Opuestos no tan opuestos

Capitulo 4 : Conociéndonos

Brooklyn

Tan jodido....

Volví a casa junto con Asher quien nuevamente me preguntó si había quedado claro todo y que me "comportaría bien" mientras estuviera fuera …. ¿¡Acaso soy un niño!?
Habían transcurrido unos días y mañana sería el partido de ese pulgoso. Como siempre, se sacó la ropa, se acostó y volteo a verme del otro lado de la barrera.

- Oye ¿Estas despierto? - dijo susurrando.

- Si - dije cortante.

- ¿Quieres venir mañana? - sonrió .

- No - respondí tajante.

- ¿Quién me garantiza que no entraras en crisis y te embrutecerás de alcohol, fumaras y aparecerás drogado en media calle a las 10 pm mientras que manejo de regreso a casa?

- ¿eres cristiano? - pregunté .

- no...¿ realmente? - dijo confundido .

- ¿Crees en Dios? -

- Ehh... ¿Sí? -

- Bueno, entonces reza para que no pase nada -

Al día siguiente

"Me obligó a ir ...  " Pensé.  No me iba a dejar en paz a menos de que accediera.
Si que es un buen hermano mayor... no como yo que le enseño groserías a mi hermano menor.

- Te veo en el partido de hoy ¿Verdad? -

- Lo que digas mamá - replique con un tono sarcástico.

[...]

No sé nada de fútbol americano, pero puedo decir que hasta ahora "el Sr. vice capitán" está arrasando con cualquiera que se le ponga enfrente y la tabla de puntos va subiendo a favor de nuestro equipo. Él se mueve como una bestia y gracias a su altura puede intimidar a el que se le ponga enfrente.

Sentí una mirada a lo lejos y un olor familiar vino a mi nariz.... Hombres lobo... Me volteé a ver de dónde venía la mirada y me di cuenta que había una mujer con dos niñas pequeñas del otro lado de las gradas ... Oh no ....

Asher

A la mitad del encuentro me percate que mi hermana estaba aquí junto con las gemelas ... Si llegan a acercarse a mí, ellas van a oler el olor de Brooklyn.

Fingí que estaba agotado para que el coach me diera un descanso y mire a Brooklyn quien al parecer seguía entretenido en el juego hasta que no me vio más y me buscó con la mirada. Nuestros ojos se encontraron y le hice señales las cuales claramente no entendió, se encogió de hombros y siguió viendo el juego.

Volví a entrar una vez que había pasado el 3er cuarto, rezando para que mi hermana no se le acercarse o habría consecuencias.

Brooklyn

Puede que no haya entendido las señales del pulgoso, pero puedo decir que se perfectamente a lo que se refiere. "Evitar cualquier contacto con ellas" ... Probablemente eran de su manada a la cual no había regresado en días.

Una vez terminado el juego que, por cierto, nuestro equipo ganó, mientras bajaba las escaleras Asher apareció de la nada y me tomo del brazo para llevarme a los vestidores con prisa. Detrás de nosotros la mujer con las dos niñas lo llamaron.

- ¡Asher! -exclamó

Pero ninguno volteo . Una vez lo intente y él con su otra mano tomo mi mentón y lo giro hacia delante diciendo que no debía presentar atención.

Al llegar a los vestidores, el lugar estaba vacío, había casilleros y estantes, la luz de la luna iluminaba el lugar a través de las pequeñas ventas. Asher abrió su casillero y me metió dentro. Al pasar unos minutos se oyeron pasos de tacones.
Era su hermana quién tenía la piel canela al igual que el, ojos cafés y pelo castaño, un cuerpo lleno de curvas y una altura promedio la cual era aumentada por los tacones.

- Asher ¿Porque estás evitando a la manada? - dijo ella indignada y preocupada. Se acercó a Asher, pero este retrocedió.

- Asher... ¿Porque huyes? - dijo preocupada.

