¿Por que Neko? (Editando)

Acostúmbrate +A

- ¡¡¡Mi señora, Buenos días!!! - Comencé a escuchar gritos entre mis sueños hasta que una luz dio directamente en mi cara provocando que despertara. Intente abrir los parpados y logre distinguir una sombra en la ventana. - Sabía que no había muerto.

Me senté de golpe y talle mis ojos. Cuando al fin logre ver mas claramente, me sorprendí al mirar que frente a la ventana, con las manos recargadas en el borde y la mirada hacia el exterior, estaba parado Yoshio.

- Tú... ¿Mi cuarto...? ... Tú... Que diablos haces aquínya~!? - Ni yo entendía lo que decía y, ¿Acaso acababa de maullar?

- ¿Que no recuerda lo que ocurrió ayer? Diablos... Hice una estupidez y esta chica ni idea tiene.

- ¿Estupidez? - Rápidamente tire de la cobija cubriendo mi cuerpo y mirándolo confundida y temerosa

- ¡No esa clase de estupidez! >V - Grito arrojándome uno de los peluches de la estantería a su costado.

* Desde ahora en adelante, si necesitas algo no dudes en pedírmelo-nya no seguiré ordenes que no sean tuyas, cuenta con migo a partir de este momento y para siempre. *

Así que no había sido un sueño, todo eso realmente había ocurrido. Pensaba mientras me llevaba una mano a la frente.

- ¡¡¡Loreto!!! ¡¡¡Baja a comer!!!. - Esa había sido mi madre.

- Joder. tienes que salinya~ Si mi madre te ve aquí es seguro que malinterprete las cosnya~

- ¿¿¿Habla de la castaña de aya abajo??? - Dijo señalando su cabello y el suelo con referencia al piso de abajo.

- Si de ella.....Espera, ¿Como sabes que es castanya~?

- ¿Que no dije que bajaras? - En ese momento mi madre abrió la puerta haciéndome caer de la cama. - Chicos la comida ya esta lista.

- Se lo agradezco señora. - Respondió sonriente Yoshio.

En seguida mi madre salio serrando. Me levante y mire al gato buscando respuestas.

- ¿Como llegamos a mi casnya~?

- Después de hablar se desmayó, urge en sus cosas y encontré su cartilla. Fue fácil llegar aquí. - Respondió mientras se sentaba sobre la cama.

- Y como es que mi madnya~ no dijo nanya~!?

- Ella fue la que nos recibió. Le dije que era un extranjero y que la había encontrado tirada en el centro, incluso me ofreció alojamiento aquí. - Todo había pasado mientras yo estaba inconsciente.

Mire mi celular notando lo tarde que era ya. Le ignore y me apresure a sacar la ropa que me pondría. Caminé hacia el espejo y ahí fue cuando vi lo indescriptible. Las buenas noticias eran que no era un gato, las malas eran que, tenia las orejas y los ojos de uno. Me deje caer sobre mis rodillas y justo cuando intente sentarme, algo bajo de mi me lo impidió, levante un poco mi cadera y ahí las vi, un par de largas y esponjadas colas.

- Tenia la ilusión de que todo había sido un suenya~ - Dije cabizbaja. - Además, no puedo hablanya bien del todnya, no dejo de maullanya.... ¡¡¡¡ Haggggg !!!!

- Es normal, tiene que acostumbrar a su lengua con ciertos ejercicios para poder eliminar el maullido o al menos controlarlo para que salga después de cada palabra para que esta no suene raro ni este mezclada con el nya, así como lo hago yo-nya Pero no se preocupes, le ayudare con eso.

- ¿Encenya? te lo agradecenya.

- Pongase de pie por favor. - La forma en la que Yoshio me hablaba, tenia cierta diferencia a la de ayer. - Tengo que arreglarte ama. - Aunque podía notar frustración(? en su rostro