Rock Star! /⁠/ Sonadow

3.

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—¿¡Pero que demonios te pasa!?—Una voz alterada resonó en una oficina—¿¡Eres tonto o que!?

Estaba el televisor prendido en el canal de las noticias, era Darky en la ciudad, aparentemente solo y en una cafetería.

—¿Fuiste a una cafetería? Eso es lo que estabas haciendo ayer ¿Cierto?

Aquel erizo negro solo miraba al suelo, se sentía humillado.

—Era de esperarse de alguien tan patético como tú, a partir de ahora tu guardaespaldas estará aún más pendiente de ti y en dónde yo descubra que haces otra cosa como está juro que acabaré con tu carrera y tu reputación ¿Entendiste?— El chacal imponía su voz tan amenazante y furiosa al erizo que se estremecía al escucharla.

—¡¡Que si entendiste!!

—Si señor—Tras pronunciar aquellas palabras el chacal cerró la puerta de la oficina con mucha fuerza dejando solo al erizo.

Shadow salió hacia su habitación, se sentó en el piso y apretó sus puños, quería llorar de lo mal que sentía en ese instante, una mezcla de frustración, tristeza y enojo.

Una vez más, ya sentía que ese animal lo iba a volver loco, y precisamente dos meses antes de su próximo concierto.¿Ahora que se suponía que iba a hacer? Claramente no quiere quedarse más ahí, pero dadas las condiciones, tampoco puede irse.

★

Sábado en la mañana, La madre de Sonic se disponía para hacer oficio en la casa. Empezó barriendo la sala y arreglando el comedor, pero con lo que no contaba, era que encontraría un arete de estrella que claramente no era de ninguno de sus hijos.

Haciendo memoria de los últimos días, recalcó lo que había hecho Sonic el día anterior, pues se supone que el llegaría a la casa antes que ella y su hermano, por lo que decidió directamente preguntarle a el.

—¡Sonic!—Gritó.

—¡Ya voy ma!—Replicó el azul mientras bajaba las escaleras para finalmente llegar a dónde estaba su madre.

—¿De quién es esto?—Dijo enseñándole el arete—No me digas que andas trayendo personas a la casa... ¿Tienes novia?—Soltó de repente con una sonrisa pícara en la cara.

—¿Que? No, no tengo pareja—Contestó algo nervioso.

—¿Entonces de quien es esto? A mí no me engañas jovencito, se que ayer estuviste solo en la casa por un momento—Ella estaba convencida de que su hijo escondía algo, pensar que por fin había conseguido a alguien que lo acompañará le emocionaba.

—Bueno...—Se rascó la cabeza intentando pensar en algo creíble, su madre no se comería el cuento de que ayer estuvo con un artista súper famoso y encima fue a su casa, eso solo dejaría a su madre más material para dudar de él—Me lo dió un amigo.

La madre arqueó una ceja dándole una mirada de desaprobación.

—Si bueno... Ya me voy, tengo que ir al trabajo—Dijo para después coger el arete disimuladamente.

Sonic solía trabajar entre semana en horario completo y medio día los sábados.

—¡Adios!

Rápidamente el azul salió de la casa sin darle tiempo de contestar a su madre, ella siguió en sus labores y el cobalto en dirección al café.

Antes de ir directamente al trabajo, tomo un desvío para entregarle el arete a Darky, pues ya sabía dónde vivía. Aunque fuera algo insignificante como un simple arete, quería dárselo, talvez y era más importante de lo que parece.