Capítulo 1: Prólogo: El perdedor muere y el ganador lo pierde todo

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Un viento frío aulló su tristeza y desesperación ante la escena de abajo. Un castillo parcialmente destruido, abandonado y cientos de cadáveres esparcidos por el suelo, tirados en un desastre sin más consideraciones sobre a quién sirvieron alguna vez.

La sangre estaba salpicada por todas partes, el cielo oscuro, la luna oscura lamentando la pérdida de vidas. Todo estaba en un silencio sepulcral; el viento había cesado, haciendo que el paisaje pareciera inquietante y siniestro. Pero allí no iba a aparecer nada aterrador; la guerra había terminado. Se acabó... para todos. En realidad, nadie había ganado, porque las pérdidas eran demasiado grandes.

Un pájaro voló sobre la tierra que alguna vez fue verde, un pájaro inusual. Un grito profundo resonó en el aire, una melodía triste y desesperada escapando de su garganta, tratando de encontrar al menos a una persona con vida.

En el suelo, algo se movió de repente. Un cuerpo acostado boca abajo fue empujado hacia un lado para revelar a un niño de cabello oscuro exhausto y completamente agotado con una peculiar cicatriz en forma de rayo en la frente.

Harry Potter miró a su alrededor sin vida, jadeando y hundido. Dejó escapar un sollozo ahogado cuando miró el cuerpo de la persona que lo había estado protegiendo: Remus Lupin. El hombre lobo había tomado el Avada Kedavra enviado por Tom Riddle que estaba destinado a él, ya que Harry estaba usando la misma maldición sobre el Señor Oscuro y rompió el Priori Incantatem al mismo tiempo. Excepto que ninguno de los seguidores de Voldemort se había arriesgado a correr delante de su maestro para protegerlo.

Voldemort estaba muerto, al igual que todos los demás mortífagos, incluido el espía Snape.

De hecho, la parte más difícil de ver para Harry fue presenciar la muerte de sus amigos y ver sus cuerpos tirados en la tierra. Dumbledore, McGonagall, Flitwick, incluso Hagrid; todos se habían ido. Además de Ron y Hermione... diablos, todos los estudiantes que alguna vez habían asistido a Hogwarts. No se habían librado.

Harry simplemente permaneció sentado en el suelo, sin pestañear, con los brazos sueltos a los costados mientras lágrimas silenciosas corrían por sus mejillas. "Se han ido todos. La Profecía... era correcta. Se suponía que uno de nosotros permanecería vivo... mientras todos los demás morían."

Se dejó caer hacia atrás y aterrizó con un ruido sordo en el suelo frío, mirando vacío el cielo lloroso: empezaba a llover... y no le importaba.

"¿Qué está pasando? ¿Qué ha pasado?"

Los apagados ojos verdes de Harry se abrieron ligeramente cuando giró la cabeza hacia un lado para mirar quién acababa de hablar. Ningún sonido de sorpresa salió de su boca y simplemente parpadeó hacia Nagini, que se deslizaba sobre la hierba manchada de sangre cercana.

Harry no tenía idea de cómo había sobrevivido la maldita serpiente, pero si quería morderlo y terminar con su miserable vida, era más que bienvenido hacerlo. Pero el mordisco nunca llegó. Nagini parecía completamente desorientada y sin idea de lo que había sucedido en el terreno del otrora magnífico castillo, y eso despertó ligeramente el interés de Harry.

"¿Por qué te ves tan confundida, Nagini? ¿Por qué no me matas, como quería tu amo? ¿Cómo trataste de hacer en tantas ocasiones? " le siseó a la Cobra para llamar su atención.

Funcionó; Nagini se giró aún más hacia él y se deslizó hasta estar al lado del cansado chico. "¿Hablas? Sin embargo, no sé de qué estás hablando. Lo único que recuerdo es a un hombre mirándome y murmurando algo que no reconocí, y luego el resto es borroso para mí".

Harry casi se burló desconcertado. "No puedo creer que esto sea posible", dijo. murmuró para sí mismo, pero habló en lengua pársel sin darse cuenta. "No pensé que Imperius pudiera trabajar con una serpiente. Supongo que has estado bajo el control de Voldemort todo este tiempo."

The World Without Me [Traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora