capitulo 23

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La boda cada vez estaba más cerca, y yo ya había comprado el boleto y pedido permiso para faltar en mi trabajo.

Ahora mismo estoy de compras, no se bien que ponerme, un vestido quizás.

Entre a una tienda de ropa solo para mujeres, todo se veía muy lindo y acogedor, los precios eran algo elevados pero la ropa era demasiado linda, me dirigí a la sección de vestidos y busqué.

Rápidamente encontré uno muy hermoso, pero era rojo, así que termine descartandolo, encontré un vestido color negro, la tela era cómoda y fresca, decidi probarmelo.

Me llegaba un poco arriba de las rodillas y me sentía muy linda con este vestido, salí del vestidor y busque alguna otra opción pero decidí mejor quedarme con este vestido.

Regrese a casa feliz por la elección y al llegar comencé a buscar ideas de maquillaje y peinado, elegí unos que no eran muy exagerados.

Los días pasaban cada vez más rápido hasta que llego el día en el que volaría de nuevo a tokyo.

Hice todas mis maletas y me puse la ropa más cómoda que encontré para estar bien en el vuelo.

Nerviosa llegue al aeropuerto pensando en que haría apenas llegando, a quien visitaría? O me visitarian a mi? Mis nervios podían más y casi subo tarde al avión.

Una vez dentro decidí intentar dormir pero casi no pude, no podía dejar de pensar en todo lo que pasaría..

Pase mucho tiempo pensando hasta que finalmente caí dormida.

Me despertó la voz en la bocina diciendo que habíamos llegado a nuestro destino, tome mis cosas y con el corazón latiendo a mil por hora bajé.

Recogí mi equipaje y tome un taxi a un hotel que había reservado días antes.

Era de noche así que me instale y descansé.

(...)

Termine mi desayuno y decidí visitar la tumba de mi madre, compré un par de rosas, reze un poco y deje las rosas a un lado de la tumba de mi madre.

Suspire recordando todo lo que pase a su lado y solte una pequeña risa al volver a recordar el como ella me trataba, a pesar de eso yo nunca pude guardarle rencor..

Me levante y me retire del lugar, camino a mi hotel recibí una llamada de muichiro.

— ____! Ya estas aquí? — Su voz se escuchaba emocionada.

— Hola! Si, ya estoy aquí!

— Pasame la dirección de tu hotel, quiero verte.

Sonreí y le mande la dirección, llegue a mi hotel y no paso mucho tiempo cuando Muichiro ya estaba ahí.

Nos dimos un gran abrazo y no pude evitar llorar, no quería separarme de sus brazos, lo extrañé demasiado..

— Dios mio te extrañé tanto ____, ha pasado tanto.. — Su voz era triste, seguíamos abrazándonos y le dije lo mismo, creo que ahora estoy completamente segura de volver a vivir aquí.

Muichiro estuvo un buen rato conmigo, vimos algunas películas y nos actualizamos más nuestras vidas, todo se sentía igual, seguía sintiendo aquella confianza y el cariño que siempre le tuve.

Fue muy lindo para mí.

En aquella platica Muichiro me confirmó que Keisuke asistiría..

Los días seguían pasando y la fecha cada vez estaba más cerca y cuando me di cuenta, mañana era la boda de Muichiro.

No había hablado con muchos de mis antiguos amigos, solo con Hina, Takemichi y también con Emma.

Todo se sentía bien, no me sentía incomoda pero volví a caer en cuenta.

Mañana miraría al chico que se llevó mi corazón..

Me duche y me puse mi pijama sintiéndome nerviosa por el siguiente día.

(...)

Me levante muy temprano para empezar el día, desayune en el restaurante del hotel y subí para arreglar todo y no estar a las carreras en la noche.

Le había comprado un regalo a Muichiro y Kumiko, no era la gran cosa pero era lindo, ya estaba en la caja de regalo a un lado de mi cama. La boda empezaba a las 6 y ya eran las 4 de la tarde, así que me duche para comenzar a alistarme porque luego tardo demasiado y me estreso.

Al salir de bañarme me puse el vestido elegido y arregle algunas cosas que me faltaban.

Comencé a maquillarme y al terminar arregle mi cabello, mire la hora y faltaban 30 minutos para las 6.

Me puse las zapatillas y en mi bolso puse mi teléfono, mi cartera y otras cosas.

Por última vez me miré en el espejo y tomé la cadena que colgaba en mi cuello, sonrei al recordar quien me la había regalado. Nunca me la quité, siempre llevé conmigo esa linda cadena en forma de estrella con mi inicial en medio..

Aunque me gustaría llevar los pendientes que me dio, decidi ponerme unos diferentes que se veían mejor con la ropa que llevaba puesta.

Tome el regalo, mis cosas y tome un taxi, le di la dirección del lugar y a medida que pasaba el tiempo yo sentía que mis nervios crecían, solo espero no tropezar por tantos nervios...

Mire la hora y eran las 6 con 15 minutos, supongo que no es tan tarde...

Al llegar al lugar baje del taxi y tome mis cosas, mire un momento la entrada sabiendo que algunas personas ya estarían allí, tome un bocado de aire y reuni mis fuerzas para entrar.

Apenas puse un pie en aquel salón de fiestas, me maravillé, todo era muy lindo, tan iluminado y con adornos colgando de todos lados, mis ojos brillaron al ver el lugar hasta que una figura obstruyó mi vista.

— ____!! Te ves muy linda! — Muichiro me abrazó.

— Felicidades Michi, estoy muy feliz por ti y gracias, tú también te ves bien! — Acepté su abrazo y le entregue el regalo, él me mostró la mesa en la que me sentaría y allí ya estaba Hina con Takemichi.

— ____! — El rostro de hina se iluminó y nos dimos un pequeño abrazo, ella venía vestida muy linda y Takemichi solo me saludó apenado.

Me senté a un lado y no paso mucho cuando más invitados comenzaron a llegar.

— Chifuyu!! — Grité al verlo entrar, él me miró y una gran sonrisa se le formó en el rostro.

— ____!! — Corrió hacia mí y nos dimos un gran abrazo, detrás de sí entró un chico con mechas rubias, creo recordar su nombre, Kazutora me parece..

Chifuyu se sentaba en la misma mesa que yo así que él se sento a un lado mio.

Note que Kazutora se quedó parado en la entrada hasta que vi que estaba hablando con alguien que no se alcanzaba a ver quien era.

Pero mi duda se resolvió cuando Kazutora se adentro al salón y detrás de él iba él...

Keisuke Baji..

Mi rostro se iluminó y sentí como mis manos comenzaron a sudar, mi corazón palpitó fuertemente y me comencé a sentir nerviosa.

No podía dejar de mirarlo, pero me sentí aún peor cuando noté que se dirigía a nuestra mesa..

Kazutora saludó a los demas en la mesa y se sentó a un lado de Takemichi, Keisuke estaba en su celular pero al llegar a la mesa lo guardo y saludó a los demas hasta que su mirada se detuvo en mí, su rostro pareció impresionarse y puedo jurar que sus ojos se iluminaron.

Es Una Apuesta. // Baji Keisuke Y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora