El gran día llegó, hoy me enfrentaría a Victoria por primera vez. Estoy cagado hasta las patas, llevo conmigo mi rifle, mi cuchillo y una pistola que me regaló papá. Se que como vampira no tengo chances de hacerle nada con estas armas. Pero si puedo activar mi don y hacerla humana, ahí la ventaja la tengo yo. Un solo tiro a la cabeza y listo. Es todo lo que necesito. Me preparo mentalmente para que no pase lo mismo que pasó con Laurent, pero todo depende de Dios.
Ya estábamos listos en casa con papá y el tío Harry. Papá me dijo que me quedara al lado del tio todo el tiempo, lo cual es mejor así se cuando defenderlo. Bella llega en ese momento y me mira con dudas, yo le doy una mirada tranquilizadora, y nos fuimos.
Mientras estábamos en el bosque, con el tio íbamos borrando las huellas que encontrábamos en el camino, el las borraba y yo vigilaba el perímetro.
- Esta todo muy tranquilo.
Me dice, observando a los alrededores.
- La calma que presede a la tormento. Tío atento hay una fría dando vueltas.
- Lo sé hijo, lo sé. No te alejes.
No termino de decir eso, que sentí como alguien me toma del cuello de la remera y tiran hacia atrás. Mi espalda golpea contra un árbol dejándome sin aire. Hago el esfuerzo por respirar, pero se me dificulta, creo que tengo una costilla rota. Pongo el mayor esfuerzo posible para levantarme.
- ¡No Charlie quieto! No te muevas hijo, tranquilo.
Me dice mi tío, y me ayuda a sentarme. De repente aparece Victoria cayendo frente a él, que se puso delante mío para protegerme. Presiono el gatillo del rifle varias veces para que papá escuche y venga rápido. Victoria huye y el tio me mira.
- Char, no cierres los ojos.
Me dice como puede, siento como la boca se me llena de sangré y como poco a poco todo se pone negro
- ¡Charlie, Harry!
Es lo último que escucho antes de caer inconsciente.
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Despierto desorientado, no se donde me encuentro.
- Junior.
Me dice alguien.
- ¿Donde estoy?
Pregunto, tengo la garganta seca e intento moverme, al hacerlo siento un fuerte dolor en mi costado.
- Shhhh tranquilo compañero, toma un poco de agua. - me alcanza un vaso con una pijita - estas en el hospital Junior. Sufriste una fuerte contusión. Te fracturaste dos costillas y te perforaron el pulmon.
Me dice la doctora Wayne.
- ¿Hace cuánto estoy acá?
- Dos días Junior.
No puede ser. ¿Que paso con mi tío, con Bella?
- Mi tio ¿Donde está mi tio?
Me pregunto desesperado.
- Charlie, tranquilo ¿si? Acordate de tu corazón.
-¡ME IMPORTA UNA MIERDA MI CORAZON NECESITO SABER SOBRE TIO!
Le gritó desesperado.
- ¡Charlie! No me grites y cálmate. Ya hijo tranquilo. - la veo suspirar y su mirada es de pena, comienzo a negar con la cabeza, y las lágrimas caen de mis ojos - lo lamento hijo, pero tú tío tuvo un infarto. No pudimos hacer nada.
- No no no no no. NOOOOOOOOOO
Grito llorando, Harry murió y no pude salvarlo. No pude hacer nada. Mi tío se fue. Siento un dolor y vacío en mi pecho, duele demaciado.
- ¡NOOOOOOOO! ¡AHHHHHHHHH!
- Hay que sedarlo enseguida antes de que abra sus heridas o tenga un paro.
Siento como de a poco todo se va calmando, como si flotara. El dolor ya no quema y otra vez todo se vuelve negro.
Al despertar otra vez me siento raro. Suspiro con fuerza y eso me un puntazo en el costado de pecho.
