Maldito Internado | AEEI #2✅

Capítulo 3 : Malteada

POV. EVIE

—¡Oh por Dios! — gritó la chica rubia mientras entraba a mi habitación seguida de una morena sonriente — ¡Una nueva!

Estaba en mi nueva habitación doblando mi ropa mientras desempacaba, acomodando la habitación y cambiando el termostato... ese tipo de cosas, cuando la puerta se abre abruptamente y dos chicas entran riendo hasta que se sorprenden de mi presencia.

—¿Cómo te llamas? — preguntó la morena —Soy Maddie.

—Y yo Julie— respondió la rubia.

Son solo personas. Son solo personas. Puedes responderles. Tranquila.

Hice un pequeño ruido en mi garganta para prepararme para hablar, me asustaba intentarlo y que no saliera voz alguna.

—Soy... Evie.

Oh Dios. Lo hice.

—Lindo nombre, me encanta— dijo la sonriente Maddie.

—No ha habido una nueva en mucho tiempo, créeme— dijo Julie dejando sus maletas en la que, al parecer, decidió seria su nueva cama.

—¿Ustedes...? — habla más fuerte, por Dios, Evie — ¿llevan tiempo aquí?

Maddie rio.

—Solo... toda nuestra vida— dijo.

—En realidad no sería toda tu vida— dije bromeando.

Ellas me miraron aun con una sonrisa y tuve la necesidad de aclarar mi chiste.

—Ya sabes, porque... no naciste aquí.

Eso las hizo reír.

Ambas eran muy amables, era un poco raro, pero me resumieron muchas cosas, pude entenderlas mejor. Maddie y Julie habían sido mejores amigas desde niñas, llegaron un domingo porque hicieron una pijamada por sus vacaciones y por poco pierden el tren de hoy, al parecer no viven muy lejos la una de la otra.

Las horas pasaron y de verdad trate de integrarme, les juro que nos tan fácil como lo hacen parecer en los libros y la televisión. Esas chicas tienen chistes internos (por lo que veo), hablan de personas que no conozco, y lo bueno es que tratan de incluirme, pero ¿es suficiente?

Las tres seguimos tratando de llevarnos bien, pues íbamos a compartir habitación todo el año, ayudo bastante el hecho de que Maddie era demasiado sociable... ¿era así como mamá quería que yo fuera?

Lo pensé.

Y lo ignoré.

No había visto a Peter desde ayer, tome la decisión de que, si el aceptaba estar acá, también lo haría yo. Y lo haría mejor.

(...)

Mi despertador sonó con fuerza. Yo lo odie. Me levanté al primer indicio de ruido y lo apagué. Ya era hora. Es lunes. Las clases. Respira.

Volteé y vi que ni Julie ni Maddie estaban despiertas todavía. Así que las ignore.

Fui al baño a tomar una ducha para luego ponerme mi uniforme. Odio mi uniforme, pero está bien, si Peter puede, yo también.

Una vez vestida cepille mi cabello como pude, los rizos eran un poco complicados, así que los dejé, me puse mis medias largas y mis zapatos, sabía que faltaban al menos quince minutos para que iniciara la primera clase del día, que, guiándome de mi horario, era literatura.

No he desayunada nada todavía, ¿Dónde debería hacer eso?

Mientras pensaba en eso oía como las sábanas de Julie se removían, hasta que ella se levantó con fuerza y aventó una almohada hacia Maddie.