⋆Snowman⋆

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"Yeah, you are my home, my home for all seasons
So come on, let's go"

-Sia

Navidad finalmente había llegado, su tan esperada bienvenida fue recibida por toda la población del mundo. Reían, jugaban, lloraban y amaban con intensidad en esas fechas.

Sonrisas eran entregadas en cada rincón oscuro, transformando sus colores y volviéndolo un poco menos sombrío. Todos estaban preocupados por tener una cena perfecta y apacible junto a sus personas especiales.

Y esos adolescentes no eran la excepción, tenían un gran día planeado.

-¿Tu madre llegó?- Dijo el castaño, del otro lado del teléfono.

-Lo hizo, cuando te fuiste por la mañana-

-Qué alivio- Dijo el castaño.

-¿Te sientes mejor?-

-Sí- Contestó, alegre -Mi mamá dijo que minutos después de que me saliera de casa anoche, Namjoon y Jin corrieron a todos mis tíos-

-Se merecen eso y más-

-Sí, definitivamente- Taehyung terminó de alistarse -Ah, por cierto, gracias por avisarle a mamá que estaba contigo, no se me pasó por la mente-

-Está bien, de no ser así quizá ya no dejaría que vinieras conmigo-

-Sería una tragedia, me gusta dormir contigo- Dijo, un poco apenado.

Jungkook se sonrojó a tal grado en el que sus mejillas eran del mismo color de la manzana que estaba comiendo.

-También me gusta dormir contigo, Taehyungie-

Una voz en el lugar de Taehyung lo llamó -Tengo que irme, Jin está furioso porque su pay no quedó como esperaba-

-Está bien, Tae, te llamaré por la noche, lamento que no podamos vernos hoy-

-Sin preocupaciones, disfruta este día con tu mamá, saludala de mi parte-

-Estaba pensando que podía presentarlos mañana, ¿te parece bien?- Dijo el azabache.

-Me parece perfecto, Jungkookie, nos llamamos después-

Taehyung corrió deprisa a la cocina para tratar de arreglar el desastre de su cuñado, riéndose mucho en el proceso.

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La tarde llegó y con ella la gente se llenó de espíritu navideño. Entre las calles podían percibirse exquisitos olores de los platillos que preparaban.

Jungkook se estaba bañando para cenar en unas horas. Una linda chaqueta de mezclilla afelpada y unos pantalones a juego yacían en su cama, completando su vestimenta. Terminó de arreglarse y se colocó un adorable gorro blanco junto a unas botas del mismo color.

Al salir de su habitación, un gran sentimiento nostálgico pasó por su cara. Al oler la deliciosa cena que su madre preparó, recordó las anteriores navidades, aquellas en las que, con mucha dificultad, salía de su cama.

Esa noche se sentía diferente. Aquél sentimiento inexplicable de vacío se encontraba dormido en su interior y por alguna razón no despertaba con nada. Quizá esa navidad no despertaría para arruinar sus pocos momentos de felicidad.

-Jungkook, avisale a Hoseok que la cena está casi lista-

-Está bien-

Esa noche Yuna invitó al pelirrojo junto a su madre para cenar juntos. La madre de Hoseok y ella siempre se llevaron bien a pesar de no frecuentarse tanto.

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