Hoy era nuestro último día en Portugal, el tiempo se me había hecho tan corto que se me había olvidado hasta que debíamos volver a Barcelona. Me daba mucha pena tener que despedirme de Viseo, pero aún más de la familia de João y de sus amigos, especialmente de Fernanda y Marta.
Nos habíamos hecho muy amigas estos últimos días, ellas siempre me decían que les iba muy bien tener otra chica entre tanta testosterona. Me había acostumbrado a la vida de aquí, pero sobre todo a despertarme cada día al lado de mi portugués favorito. Por eso cuando me giré y lo vi abrazadito a mi, durmiendo como un bebé, me dolió pensar en que a partir de ahora volveríamos a dormir separados.
Le dejé un beso en la frente a João, quien se removió medio despertándose, y abrió sus ojitos dándome una mirada adorable que hizo que quisiera comérmelo a besos. Se frotó los ojos tratando de acabar de ubicarse y rápidamente abrió sus brazos para que yo le abrazara. No lo dudé ni un segundo, me tiré encima suyo provocando su risa, y el rápidamente me encerró contra su pecho mientras dejaba un beso en mi pelo.
- ¿Cómo ha amanecido la chica más guapa del mundo? - me preguntó
No pude evitar reírme ante su exageración, y debo admitir que hasta me puse un poco roja
- Pues feliz, como cada mañana que me levanto a tu lado - le respondí
João se rio y me besó. Nos se en que momento me había vuelto yo tan romanticona, pero es que a su lado me salía muy natural decir este tipo de ñoñerías.
Nos quedamos un rato más abrazados, mientras el acariciaba mi espalda y dejaba besos cariñosos en mi pelo. Quería, no, mentira, necesitaba, que ese momento fuera eterno. No quería separarme de el por nada del mundo, me había acostumbrado ya a ser su niña, y aunque al volver a Barcelona seguiríamos juntos, no sería lo mismo.
- No me quiero ir - murmuré contra su pecho
- Yo tampoco cariño - me respondió mientras seguía acariciándome la espalda - pero podemos volver siempre que quieras, ya has visto que mi familia te adora, y que mis amigos casi te prefieren a ti antes que a mi.
- Siempre te voy a agradecer que me hayas traído, portugués
- No sabes lo feliz que me hace que te haya gustado tanto Viseo, mi amor - me dijo dándome otro besito
Nos pasamos un buen rato más revolcándonos en la cama repartiéndonos besos y caricias uno al otro, pocas veces había sido tan feliz como lo era con João a mi lado. Entonces oí mi móvil vibrar, miré, y era un mensaje de Fernanda
Fer 💕
Hello guapa! Habíamos pensado en ir a desayunar todos juntos a modo de despedida ¿Os va bien?
Me giré hacia João quien se estaba quedando dormido otra vez y le di un beso en el cuello para evitar que se me durmiera otra vez
- Mi amor, me ha escrito Fer para preguntarme si nos apetece ir a desayunar con el grupo para despedirnos - le informé
- ¿A ti te apetece? - me preguntó
- Sí, la verdad es que me hace mucha ilusión verlos una última vez
- Pues no se hable más - sentenció mi chico
Agradecía muchísimo que el siempre pusiera mi interés por delante del suyo, y sin poder aguantarme le di un beso corto en los labios a modo de agradecimiento.
Hola nena, pues nos va perfecto, yo también pensaba escribiros para ver si podíamos quedar un momento
¿Hora y lugar?
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Is it worth it? - João Félix
Roman d'amourEn el vibrante escenario del fútbol mundial, donde la pasión y la destreza convergen, surge un romance inesperado entre João Félix, la estrella del FC Barcelona, y Clara Hernández, la encantadora hija del renombrado entrenador del equipo. Entre los...