mi propiedad privada [lewavi]

Especial 2: 1 Año de Mi Propiedad Privada.

Antes que nada, vamos a llorar porque nos jodieron la historia. Estábamos cerca de los 200k de lecturas en Wattpad cuando me la bajaron. Pero de igual manera..
Estamos de fiesta y les agradezco infinitamente el hecho de que algunos estén aquí releyendo otra vez.

Mi Propiedad Privada cumple un año de haber sido creada, una rabieta basto para crear este fic jajajs.

En fin, muchas gracias y espero muy pronto leernos en algún nuevo fic de Lewavi o en todos los shipps que nos gustan.

🌻💛

5 años después.... 

—Amor... —el llamado le hizo desviar su atención de lo que observaba en la tienda. La zona de bebés. 
Miró a Robert quien traía unas cuantas bolsas en sus manos mientras le sonreía, suspiró antes de caminar hasta el mayor. —¿Qué mirabas, czar? —preguntó dejando un beso en su frente. Gavi negó. 

—Solo cosas...

Robert no protestó ante la respuesta y se unió a él caminando ambos en silencio, mientras observaban las pintas decorativas de todo el lugar. Estaba cerca de navidad, cerca de su aniversario con el mayor. 
5 años de casados e iban por el sexto, sus cinco mejores años sin duda. 

Pero Gavi sentía que eso le faltaba. Sabía bien lo que su omega quería, se lo ha dicho su alfa pero este aún estaba reacio a aceptar su deseo. Siempre eran las mismas palabras: "vas a estar fuera por un año otra vez". 

Y aunque le enojaba bastante. Esa idea también le causaba pavor. Después de su lesión años atrás no había cosa que le diera más terror que no volver a jugar. Aunque a su lobo parecía poco y nada importarle muy poco aquello, todos los días rogaba por ello. Porque en su vientre creciera un cachorro. 

Cuando llegaron a su casa el silencio era abrumador, la ausencia de las niñas que este año iban a pasar las fiestas con su madre, era notoria. Llevó sus bolsas de compras escaleras arriba dejando a Robert en la sala de estar, sabía que el mayor se iba a dar cuenta de su estado de ánimo en cuestión de segundos. Pero aún así deseaba estar solo, la impaciencia de su omega por tener un cachorro lo ha llevado muchas veces a querer tener su propio espacio. 

—Amor... —el llamado nuevamente, se mordió la cara interna de la mejilla antes de darse la vuelta y mirar a su alfa. —Estabas mirando la tienda de utilería para cachorros, ¿verdad? —Robert se acercó a él dándole un abrazo desde atrás. Gavi se recostó contra él. 

—Mi omega quiere tener un cachorro... nos prometiste que cuando cumplieras 25 años íbamos a tenerlo... —el tono mandón del menor hizo reír a Robert, besó sonoramente la mejilla de su omega antes de darle la vuelta. 

—Ya hablamos de eso... todo se dará a su tiempo, mi amor. —Gavi asintió antes de recibir el casto beso por parte de su alfa. 
Su omega está complacido ante la nueva propuesta del mayor. Claro que estaba bien con eso. 

××××××× 

—¡¿De quién fue la idea?! —Robert preguntó tratando de que su voz se escuche por encima de la música. Ferran encogió los hombros. 
Ambas parejas estaban en un famoso bar de Barcelona, esperando el nuevo año. Con unas pasadas de alcohol que se notaba en sus torpes pasos y la forma de hablar que tenían. 

En el sector VIP que habían comprado estaban únicamente ellos 4 y uno que otro barman que se encargaba de atenderlos. 

Pedri y Gavi hace minutos habían bajado a bailar, ambos en la pista de baile como si no fuesen personas famosas. Bailando de manera libre bajo la atenta mirada de los alfas. Robert podía notar los toques que recibía Gavi, las propuestas de baile o algo más que acababan en nada cuando estos se daban cuenta de la marca en su cuello. Y de la negativa rotunda del menor, conectaron miradas en cuestión de segundos. Y el travieso omega cambió drásticamente sus movimientos. Después de hacer unos gestos al DJ que tocaba ese día.