- Eh... veras ... he contraído una enfermedad y no quiero contagiar a ninguno del clan - se excusó el con una risita nerviosa.

- Asher... Tus excusas baratas no sirven conmigo, tú sabes que los hombres lobo somos inmunes a la mayoría de las enfermedades humanas - dijo la mujer cruzada de brazos.

- Jessica y Jenna están afuera y quieren ver a su hermano, papá y la manada están preocupados ¿Puedes al menos dejar que te vean? - dijo la mujer decepcionada.

-Evelyn, .... ¿Puedo confiar en lo que te voy a decir no lo sabrá nadie más? - dijo Asher cabizbajo

Estaba atónito, Asher le iba a decir a su hermana que se había enlazado a un vampiro. Lo más probable era que me matarían para "liberar" a Asher de un lazo el cual ni yo sabía cómo romper y si no, lo echarían y quitarán de la herencia, así como le dirían a mi familia, a la cual no le importo. O, Ellos terminarían de echarme junto con Asher para terminar siendo exiliados.

- Perdí el collar lunar que me dio mamá. - Dijo Asher mientras fingía culpa

Suspiré de alivio, mi vida estaba en juego .

- ¿¡Que!? - dijo su hermana indignada. Aunque habría reaccionado igual o peor si se enteraba.

- Sé lo importante que son las reliquias de mamá por eso es que he estado buscando el collar, no pienso volver a casa hasta no encontrarlo. Conociendo a papá, mejor encontrarlo a volver. - se excusó hábilmente mientras que se rascaba la nuca en señal de culpa.

La expresión de su hermana no cambio del todo, pero si se mostró más comprensiva. Sus hermanas menores llegaron corriendo a abrazarlo a lo que él respondió.

- ¡Jenna, Jessica, las extrañe mucho! - exclamó Asher con una sonrisa mientras abrazaba a las gemelas.

- ¡Nosotros también te extrañamos! ¿Verdad Jenna? - pregunto la niña de vestido azul a la de vestido rojo en busca de respaldo.

- ¡Si! Papá ha estado muy preocupado, dice " Ojalá ese muchacho no haya cometido una estupidez" - dijo la niña de vestido rojo intentando imitar la voz de su padre.

- ¡Jenna! ¿Qué les dije de repetir groserías de papá? - regañó la mujer con las manos en la cintura.

- No decir groserías lo sabemos hermana Evelyn - contestaron las niñas en unísono.

- Bien, escuchen a su hermana y pórtense bien ¿Sí? - pregunto Asher mientras se levantaba.

- ¡Ok! - asintieron las infantas en unísono.

Asher se despidió de sus hermanas y una vez se fueron, el abrió su taquilla.

- ¿Todo bien ahí dentro? - pregunto al
abrir el casillero.

- Al fin, ya era hora - dije suspirando.

-  Y contestando tu pregunta, solo tiene un ligero olor a rayos - repliqué siendo sarcástico.

- Que raro, yo suelo ser bastante aseado, tal vez, es a ti quien falla la nariz - contestó indignado

- vámonos a casa ¿Sí? - dijo el poniendo su brazo en mi hombro mientras caminamos fuera de los vestidores.

- ¿Desde cuándo es tu casa? - dije volteando a verlo con incredulidad.

- Desde que me dejaste dormir ahí. Me suelen decir que me sienta como en casa, eso es hospitalidad, algo que claramente te falta - respondió el con una sonrisa forzada mientras palpaba mi espalda.

- ¡Ja! Lo que digas intruso - exclamé indignado por tal insulto, aunque en parte era verdad...

Narrador

- Jenna ¿Tú también sentiste ese olor raro que tenía el hermano? - pregunto Jessica a su hermana gemela.

- Si, olía como a muerto - contestó Jessica a favor del comentario.

- Asher está raro ¿Cierto?... Oculta algo ...- volteó la mayor hacia las gemelas que iban de la mano mientras caminaban a casa en medio de la calle iluminada por postes y pinos en los lados.

Continuará...

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