¿Que Pasaría Sí.... Fueras Una Princesa Sacrificada ? (Twisted Wonderland)

☀️El sacrificio al Dios del Desierto... Capitulo 2☀️

Separador de kalim

No sabias quien era ese amable extraño que hizo una pregunta tan fuera de lugar mientras agonizabas, tampoco recuerdas qué fue lo que respondiste exactamente, pero sin dudo diste una respuesta, ya que la brillante sonrisa de este chico albino se hizo más grande cuando susurraste esas que se esparaon por inercia de entre tus labios resecos por el sol y lo siguientes que recuerdas es que te cargo en brazos antes de que todo se pusiera negro...

-¿Va a estar bien, verdad?-

-Si lo estará, la trajo a tiempo mi señor, un poco más expuesta al sol del desierto y no la cuenta-

-Es muy resistente para ser humana... También es la primera que veo una humana con ese tono cabello y piel, seguro viene de una tierra muy lejana, esas que son frías y cae la cosa blanca que llaman nieve-

Conversaban tres voces a tu alrededor que no reconociste, eran completos extraños para ti, no tienes fuerzas ni siquiera para ver de quienes se trataban, sólo podías escuchar lo que decían.

-¿Tardará mucho en despertar? Me preocupa un poco que duerma, tanto lleva tres días así- se escuchó en el aire.

-Que la humana duerma mucho es buena señal, su cuerpa se está recuperando, pero recuerde que los humanos son muy delicados, necesitan más tiempo para sanar las heridas y las quemaduras por insolación, pero le prometo que despertara muy pronto- dijo otra voz.

"¿Humana? ¿Por qué se refieren a mí de esa forma?" fue lo que pensaste al oír esas palabras, por lo que hiciste un esfuerzo por abrir los ojos aunque fuera un poco, apenas pudiste notar las siluetas de tres hombres, dos de pie y el tercero sentado a la orilla de la cama.

-Bueno, yo ya acabe aquí por hoy, si no me necesitan para nada mas me retiro mi señor, llameme si surge alguna emergencia- Dijo este hombre pelirrojo que te parecio que tenia alas de loro en su espalda y plumas en su cabello, pero de inmediato lo descartaste, no existe la gente pájaro

-Yo tengo aun un par de cosas por hacer el dia de hoy- Dijo este otro tipo de larga cabellera negra y ojos oscuros, por alguna razón te hacía pensar en serpientes -Kalim no vuelvas a llegar tarde a la puesta de sol por favor, recuerda que tu eres el único que lo puede controlar- Dijo este desconocido con un ligero tono de regaño en su voz

-No te preocupes, no llegare tarde hoy, solo quiero quedarme un ratito más con ella, quiero asegurarme de que duerma bien- Respondió el tercero que estaba sentado a la orilla de la cama, se te hizo conocido sobre todo por sus cabellos blancos como las nubes.

"Es... ¿El extraño del desierto?" Te preguntaste aun confundida, observando débilmente como el desconocido de cabellera oscura solo soltó un suspiro de resignación y también salió de la habitación a hacer sus propios deberás, mientras que el albino se giró para ver que estuvieras bien, pero se quedó paralizado cuando noto que tenías abiertos los ojos y lo estabas observando.

-¡Ya despertaste!- Exclamó el albino con emoción -¡Iago dijo que despertares pronto pero no imagine que lo harías tan pronto!- Dijo ya subiendo a la cama para verte más de cerca -¿Te sientes mejor? ¿Te duela algo? ¿Necesitas algo o prefieres que llame a Iago para que te revise de nuevo?- Comenzó a bombardearte el albino de preguntas

-Tu.... ¿Quién eres tú?- Preguntaste con voz seca, igual a la de una anciana, por lo que el moreno se apresuró a convocar una copa llena de agua fresca y te ayudo a beberla

-¿Qué tal? ¿Puedes hablar mejor?- Te pregunto notoriamente preocupado por ti, mientras acariciaba tus mejillas con cariño.

-Si.... Creo que si...- Hablaste con voz más suave y menos adolorida -Gracias por rescatarme del desierto... Pero no debiste hacerlo- Dijiste eso último con tono triste

-¿Eemm? ¿Y por qué no?- Pregunto de nuevo el chico algo confundido

-El Dios del Sol se enojará... - Respondiste sin perder la tristeza -Se supone que debía morir para que volvieran las lluvias y todos fueran felices en mi reino-

-Eso es un poco extraño ¿Sabes?- Comento el chico aún más confundido -Es cierto que pedí tu vida, pero pedir una vida no es sinónimo de pedir una muerte- Explicó el chico con calma

-Oh ya veo........... ¿Espera que?- Dijiste mirando sorprendida al chico de ojos rojizos y cabellos albinos.

-¿O tal vez yo me exprese mal? Di la orden cuando estaba realmente enojado, así que puede que los humanos se hayan confundido cuando pedí tu vida, pero no aclare cómo la quería- Dijo llevándose una mano a la barbilla analizando la situación

-¡No, no, espera un momento! ¡¿Cómo que tú pediste mi vida?! Eso no puede ser, a menos seas...- Exclamaste sorprendida

-... El Dios del Sol, sip soy yo- Te interrumpió el chico divertido por tu cara de sorpresa -Kalim Al-Asim, muchos gusto de conocerte, mi querida esposa-

Continuará...