Amigos.

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5 años

- ¿Quieres jugar conmigo? - una pequeña niña con dos trenzas en su pelo y un hermoso vestido floreado se había acercado hasta un niño de su misma edad que permanecía sentado solo en el patio de la escuela - mí nombre es Samantha pero mi familia me...

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- ¿Quieres jugar conmigo? - una pequeña niña con dos trenzas en su pelo y un hermoso vestido floreado se había acercado hasta un niño de su misma edad que permanecía sentado solo en el patio de la escuela - mí nombre es Samantha pero mi familia me dice Sammy - se presentó sentándose a su lado en el suelo.

- Soy Daryl - dijo el niño - es un gusto conocerte Sammy

- Tu nombre es gracioso - le respondió ella y el niño que estaba acostumbrado a que se burlaran de el por ser pobre agachó la mirada - me gusta, es diferente - le sonrió la niña - ¿Porque estás solo? - él se encogió de hombros, siempre estaba solo y se había acostumbrado

- Los demás dicen que soy raro - le niña se puso de pie y él pensó que se iría, no lo sorprendió, siempre lo hacían.

- Bueno los niños son malos... uno de ellos se burló de mis trenzas - le respondió - mí mamá dicen que son lindas así que no importa

- creo que son bonitas - él alzó su rostro para verla

- ven - extendió la mano para que la tomara - vamos a jugar - él acepto su mano y durante toda la tarde estuvieron juntos, cuando la hora de volver a casa llegó se prometieron ser amigos por siempre.

10 años

- ¿estás seguro de esto? - le pregunto Sam

- ¿no confías en mí? - Daryl la miraba desde arriba del árbol con la mano extendida esperando que ella la tomé - no voy a dejarte caer Sammy

- ¿lo prometes? - dijo ella tomando su mano

- lo prometo - le respondió él, subieron hasta lo alto del árbol y se sentaron en una de sus ramas

- papá va a irse de nuevo - le contó la niña - los escuché hablar anoche, mamá dijo que era estúpido que siempre tuviéramos que quedarnos aquí, que podemos ir con él

- ¿Vas a mudarte? - le pregunto con miedo, Sam era su amiga, la única que tenía. Desde esa vez que se conocieron a los cinco años siempre estaban juntos.

- Papá dijo que no, que volvería en unos meses - Daryl la miro con alivio

- Me alegro, eso significa que seguiremos siendo amigos

- No seas tonto siempre seremos amigos - le respondió ella apoyando la cabeza en su hombro, el niño no estaba acostumbrado a las muestras de afecto. Padre alcohólico igual que su madre y su hermano mayor siempre estaba metiéndose en problemas, no era la familia más normal del barrio pero por alguna razón Sam, la niña que venía de una familia con dinero, hija única y sin problemas en casa lo quería, siempre se lo demostraba. Quizás por eso ella era con la única que no se sentía incómodo cuando lo abrazaba o recostaba su cabeza en su hombro tal y como lo estaba haciendo en ese momento.

El Corazón De La BestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora