crop top. Jimin dio un paso atrás y se encargó ella misma de quedarse en ropa interior, en igualdad de condiciones, con el fuego en los ojos de ambas escrutando el cuerpo de la otra.
Entonces avanzó sin detenerse cuando chocó con Minjeong, sujetándola y atrapándola en un beso intenso, sus lenguas tentándose y sus labios bailando al unísono. Avanzaron a trompicones hacia la cama, y Minjeong giró justo antes de chocar con ella para caer a horcajadas sobre Jimin, agarrándole la cara y pegando sus cuerpos aún más, sintiendo sus centros muy juntos.
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The great 12 - Winrina/Jiminjeong
Fiksi PenggemarSin saber el motivo, los hijos de los dioses Olímpicos son citados en Grecia sin explicación previa. Los titanes han escapado, y sus padres han sido recluidos en el Olimpo. Los semidioses tendrán que aprender a trabajar juntos entre escarceos sexual...