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—Hola Pastelito, feliz martes ¿Como te trata la vida? A mi muy bien, por cierto el cheesecake estaba delicioso pero aún necesito saber, ¿Que estabas haciendo ayer para que te fueras tan rápido?—Insistía un erizo plateado a su amigo azulado, pues sus acciones del día pasado le resultaban extrañas.

—Silver ya te dije, que era un compromiso al que no podía faltar—explicaba de nuevo mientras organizaba sus libros, pues ahora se encontraban en la universidad.

—Si es algo tan simple, ¿Por qué no me dices a qué tipo de compromiso te refieres? Se supone que no nos ocultamos nada Sonic—Estaba curioso y atento a las palabras del azul.

—Lo se, pero... Te prometo que te contaré cuando sea el momento—Silver hizo una cara de decepción pero de aceptación al mismo tiempo, luego entro el respectivo profesor a dictar clase.

Al final de la jornada académica los dos amigos erizos se dirigían a sus casas mientras hablaban en el camino.

—Mmm oye pastelito, ¿Si pudiste conseguir el boleto para el concierto al que tanto querías ir?.

—Ahh si, se me olvidó contarte pero si, ya lo tengo, el concierto es en un mes—mencionó dirigiendo su mirada al plateado.

—¡Genial! Me mandas fotos—Los erizos caminaron hasta llegar a la casa de Sonic.

—Si, bueno Silv nos vemos mañana—De despedía dándole un abrazo que el contrario respondió.

—Adios amigo, cuídate—el siguió su camino hacia su casa, igual no quedaba tan lejos — ¡Por cierto, eso es una amenaza!—gritó mientras se iba.

Sonic soltó una pequeña risa y entró a su hogar, ese día no podía visitar a Shadow, pues tenía cosas de la universidad por hacer.

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Nuestro erizo negro favorito estaba, como siempre, encerrado en su mansión lidiando con su eterno aburrimiento, pues él sabía que Sonic no lo visitaría siempre.

Entonces sonó su puerta, el abrió y el mayordomo le dirigió la palabra.

—Jóven Shadow, Infinite ya está aquí —Su mugroso manager ya había llegado para discutir temas sobre sus próximos proyectos y conciertos.

—Bueno, gracias, ya bajo—El azabache bajó a la sala en donde se encontraba ya Infinite.

—Buenos días Darky—Saludó el chacal.

—Buenos días Infinite—Correspondió el erizo.

—Quería asegurarme, ¿Ya todo está listo para tu próximo concierto aquí?

—Si, ya lo está—Dijo cortante.

—Bien, entonces definamos cuales serán tus próximos proyectos, una cadena de perfumes está necesitando un modelo para su nuevo producto, yo conseguí un contrato el cual debes obedecer—Decía intimidante y decidido— El próximo viernes iremos al estudio para que te tomen las fotos.

—Entendido—Por lo general no tenía caso oponerse a su manager, por lo que solo asentía decepcionado—¿Ya puedo irme?

—Volveré el jueves, no intentes estupideces—El chacal salió de la mansión, mientras Shadow solo se llenaba de rabia por tener que obedecer a alguien como él.

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El horario del miércoles para la universidad tenía varios huecos, pero uno de ellos estaba por la mañana, lo que significaba que Sonic no tendría que ir al trabajo y tampoco a la universidad, así que con una sonrisa en el rostro fue a ver a Shadow.

—Shadooow—Ya se conocía la ruta y los atajos, por lo que llegaba rápido.

El negrito saltó del susto, el azul llegó de la nada—Hola Sonic.

—¿Como has estado? Ayer no pude venir por la universidad.

—No te preocupes, se que tienes una vida y... de todas formas ayer no hubiera sido un buen día para que vinieras—Dijo algo decaído recordando la presencia del chacal.

Sonic lo miro confundido—Mmm? ¿Porque?

—Ayer estuvo aquí mi manager, sería fatal que te descubrieran, mejor yo te diré que días puedes venir—El azul asintió con una sonrisa.

—¡Oye! Quería mostrarte algo—El erizo empezó a buscar en su bolso la entrada del concierto—¡Ta-Da!

Shadow lo miraba sin decir nada, después solo hizo una pequeña sonrisa.

—Ya veo, así que irás al concierto.

—¡Asi es! Estuve ahorrando un buen tiempo para comprar una entrada, siempre quise ir a alguno de tus conciertos—Dijo mientras se le salía su modo fan.

El moreno estaba callado, no sabía que decir, pero sentía que Sonic se había esforzado mucho para comprar su entrada, eso lo conmovió y hasta lo llenó de ánimos.

—Entonces ya tendré a alguien que me anime desde el público—Dijo sonriendo.

—Si me ves me avisas—Le guiñó un ojo a lo que el negrito soltó una pequeña risa—Por cierto Shadow ¿Tienes programados más conciertos?

—Actualmente no, estaba en una gira por lo que tenía que viajar mucho, pero esa gira termina aquí, en mi ciudad natal, así que supongo que nos quedaremos hasta que a ese chacal se le dé por venderme—Contestó algo alterado.

—Ya veo... Así que creciste aquí—Sonic notó que su pregunta desordeno al azabache, quería saber más sobre él, pero todo a su ritmo. Pero entonces Shadow habló.

—Si bueno, mucho de mí, dime, ¿Como vas con tu trabajo?

—¿La cafetería? Bien pero digamos que tengo un horario apretado, de todas formas encontraré la forma de visitarte, no te preocupes—Las palabras del cobalto transmitían seguridad y calidez.

—Gracias por eso, por cierto, mañana no puedes venir y tampoco el viernes, tengo cosas pendientes relacionadas a un perfume—Dijo el negrito.

—¿A si? ¿De que se trata?—Cuestionó curioso.

—Al parecer voy a promocionar un perfume, no te rías cuando salga—Sonic rió.

—Esta bien, yo seré el primero en comprarlo—El azabache también reía un poco.

Después de un tiempo, era la hora de partida, Sonic se despidió de Shadow y se dirigió a la universidad.

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Notita

Holaaaa, espero que les esté gustando la histora

Si es así ayúdenme con la estrellitas que me motivan a seguir escribiendo, me ayudarían mucho

Los quiero baii





Rock Star! /⁠/ Sonadow Donde viven las historias. Descúbrelo ahora