⋆Niño,⋆

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"¿De qué se trata la vida si no hay dolor? ¿Por qué me la paso evitandolo?"

-Ed maverick

Pasaron cuarenta minutos y la sesión de Jungkook llegó a su fin. Al salir del consultorio, vió la soledad de las bancas, Taehyung ya se había marchado.

Un poco desilusionado, frotó sus manos contra sus brazos y se abrazó a si mismo en busca de calor, el suéter le había ayudado a mantenerse cálido.

Salió de la clínica y a lo lejos pudo ver una silueta familiar. Un alegre pelirrojo con un par de malteadas se dirigía a él de prisa.

-Jungkookie, ¿cómo te fue?- Dijo Hoseok mientras le daba un trago a su bebida.

-Bien, de verdad estoy sintiendo un leve cambio- Comentó el pelinegro.

Hoseok se percató de la nueva prenda que portaba el azabache, lo miró confundido y preguntó -¿Nuevo suéter?, es lindo-

-No, cuando venía para acá me mojé así que un chico me prestó su suéter- La sonrisa de unos instantes antes se avecinaba de nuevo al recordarlo.

-Así que... un chico- El pelirrojo formó una sonrisa y subió ambas cejas de manera traviesa -Te dejo 1 hora solo y ya estás coqueteando con alguien-

Jungkook se atragantó con la bebida y abrió sus ojos en demasía -Basta, Hope, el chico solo fue amable-

-Claro, ¿y por qué parece que tus mejillas se queman?-

-Es el calor-

-Estamos a 6 grados, Kook-

Hoseok no pudo evitar dejar salir una carcajada al ver a su amigo hirviendo de vergüenza mientras tocaba sus mejillas.

-Solo me avergüenza que lo malinterpretes, ¿okey?- Jungkook volvió a dar varios sorbos a su malteada.

-Bien, te dejo de molestar- El alegre muchacho tomó del brazo al azabache y emprendieron camino -Vámonos a tu casa-

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De camino a su hogar, Jungkook y Hoseok decidieron pasar a cenar a aquella cafetería que tanto les gustaba a ambos. Su ambiente era acogedor desde que entrabas hasta que permanecías en él.

Contaba con pocas mesas y el espacio era un poco reducido pero las decoraciones le daban un toque especial al local.

-Y ahora sí, cuéntame, ¿cómo te has sentido en la terapia?- Habló Hoseok.

-No voy a mentirte, le tengo miedo a las recaídas, por lo que he escuchado son peores- Introdujo un trozo de crepa a su boca -Nunca he experimentado una porque el sentimiento que tengo en el pecho jamás se va-

Hoseok lo miraba con completa atención, entendiendo cada uno de los puntos que su amigo mencionaba.

-Pero la terapia está ayudando- Continuó -Al menos no he tenido un ataque de ansiedad en semanas-

-Es bueno que las mejoras comiencen a manifestarse- Hoseok lo tomó del hombro -Seamos pacientes-

-Aún no encuentro la manera de agradecerte todo lo que haces por mí-

-No tienes que hacerlo, disfruto mucho estar contigo y apoyarnos mutuamente-

Su conversación fue interrumpida por un par de jóvenes que peleaban enfrente de ellos. Al parecer una de ellas era víctima de una infidelidad.

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