Dulces | 26 años

65 10 0
                                    


Now I like Christmas too. The falling white snow doesn't make me feel lonely.
Now my Christmas is merry too, my New Year is happy because you're by my side.

Diciembre, ese mes del año en el que me dedicaba a decorar la casa y que se sintiera ese ambiente navideño que me gustaba. Y aunque normalmente tú te ibas con tu familia a celebrar tus festividades judías (casi siempre solo o con los niños, aunque de vez en cuando te acompañaba siempre y cuando no dijera alguna estupidez delante de tus padres) también procurabas pasar tiempo en casa, no por la celebración de la navidad como tal sino por estar con tu familia, conmigo y los pequeños a los que les emocionaba ver las luces por la casa y en el árbol de navidad, incluso a Joanne que aunque tuviera meses de haber nacido parecía curiosa al respecto.


Como ya habíamos hecho años anteriores, la noche del veinticuatro de diciembre cenamos en familia y nos dábamos regalos antes de que el reloj marcara la media noche y este año no fué la excepción. Tanto Eric como Joanne recibieron juguetes como regalo además de ropa, y tú por otro lado recibiste como regalo de mi parte un teléfono nuevo además de una caja grande de bombones y chocolates. Eso y dos entradas para un musical navideño al que iríamos la siguiente semana.

Por un momento noté que tenías la intención de compartir los chocolates con Eric y Joanne pero de inmediato te abracé por detras y te susurré al oído que no lo hicieras.

- ¿Recuerdas esa vez que estábamos paseando por una plaza comercial en Denver y viste esos dulces importados con licor que te dió curiosidad por probar? Pues bueno, son esos, no quería que te quedes con el antojo ni las ganas de probarlos.

- ¿En serio? - en ese momento tu expresión de confusión cambió a una de alegría, me abrazaste y besaste la mejilla - gracias Eric, eres tan atento...

- Los primeros ocho de la derecha contienen afrodisíacos también - esta vez te hablé suavemente al oído, por razones más que evidentes - si tu quieres podemos probar dos esta noche.

Una sonrisa traviesa se mostró en tu rostro y eso me lo dijo todo. Pasamos una linda y tranquila navidad en familia, y cuando nuestros cachorros se fueron a dormir apagamos las luces y dejamos que nuestros cuerpos expresaran lo mucho que nos amamos.

Ahora mi navidad es feliz, porque tengo todo lo que necesito en mi vida: a ti y dos hermosos hijos producto de nuestro amor.





























































































































The story that won't end | omegacember 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora